capitulo 25

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Los días habían pasado y mientras los licántropos se la pasaban custodiando la zona igual que los Cullen los magos comenzaban a hacer planes para evitar que Elieen fuera enviada a Azkaban, la chica se la pasaba pensando en el escape perfecto, en como evitar que su ahora ampliada familia sea lastimada por sus errores.

-voy a entregarme- dijo mirando el cuadro de su padre quien aún dormía- se que es lo mejor para todos

-eso es lo más tonto que podrías hacer niña- dijo la voz de Lucius Malfoy desde la chimenea

-padrino- la chica suspiro- pensé que tú arresto decía que no podrías comunicarte con el exterior

-si bueno, dijeron por carta y esto no es una carta- dijo mirando a la chica - quiero avisarte, Avery está muerto..

-pero cómo es que paso, la última vez...

-vino a mi casa, quiso matarme pero no sabe que un Malfoy es igual de peligroso que un Snape- dijo mirando a la chica- lo mate cuando entro a la propiedad sin embargo Lestrange...

-esta usando a alguien del ministerio ¿verdad?, Dolores tal vez ...

-ella te odia por el simple hecho de ser una Snape,  y al no poderle comprobar que estaba con el señor oscuro no pudieron enviarla a Azkaban o quitarle su lugar en el ministerio

-padrino, ¿qué es lo que tú harías por proteger a tía Cissy?

-hice cosas que me arrepiento-dijo mirando a la nada- debí ser más valiente, debí luchar por la familia y debí morir por ellos en vez de ponerlos en peligro constante, yo soy un cobarde pero tú ...

-no quiero que nadie salga lastimado por mi culpa- dijo mirando afuera donde estaba la manada jugando entre ellos, vio a Draco junto a Leah quienes molestaban juntos a Blaise, vio a sus tíos y a su madrina tomando el té mientras Dudley, Harry y sus amigos hablaban de algo y reían, a lo lejos vio a los vampiros que vigilaban desde lo alto pero sobre todo vio la sonrisa de Paul quien al sentir la mirada de Eileen la miro y le sonrió con todo el amor que podía demostrar.

-entonces creo que tendrías que volver a casa y antes de entregarte al ministerio cazarlos uno a uno para que así evites la prisión

-pero Paul el... Me duele no estar cerca

-solo hay una opción entonces para que uno de los dos no sufra... Debo irme no puedo estar tanto tiempo aquí- dijo mirando sonriente a Eileen- sabes que pase lo que pase te apoyaré, te espero en casa.


La chica salió de su laboratorio e hizo lo que mejor sabía hacer, fingir.

-voy por yerbas- dijo mirando a Narcisa quien se encontraba platicando con Petunia

-¿Quieres que vaya contigo linda?- pregunto Vernon mirando a su sobrina

-no, Paul me acompañará, ¿Verdad?- dijo mirando al lobo sonriente

-te acompañaría al mismo infierno si me lo pides- dijo tomando la mano de la bruja

Ambos se alejaron del camino y llegaron a lo más profundo del bosque, la chica recogía plantas sin revisarlas mientras que su lobo la miraba preocupado

-¿Qué te molesta?

-nada, yo solo estoy algo cansada

-se que algo te preocupa, lo puedo sentir- dijo mientras la abrazaba por atrás y recargaba su mentón en el hombro de la chica

-solo pensaba que tú eres la persona con la que deseo estar toda la vida y que tuve suerte de conocerte en este momento de mi vida.

-te amo más que a nada Leen- dijo Paul mientras la volteaba y besaba su frente

-y yo te amo a ti por siempre y para siempre - dijo mirando al chico mientras sacaba su varita sin que el lo notará

-¿me amarás después de tanto tiempo?

-siempre- dijo mirando al lobo y sin esperar más lo beso- ¿Puedes ayudarme a recoger musgo de ese Árbol? - dijo señalando con su mirada el árbol que estaba detrás de Paul

-claro amor, solo tengo que estirarme un poco...

Mientras el chico se volteaba para recoger lo que su novia le pidió la bruja saco su varita y apuntandole susurró

-obliviate- mientras las lágrimas salían de sus ojos las memorias de Paul iban siendo modificadas para olvidar a la chica quien en cuanto terminó lo desmayo.

-lo siento tanto- dijo arrodillandose junto a él- te amo  tanto que prefiero que vivas feliz sin mi a qué no vivas por mi- le dió un último beso y se puso de pie mientras sacaba un traslador de su bolsa y antes de que alguien más la viera fue llevada de nuevo a Londres.



dancing in the Dark (Paul lahote)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora