Un nuevo sabor invade mi cabeza, una nueva sensación, un nuevo efecto en mis neuronas... tus labios. Es Diferente, inquietante, me enardece la idea de que me haya gustado tanto, cuando pensé que no sentiría Algo parecido en mucho tiempo. Puedo asegurar, No es amor, eso creo, o Nada parecido, en esta situación no puedo permitirlo. Es la emoción de haber cruzado la línea prohibida aún con aquellos riesgos que poseía. ¿Cómo describir aquello que tanto caos ha provocado en mi cabeza? El sabor de sus labios contiene sapidez a esos cigarrillos con olor dulce por fuera, a chicle de menta Y madurez a montones. ¿Cómo se siente la madurez en unos labios Dariana? Quisiera tener un veredicto para reseñar aquella sensación, pero no la poseo, solo cabe recalcar que se sintió inaudito, diferente, satisfactorio y algo turbador. Hablo de madurez por los años que posee el propietario de aquellos labios tan provocativos para mi mente, no es que podamos llamarlo un tutankamón comparado con mi vida, simplemente, fue la primera vez que tuve confianza para relacionarme de esa manera con alguien superior a 5 años sobre mi edad, y vaya que fue placentero.
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.Y algo para recordar, solo aquel conocedor de la escritura y aquello que que la forma (las letras, palabras y sus reglas) conocerá el desacierto que existe en este escrito y formará aquello que fue musa para el mismo.
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𝙼𝚢 𝚋𝚛𝚊𝚒𝚗 𝚊𝚗𝚍 𝙸
PoetryNeil Smith dijo una vez "El control de las armas es el control mental" pero, ¿acaso es posible poder controlar nuestra mente? La mente humana es un laberinto sin final, un tablero de ajedrez en representación de la vida y nosotros somos los peones...