43- Mi hijo 3/4

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Capitulo 43

-Chicas la cena esta lista- dijo Shawn desde la puerta.
-Santa ****- murmure cuando lo pude comprender al fin.

Hillary grito enloquecida quitándome la banda de la mano.

-¿Que les ocurre por Dios?
-Dos, ¡dos! Son dos- susurre.
-Dos, ¡y muy rosas!- grito ella, me abrazo casi levantándome del suelo.
-¿De qué hablan?- dijo Shawn al borde de la desesperación.
-Dos rayas rosas- grite al fin. Abrazando a Shawn.
-Es una jerga de mujeres porque...me está dando miedo.
-Shawn...- reí como colegiala- después lo sabrás.
-Vuelve con el grupo. Nosotras iremos ahora. Diles que estamos... ¡no sé! ¡Siempre inventas estupi.deces!- grito.

Shawn más que asustado y confundido salió de la habitación, cerrando la puerta.

-¡_____ serás madre!- dijo con un grito ahogado.

Yo comencé a reír. Y después le abofetee la cara.

-¡Cállate! ¿Quieres que todos se enteren?
-Oh, sí. Lo siento. No lo puedo creer- volvió a sonreír.
-Yo tampoco. Me siento...guau, no sé. Hace tanto que no me sentía tan bien. Siento adrenalina en mi cuerpo. Me tiraría de un paracaídas en este momento.
-Oh, no puedes ahora
-Oh, ¡lo sé!- chille.
-¿Y ahora como le dirás...a...

Nuestra felicidad se esfumo en un segundo.
Mi cuerpo cayó a la cama.

-Debería morir.
-____. ¿Qué dices? Tienes un hijo. De alguien que amas. Si, que amas. Y él también lo hace. Lo tengo más que seguro. Tendrán que hablarlo. Pero...cuando estén a solas. Quizás hoy no. En mi boda por ejemplo. Tienen que estar juntos la mayor parte del tiempo. Es una buena ocasión. Ahora alégrate. Porque todo se arreglara. Y tienes que estar feliz por ese bebecito que está creciendo dentro de ti.
-Este es el mocoso que me hacía vomitar cada diez minutos. ¿Eh?- instintivamente acaricie mi estómago.

Y podría apostar que sentí algo. No una patada. Más bien, un latido. Un pequeño y delicado latido. Y en ese momento. Supe que me amaba a esa criatura con todo mí ser. Solo por sentirlo. Ahora había lágrimas corriendo por mis mejillas pero de felicidad. Amaba a este bebé. También amo a su padre. No podría ser más feliz. Hillary tiene razón. No es momento para amargarse.

-Ok, detente. Me harás llorar a mí.
-Lo siento- limpie mis lágrimas- por eso ya mi abdomen no estaba plano- reí- ¿todo es tu culpa verdad?
-Bien, me hiciste llorar. Deja de hablarle a tu hijo. ¡Dios! Tu hijo- se abalanzo a abrazarme- estoy tan feliz por ti. De verdad. Al menos este pequeño hará algo...te hará engordar ¡al fin! Aunque se está demorando un poco.
-Debería ir al médico. Todo me da nauseas. Y vomito constantemente.
-Sí, será mejor que lo hagas. Dejar de beber, de estresarte por ***** y deberás escuchar música clásica. También ser muy responsable.
-Aha...será tan divertido cuando nazca.
-¿Qué quieres que sea?
-No sé...niño, niña...ay no lo sé. Lo que sea
-Bien. Vamos. Tienes que alimentarte por dos.

I Know Were In TroubleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora