la vez que reencarne en tsuki ga michibiku

capítulo 18 akai VS Cerbero parte 3 poder liberado al 3 %

Después de romper el cuello de botella Akai logro despertar el Shinme la habilidad única otorgada por Amaterasu.

" Jajajaja! Te lo agradezco mucho perro tonto gracias a ti ya puedo utilizar el 3% de mi fuerza y como agradecimiento te daré una muestra de lo que puedo hacer!"(Akai).

( Mmm esto no puede quién es este chico no creo que la diosa lo enviara no siento una bendición tan grande de ella en el, que es eso que está cacareando de 3%, que tan bobo cree que soy)( Cerbero,).

" Deja de hablar ya muchos en el pasado han hablado de más y terminan mordiendo el polvo asique deja que te desviva ahora!( Cerbero).

Narrador omnisciente.

Akai concentra su energía en sus ojos Shinme. El mundo a su alrededor se vuelve más nítido y los colores parecen intensificarse. Su visión se expande, captando incluso los detalles más sutiles de su entorno y quitando todo punto ciego.

Cuando su mirada se encuentra con la de Cerbero, un brillo dorado emana de sus ojos, revelando el despertar del Shinme. Un patrón único de líneas y símbolos se despliega en sus iris, resplandeciendo con una luz divina.

El Shinme le otorga a Akai una visión más allá de lo físico. Puede percibir la energía que fluye dentro de su oponente, identificar los flujos de maná y anticipar sus movimientos con una precisión milimétrica. Cada ataque y defensa se lleva a cabo con una coordinación perfecta, como si estuviera danzando en sintonía con el flujo del combate.

Con el Shinme activado, Akai canaliza su energía a través de su cuerpo y su espada con una maestría sin igual. Cada corte y estocada se vuelve imbuido de una potencia explosiva y una precisión letal. El aire se parte a su paso, creando ondas de energía que distorsionan el espacio a su alrededor.

Los destellos dorados del Shinme brillan intensamente, como estrellas incandescentes en medio de la oscuridad. Con cada movimiento, su poder se manifiesta en ráfagas de energía divina que envuelven su espada, trazando arcos luminosos en el aire.

Akai ahora se enfrenta a Cerbero con una sonrisa llena de salvajismo y potencia de ataque renovada. Su control sobre el Shinme le permite leer los movimientos de su oponente con una claridad asombrosa, anticipando y esquivando cada ataque con movimientos ágiles y fluidos.

La fuerza de sus golpes es abrumadora. Cada impacto produce ondas de choque, sacudiendo el suelo e incluso haciendo temblar el aire a su alrededor. La combinación de su habilidad con la espada y el poder otorgado por el Shinme lo convierte en un adversario formidable, capaz de enfrentarse de igual a igual con el monstruoso Cerbero.

Con el Shinme en su máximo despertar, Akai ha superado los límites de sus habilidades físicas. Su velocidad y reflejos se han intensificado a niveles asombrosos, superando incluso la capacidad de reacción de Cerbero. Cada movimiento de Akai es una ráfaga de energía, dejando tras de sí ondas de sonido que retumban en el campo de batalla.

Sus pasos son ligeros como el viento, permitiéndole esquivar los ataques de Cerbero con una facilidad asombrosa. Sus reflejos sobrehumanos le permiten anticipar los movimientos del guardián del inframundo, evadiendo sus embestidas y contraatacando con una precisión mortal.

El albino se desplaza por el campo de batalla a una velocidad vertiginosa. Cada vez que desaparece de la vista de Cerbero, reaparece instantáneamente en otro lugar, lanzando ataques relámpago desde ángulos inesperados. Su velocidad es tal que incluso el aire a su alrededor parece distorsionarse y las llamas de su espada se convierten en una estela ardiente.

Cerbero lucha por mantenerse al ritmo de la velocidad de Akai, pero sus esfuerzos son en vano. Sus ataques son esquivados con gracia y sus defensas son penetradas con precisión milimétrica. Akai es un torbellino de movimientos, aprovechando cada oportunidad para asestar golpes letales a su oponente.