Taeyong había mostrado un avance significativo al comenzar el trabajo de rehabilitación y Jaehyun no se podía sentir más feliz de ver como su pequeño iba mejorando y al mismo tiempo empezaba a confiar más en él.
—¡Parece que Taeyong es un chico muy fuerte!— mencionó la doctora Soyeon al terminar de hacerle una revisión general, posteriormente ella se paró a un costado de Jaehyun entregándole los resultados de los estudios que se le habían estado realizando.
—Debido a la rápida mejoría, es muy posible que en dos días finalmente puedas regresar a casa.— Soyeon hablaba con orgullo de haber trabajado tan duro como siempre y más que nada porque su ceo le tuvo la confianza de cuidar de su prometido y le había agradecido con una generosa cantidad de dinero adicional a su sueldo.Taeyong sonrió levemente y le agradeció a su doctora antes de que ésta se retire y otra vez se quede solo con el que parecía ser su prometido.
—¿No te sientes feliz de que pronto podamos volver juntos a casa?— preguntó Jaehyun dejando los estudios de lado para poder tomar su mano y acariciarla levemente con su pulgar.
—¿Juntos? ¿Ya vivimos juntos?— su rostro estaba sumamente rojo, claramente no se esperaba vivir ya con el apuesto hombre, él pensó que tal vez eso iría después de su boda.
—¡Claro que sí! Hace un año que vivimos juntos. Lo mío siempre ha sido tuyo.— sonreía mientras jugueteba con el anillo de la mano del contrario.
—A todo esto, ¿Cuánto tiempo llevamos juntos?— preguntó el rubio avergonzado con voz bajita.
—llevamos juntos 3 años, pero definitivamente nacimos para el otro, por eso te propuse hace unos meses.— el hablar tan confiado hizo que definitivamente sonara como una realidad más que una mentira. El ambiente tan hostil en el que se creció Jaehyun siempre lo empujó a pulir sus habilidades de actor y en este momento se sentía muy agradecido de eso.
—No sabes cuánto lamento no recordarte... Me duele mucho cada vez que me cuentas las cosas que hemos vivido juntos y que ni siquiera pueda sentir familiaridad al estar contigo.— su cabeza bajó mientras sus redondos y grandes ojos se comenzaban a aguar.
—No te preocupes por eso, amor. Envés de seguir intentando recordar el pasado, mejor empecemos a vivir nuestro ahora.
Vamos a crear miles de historias nuevas y no te tienes que sentir mal por no recordad, okay?—
Su voz era tan cálida y comprensiva que Taeyong no pudo evitar lanzarse en un abrazo al mayor.—Gracias por quererme tanto, Jaehyun. Gracias por no rendirte conmigo.— esa fue la primera vez en mucho tiempo que Jaehyun sentía un abrazo verdadero y lo adoró. Después de todo, él también era un humano y muchas veces llegó a envidiar a sus compañeros y sus respectivas parejas, él nunca recibía ese tipo de afecto y eso lo hacía desearlo más.
—Sé que en este momento debes de estar confundido en tus sentimientos y por eso quería preguntarte, ¿Me permitirías volver a enamorarte?—
Jaehyun era un manipulador de primera, sin embargo, estaba siendo muy honesto en esta ocasión. En sus ojos se podía ver la determinación de sus palabras.Taeyong rompió el abrazo para quedar frente a frente al contrario para poder responder:
—¡Por supuesto que sí!— el más pequeño se veía extremadamente feliz y eso hizo que el corazón del ceo brincara de emoción.🌼
Después de que se cumplieran los dos días que pidió la doctora, finalmente llegó la hora de "regresar" a casa.
Jaehyun se encargó de comprarle un conjunto de linda ropa a su prometido para el tan esperado día de baja del hospital.
Taeyong llevaba puesto un pantalón negro que apretaba en su cintura para resaltarla y era ancho en la caída, una camiseta blanca a la medida y unos tenis igual blancos. Cuando se probó este conjunto por primera vez, no puedo evitar notar que las etiquetas de su ropa eran de marcas de lujo. ¿Con qué clase de tipo se había metido?Salió muy tímido del cuarto de hospital abrazado del brazo de Jaehyun para sentirse protegido, ya que todos los empleados veían a la pareja con miradas nada discretas. Todos los trabajadores estaban curiosos sobre el quién era la persona que había hecho al ceo cambiar su lujoso estilo de vida, ya que no paso por alto para ellos que alguien acostumbrado a la buena vida se había pasado todas las noches desde que el chico rubio ingresó, durmiendo en un incómodo sillón del cuarto y comiendo la comida fría de la cafetería para estar más tiempo con él.
Al salir del hospital les esperaba el automóvil deportivo de Jaehyun que dejó boquiabierto a Taeyong, ¿Estaba saliendo con mafioso?
Porque ese auto no se veía barato en lo absoluto.El viaje fue un poco incómodo, la razón era que Taeyong simplemente sentía que algo no le terminaba de cuadrar y lo tenía pensado en eso, al Jaehyun verlo tan inmerso en sus pensamientos decidió retomar la plática.
—Amor, te tengo una sorpresa al llegar a casa. Estoy seguro que te gustará mucho. — posicionó su mano en la parte interna de la pierna de su "pareja" y la apretó.
—Ya estamos cerca de llegar, cariño.— finalizó con la vista fija en el camino.Taeyong estaba rojo y mudo por la acción de Jaehyun, realmente tenía que luchar para no soltar algún ruido extraño.
Se mantuvo congelado por las constantes caricias en la pierna hasta que llegaron a lo que parecía ser un barrio rico e ingresaron a una gran mansión.—Ay, Dios mío.— habló Taeyong con sus ojos volando de lado a lado para analizar el hermoso jardín que les daba la bienvenida. —¿Nosotros vivimos aquí?—
preguntó anonadado mientras observaba como la gente de servicio salía de la hermosa mansión de estilo moderno para recibirlos.—Correcto, amor.— le sonrió y desabrochó su cinturón para bajarse y abrirle la puerta a Taeyong.
—Bienvenido de vuelta.— Jaehyun besó su frente y le sonrió resplandeciente, tomó su mano y lo ayudó a salir.
Le era muy divertido ver como Taeyong seguía sin poder hablar y mantenía su boquita abierta.El personal estaba confundido, en la mansión nunca vivió alguien más que el señor Jaehyun, pero horas antes habían sido amenazados con perder su trabajo si no fingían o mencionaban algo al nuevo señor de la casa.
Jaehyun se extrañó de ver como Taeyong saludaba a cada uno de los empleados. No era algo que un jefe deba de hacer, sin embargo no lo regañó y lo dejó pasar.
Una vez más, los empleados estaban confundidos por haber sido saludados, el señor Jaehyun ni siquiera agradecía sus servicios y evitaba en gran medida pasar rato con ellos.
Un poco después ingresaron a la no muy acogedora pero sí lujosa mansión. Al entrar, un grupo de personas desconocidas sostenían carteles de bienvenida y decían a una sola voz: ¡sorpresa!

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Crazy In Love - Jaeyong
RomantizmJaehyun es el CEO de una franquicia de hospitales y Taeyong es un chico desafortunado que después de tener un terrible accidente cayó en coma. Jaehyun terminó totalmente enamorado del paciente dormido y no dejará pasar la oportunidad de que éste ha...