Capítulo 12

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La puerta del hogar Uzumaki sonó, Naruto levantó la mirada al escuchar, mordió sus labios con duda, era domingo por la noche. -Shikamaru, bienvenido ttebane -el menor guardó silencio un poco -¿se encontrará Naruto?, necesito hablar con él -la pelirroja lo vio con cuidado, no quería que su hijo siguiera haciéndose ilusiones, levantó su vista a la escalera viendo al rubio bajar -yo lo atiendo ma, gracias -Kushina apretó el ceño, asintió, se dió la vuelta, levantó su mano, apretó el hombro de su hijo -no te lastimes más Naru-chan -el Uzumaki abrió sus gemas con sorpresa, mordió su mejilla, asintió levemente.

El Uzumaki salió de su hogar cerrando la puerta a sus espaldas -Shikamaru -el Nara lo vio con cuidado -¿qué sucedió ayer rubio?, ¿el Uchiha te lastimó? -Naruto abrió sus ojos con sorpresa, negó quedito -no -rascó su nuca con vergüenza -me invitó a salir ttebayo -el Nara levantó una ceja con duda -que fastidio, ¿es broma?, rubio si no quieres hablar conmigo no tienes que inventar nada, no es necesario que recurras a él para evadirme, hablemos -Naruto escuchó cada palabra con cuidado, su corazón comenzó a doler con cada palabra que salía de la boca del Nara, levantó su mano parando a su amigo -¿por qué tendría que bromear?, no recurro a nadie, en verdad me invitó a salir -

Shikamaru parpadeó con duda y sorpresa, el Uzumaki lo vio con dolor -no crees que un hombre como Itachi pueda verme de esa forma,¿no es así? -las gemas brillaron con ganas de llorar, Shikamaru negó con velocidad -no es eso rubio, entendiste mal, sólo creí que me evadías por lo que sucedió con Temari -se acercó tomando su rostro entre sus manos suavemente -lo lamento sí, fuí un estúpido, concluí idioteces, vamos a dar una vuelta a la aldea, te prometo que en verdad te quiero, sólo es complicado-

Naruto tomó sus manos, las quitó de su rostro con decepción -Itachi tiene razón, si en verdad me quisieras, no dudarías y me hubieras aceptado desde hace mucho -el Nara apretó el ceño con molestia -¿qué demonios?, sabes que soy serio con lo que digo, siempre he sido sincero contigo, nunca te he mentido, ¿por qué ahora la actitud?, ¿por lo que dijo el Uchiha?, son idioteces, vamos rubio, vayamos a caminar y hablemos con calma como siempre lo hemos hecho -Naruto lo vió con cuidado, rascó su brazo suavemente, mordió su mejilla con duda, tal vez si lo escuchaba.

El Uzumaki no sabía qué hacer, abrió y cerró su boca con duda, giró la mirada hacia su puerta, sabía que su madre estaba detrás de la puerta -supongo está... bien -ambos comenzaron a caminar por la calle. Shikamaru metió sus manos en su pantalón, Naruto giró sus azules levemente, observó y recordó como Itachi tomaba su mano con orgullo -lamento que mamá te haya dicho las cosas así, simplemente me ofrecí porque ella insistió -el Uzumaki lo escuchó con cuidado, apretó el ceño -supongo estuviste feliz de hacerlo, no puedes negarlo -

El Nara volteó los ojos con fastidio -vamos rubio, sabes lo que sucede -Naruto apretó el ceño -¿te quedarás conmigo? -Shikamaru abrió sus ojos con sorpresa por la pregunta tan directa -estoy confundido rubio, dame un poco más de tiempo, te prometo que... -el pequeño negó, paró en seco con los sentimientos a flor de piel, sus ojos brillaban con dolor -no, no tienes más qué pensar, no quiero que cuando por fin te decidas, yo salga más lastimado, sabes perfectamente que tengo años enamorado de tí, nunca me viste como una opción, en cuanto Temari entró en tu vida no lo dudaste y la viste de esa forma en la que siempre desee que me vieras-

Shikamaru lo escuchó con cuidado, se sintió una mierda -¿es por el Uchiha no es así?, No sabía que fueran amigos, ¿por qué se toma tantas atribuciones? -Naruto negó con los ojos aguados ignorando su reclamo evidente -desde ese día en el restaurante entendí, nunca seré una prioridad para ti, no tienes la culpa, yo fuí quien insistió en meterse en tu vida, insistí en significar algo más para ti -el Nara pasó su mano por su cabello con ansiedad -rubio, sólo dame un poco más de tiempo demonios, no quiero perderte -Naruto negó con tristeza, dio un paso para atrás, regresó con velocidad hacia su hogar sin ver atrás, el Nara lo vió alejarse, apretó sus puños con frustración sin poder seguirlo. Cuando Naruto dio la vuelta por la calle abrió sus ojos con sorpresa al ver a Itachi recargado en la pared de su casa con los ojos cerrados y los brazos cruzados.

El pequeño rubio se acercó lentamente queriendo retener sus sentimientos, rascaba su brazo, tenía dolor, Itachi abrió sus onix con una molestia evidente, levantó su mano, tomó la del pequeño, lo jaló hacia su cuerpo, lo abrazó suavemente. Naruto escondió su rostro en su fuerte pecho, se dejó consolar por los brazos del mayor quién acariciaba su espalda suavemente -¿puedo usar un genjutsu y dejarlo con pesadillas por una semana? -el Uzumaki sonrió ligero -no, sólo, sólo abrázame fuerte -el Uchiha sonrió ligero, lo abrazó con cariño, lo elevó un poco dejándolo en puntitas -¿puedo aprovecharme? -Naruto sonrió divertido, pellizco su brazo -mejor llévame por ramen, eso siempre me hace sentir mejor, no quiero que mamá me vea así -el Uchiha sonrió, lo soltó suavemente, tomó su pequeña mano, caminaron con calma por las calles, estaba oscuro, era de noche, por la ventana Kushina respiraba con más tranquilidad al ver a su hijo con el Uchiha, el chico le recordaba a su Minato, sonrió ligero viendo como se alejaban caminando de la mano.

-¿Sabes? -Naruto giró sus azules hacia el Uchiha -estoy celoso -el Uzumaki lo observó por un momento, giró su mirada al frente -¿por qué lo estarías?, Shikamaru claramente no me ama -Itachi apretó el ceño con molestia -me importa poco lo que el Nara siente, lo que me pone de este modo es que sufras por él, que aún sigas esperando amor de su parte -el Uzumaki parpadeó con sorpresa -quiero que me veas como lo ves a él, te dije que serías mío y sigo en lo dicho -

Naruto paró de caminar, lo observó por un momento -¿en verdad quieres eso? -Itachi asintió con seriedad -el rubio lo observó escuchando sus palabras, se levantó en puntillas, besó la mejilla del Uchiha suavemente -esfuérzate ttebayo -sonrió divertido, el Uchiha lo observó por un momento con sorpresa y un sonrojo evidente, sonrió ligero al darse cuenta que le estaba dando una oportunidad para conquistarlo -me esfuerzo, sólo que te pones difícil hermoso -ambos sonrieron y siguieron su camino.

Zorrito, ponte difícil... (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora