Sin Aliento ⋮ YuTae

Episodio 19.

El ambiente era frío, los días comenzaban a ser más fríos de lo habitual. Era el noveno día desde que llegaron de Sea, sus reclutas ahora tomaban un descanso después de haber entrenado gran parte del día, era la cena. 

Se había encargado de entrenar sus sentidos, así como había entrenado él. Por el corto tiempo que tienen esperaba que den resultados favorables, muchos de aquellos hombres demostraban ser capaces para entrar al campo de batalla ahora mismo si fuera el caso.

—Tu rostro refleja puro orgulloso, has progresado tanto. —Yuta llegó a su lado y lo abrazó, Taeyong recostó su cabeza en su hombro. 

Desde el primer piso, Taeyong había estado observando a su gente cenar en el comedor, alrededor de trescientos hombres ¿Dónde entraba tanta gente? Taeyong pensaba que eran pocos pero a favor teniendo la oscuridad.

—¿Crees que estemos listos?

—¿Me lo preguntas a mí? —bromeó Yuta quién no tiene idea de lo que es estar entre guardianes y guerreros a pesar de que años atrás también se había enlistado y entrenado.

Taeyong levantó su cabeza para mirarlo a los ojos y sujetó su rostro con sus manos, el joven apretó sus manos aún más en su cintura.

—Estamos volviendo a los entrenamientos antes de partir a Blaktay.

—Eso lo sé, Yong. Pero me refiero a que no sé de esto pero creo y doy fé a la capacidad de cada hombre que has reclutado y permitido entrar en esta fortaleza. Pienso que deberías consultar cuándo partirán con Renjun y Jeno, no soy el indicado para darte una respuesta pero confío en que has hecho un buen trabajo.

—Llegas a ser tonto Yuta.

Taeyong se alejó, ambos se separaron al ver a Renjun cerca.

Renjun ignoró el momento que había interrumpido para agregar; —Nadie duda de las capacidades de Taeyong, es un buen cabecilla. Aunque, Yuta, eres parte del equipo también ¿Por qué te haces a un lado? Estás al mismo nivel que nosotros.

—No tengo los años de entrenamiento que ustedes...

—Nos informaste que participaste en ello hace años y con el refuerzo de ahora debes tener más confianza en ti. —Expresó casi perdiendo la paciencia, miró a su hermano mayor y se obligó a mantener la compostura.

No tuvo buen día.

—¿Ocurre algo, Jun?

—Nos llegó información de que Worltay cerró sus puertas principales. Nuestra partida tendrá que adelantarse dos días porque también tienen pensado cerrar los portones de los muros pronto y todavía no logramos contactarnos con el líder de Worltay.

—Eso se complica. Mañana saldré a primera hora con Jeno y diez soldados.

—¿Bajarán? —preguntó Yuta dudando.

—Así será. Tenemos que comunicarnos con el líder de Worltay, está de nuestro lado pero necesitamos tener nuestro último encuentro, ver si hay algún cambio. —Taeyong dijo decidido.

Yuta asintió, no había nada qué hacer pero no tenía un buen presentimiento. Había algo que le da desconfianza.

—Tae. —RenJun se arrimó al barandal mirando a los soldados—. Anoche tuve una visión.

El peliblanco se quedó quieto esperando a que su hermano pueda centrarse en la conversación, parecía ido.

—¿Qué había en tu visión? —Yuta se atrevió a preguntar ante el silencio de ambos hermanos, RenJun afligido, suspiró.

—Creo que Taeyong no debería bajar a Worltay, tal vez deba quedarse o no... Lo siento, la visión no era clara.

—Pero si no tenemos noticias del líder debemos buscarlo, es raro también que no se haya reportado.