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Un día entre semana cualquiera, Reiko caminaba por las calles dirigiéndose a la escuela, podía ir en auto pero prefería caminar ya que según ella mantenía su cuerpo activo y además por que nadie sabe que cosas interesantes se puede topar en la calle.
Iba a cruzar la calle pero tenía que esperar a que el semáforo de autos se pusiera en rojo y el de peatones en verde, mientras esperaba en una esquina de la calle rodeada por una multitud de personas que se dirigían a diversos lugares en la ciudad, Reiko sacó su celular y respondió los mensajes que Ayato le había mando a las 3:00 a.m., los dos se desvelaban chateando pero está vez Reiko se quedó dormida con su celular en la mano y no respondió los últimos mensajes que su nuevo amigo le mandó en la madrugada.
Estaba chateando con él sobre uno de sus planes que habían hecho con él, sus amigos y ella, por lo acordado se supone que almorzarian juntos y pasarían la mayor parte de las horas que estaban en la escuela juntos, para conocerse mejor el uno al otro y hablar tanto como lo hacen por chat.
—Había estado muy emocionada con yuki-yuki
—Pero últimamente el Aqu-aka es mejor ¿verdad?
Reiko alzó una ceja cuando escuchó la conversación de unas chicas que estaban a lado de ella, se sorprendió de lo asqueroso que sonaba el shipp que nombraron.
— Desde que Akane regresó, parece más elegante, ¿no es super linda?
—Que fuerza mostró junto con Aqua para mostrar ese revuelo.
Reiko trataba de no reirse de las estupideces de las chicas, pero hubo un momento en que se puso seria en cuanto más escuchaba la conversación, le disgustaba por alguna razón lo que esas dos decían.
— Ella realmente está dirigiendo su atención hacia él, ¡es adorable!
