Es Yuta... Nakamoto Yuta...
¿Qué es Yuta en su vida? ¿No es él su destino?
Entonces, luego de sus errores y arrepentimientos ¿Por qué no puede tener la libertad de amar? ¿Por qué no también ser amado?
—No puedes resistirte.
Taeyong se aferraba al sentimiento que tenía hacia Yuta.
Sentía que era la única manera de poder resistir, la única forma de poder respirar sin perder el aliento de lo único que tendría para poder vivir.
¿Por qué más lucharías? ¿Por un pueblo que te había dado la espalda cuando mostraste cuál era tú verdadero ser?
—Abre los ojos Lee.
Tenía sus párpados presionados con fuerza, abrir los ojos significaba verlo, escucharlo significaba dejarse llevar por el hipnotizante sonido melodioso de lo que sea que estaba sonando desde hace rato.
Su respiración no era normal, su pecho subía y bajaba con rapidez, sentía las gotas de sudor frío bajar por sus pómulos mezclándose con sus lágrimas. Un sollozo escapó de sus labios inevitablemente ante la presión en su pecho.
—Todavía no entiendo cómo te atreviste a querer entregar tu corazón cuando ya no lo tienes contigo.
Sus puños cerrados apretaban las cadenas que sujetaban sus brazos. Sentado en medio de la oscuridad escucha su voz, y prefería no escucharlo. En cuánto más el hombre hablaba, su collar presionaba aún más por algo que Taeyong odiaba.
—Imagina si de verdad hubieses entregado todo de tí, hubieses muerto en el proceso.
¿Qué hay de las personas que murieron? ¿No murieron por tu culpa?
La voz en su cabeza era fuerte, queriendo entrar en lo más profundo de su corazón para hacerle sentir culpable. Para que Taeyong llevara todo el peso.
Tenía en claro que no moriría bajo sus manos, no, sin importar qué, Taeyong no estaba dispuesto a darse por vencido, por más que su cuerpo no pueda resistir, quería intentar hasta el último segundo de su vida.
Si el alma es oscura ¿Cómo aligerar el dolor de los demás?
—Sabes...
Los pasos se detuvieron, Taeyong abrió sus ojos finalmente, con pesadez levantó la mirada, apenas y podía sostener su peso estando sentado. Cuando sus miradas se encontraron, Jung sonrió.
—Comprendo que si no estás aquí, no podré obtener Worltay ¿No es por Worltay que has regresado?
Jaehyun avanzó hasta agacharse a la altura del peliblanco quien estaba muy pálido, con ojos rojizos, una mirada dolorosa, era un desastre pero todavía mantenía la energía suficiente para estar despierto
—Nada de lo puedas imaginar, nada de eso. —Taeyong susurró con voz ronca, débil y ahogado.
—Estás atado a mí.
—No soy nada tuyo.
Jaehyun siguió sonriendo y asintió.
—Tampoco eres nada mío pero la única forma de que puedas seguir viviendo es seguirme. Seamos realistas Taeyong, has llegado al punto dónde no puedes controlar lo que tú mismo has hecho.
»Me entregaste tú corazón, te hice mío, mi esposo, mi alma gemela sin importar que no lo seas. Esto de ser rey no es lo tuyo, como el ser que eres nadie podrá aceptarte y si lo harían, lo más probable sea por miedo a que les hagas daño.
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Sin Aliento ⋮ YuTae
FanfictionLiderar era su destino y su collar era su forma de vivir también.