Ultrasonido

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Para esa mañana de la primavera francesa Sanji se encontraba bastante ocupado con las preparaciones del desayuno para todos los que vivían en esa casa mientras que los demás se encontraban en el sillón viendo algo para lo que Sanji no fue invitado.

En el medio de todo y con las manos ocupadas por una revista colorida llena de cosas y de a simple vista delicadas, pequeñas y lindas.

Con Patty y Carne rodeándolo también observando cada cosita pequeña que salía en la revista, a veces señalaban los conjuntos y se ponían a murmurar lo lindo y lo caro que estaba todo.

__ a desayunar__ llamo el rubio a los tres que dejaron de hacer lo que estaban haciendo y se dirigieron rápidamente a la mesa del comedor.

Cada quien se sentó en su lugar y comenzaron a comer de manera tranquila cada bocado de la deliciosa comida de Sanji.

Después de un rato de silenciosa tranquilidad el mayor en la mesa dijo.

__ hoy solo irán ustedes dos a trabajar__ avisó.

__ por?__ inquirió.

__ acompañaré a Sanji a su primera consulta con el obstetra__ contesto.

__ no tienes que acompañarme viejo, al fin y al cabo Law va a atenderme__ dijo el rubio.

__ no berenjena, yo quiero acompañarte__ digo de manera autoritaria__ además no me perdería la oportunidad de ver a mi nieto__

__ está bien__ comento con una sonrisa antes de seguir engullendo su desayuno.

.

En medio centro se la ciudad francesa, dónde se alzaba un gran y bonito edificio de cuatro pisos, sus paredes pintadas de un beige bastante elegante.

Los dos cocineros, padre e hijo entraron al local y se acercaron al mostrador donde había una hermosa chica rubia a la cual Sanji no se pudo contener, la elogio y como un caballero le dijo lo maravillosa que parecía ser.

La chica se apenó un poco por las palabras del hombre, no todos los días un caballero bastante guapo llegaba a tu trabajo y te comenzaba a piropear.

__ en... en que puedo ayudarles?__ pregunto la chica con una sonrisa tímida y un sonrojo cubriendo sus mejillas.

__ tenemos un turno pendiente con el doctor Law__ está ves contesto el mayor algo impaciente por la actitud de su hijo.

__ oh, por favor deme un momento__ pidio la joven mientras comenzaba a trabajar en su computadora__ nombre del paciente?__ pregunto.

__ Roronoa Sanji__ contesto el rubio, esperando mientras la chica terminaba de teclear su nombre en la computadora.

__ emm... cita para obstetricia?__ cuestionó algo confundida, los rubios solo asintieron con la cabeza__ es para usted?__ le pregunto al rubio.

__ si__ contesto simplemente el rubio__ algún problema?__ indagó.

__ no, no__ aclaro algo decepcionada, el chico lindo no estaba coqueteando con ella solo estaba siendo un payaso, un payaso amable__ por favor tomen asiento en la sala de espera, el doctor los llamará pronto__ les indico la recepcionista su tono volvió a ser formal y algo seco pero aún así mantuvo una tenue sonrisa.

__ gracias bella dama__ la cortejo Sanji antes de avanzar hacia una de las sillas.

Ahí donde tomo asiento el rubio coloco sobre sus piernas una carpeta marrón tipo carta sostenida con una de sus manos mientras que la otra la colocaba sobre su estómago en la curva algo pronunciada que se formó.

Tres Vidas Para Un Cocinero Y Un Espadachín (ZoSan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora