Capítulo 3

39 6 1
                                    

   Pequeña Sombra sintió un cosquilleo de emoción. Estrella Arenosa la acababa de nombrar miembro del clan del trueno -Bienvenida al clan, Pequeña Sombra- un gran atigrado color plata se acercó a ella - mi nombre es Leónido- Pequeña Sombra inclinó la cabeza ante el gran guerrero, y éste le devolvió el gesto. Pequeña Sombra vió a más gatos acercarse.

   Una guerrera blanca se acercó - yo soy Nube Blanca- dijo.

   Otro guerrero, uno gris, se acerco junto con un atigrado marrón de patas blancas - yo soy Tormenta Gris, y él es Garra de Pino- se presentó.

   Dos gatas, una atigrada rojiza y una amarillenta se le acercaron. Pequeña Sombra supo que eran la madre de Pequeña Luz y la de Pequeña Brasa y Patitas - yo soy Flor Trigueña- dijo la gata rojiza - y yo soy Flor Centelleante - maulló la amarillenta.

   -Solo faltamos nosotros- El atigrado plateado y el gato blanco de rayas negras se acercaron- Yo soy Zarpa Plateada y él es Abedulino-

   -Gracias a todos por darme una tan cálida bienvenida- dijo Pequeña Sombra, aunque se percató de que algunos lo hacían sólo para quedar bien.

   -Pequeña Sombra- Garra Negra se acercaba a ella. La lugarteniente estaba feliz, se notaba por un extraño destello en sus ojos - también puedes ir a saludar a los veteranos- señaló la guarida de estos con la cola. Pequeña Sombra se dirigió allí.

   Un atigrado marrón y una gata blanca y marrón estaban dentro, junto con Nube Blanca. Se dirigió allí y todos la miraron - tú debes ser Pequeña Sombra- dijo la gata blanca y marrón - sí, debe ser- continuó el atigrado. Pequeña Sombra supuso que Nube Blanca había ido a informarles de su llegada.

   -Hola. Tienen razón, yo soy Pequeña Sombra ¿ustedes quienes son?- preguntó la pequeña.

   -Yo soy Fardo, y ella es Cola Mojada- se presentó.

   -¿Cola Mojada?¿Por qué te llamas así?- Pequeña Sombra se sentó con la cola enroscada alrededor de las patas.

   -Pues mi nombre era Cola Crispada- gruñó. La cachorra se fijó que su cuerpo era de pelo corto y lacio, pero su cola era mucho más peluda -yo ya era una guerrera mayor, pero me reusaba a unirme a los veteranos. Y un día caminaba junto a la orilla del río con una patrulla fronteriza, y mis patas me fallaron y me caí. Por suerte Leónido y Flor Trigueña me salvaron. Luego de eso decidí que no podía seguir siendo guerrera y me retiré, desde entonces me llamo Cola Mojada- Pequeña Sombra percibió que la gata no estaba muy orgullosa de su nombre, pero supuso que no debía importarle mucho, puesto que se limitó a agitar las orejas con indiferencia.

   También se dió cuenta de que Fardo debía ser familiar directo de Garra de Pino, pues eran iguales excepto porque Fardo era de un color ligeramente más claro.

   Luego de eso, Pequeña Sombra se despidió y fue a la maternidad para seguir jugando con sus nuevos amigos, Pequeña Luz, Pequeña Brasa y Patitas.

                                                              ●  ●  ●

   La vida de Pequeña Sombra en el clan no podía ser más alegre. Cada vez que jugaba con sus amigos, olvidaba todo el dolor y sufrimiento que había pasado estando sola, aunque el recuerdo de aquel gato de ojos verdes no la abandonaba. Tampoco podía parar de pensar en cuanto se parecía a la lugarteniente, Garra Negra.

   Garra Negra siempre estaba cuando Pequeña sombra quería hablar o necesitaba consuelo. Era una gata muy amable y de muy grande corazón. En su tiempo con Garra Negra, Pequeña Sombra sentía que podía contarle lo que quisiera y que le creería, le daría consuelo, la comprendería. No podía haber una gata más considerada, y Pequeña Sombra la tomaba como un ejemplo a seguir.

Días sombríos #1/ Lealtad / Los gatos guerrerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora