Dónde Pierre es un poderoso monarca buscando un Omega y Yuki parece ser el candidato perfecto.
- SaiLec..Ren
Empezada: 04 de mayo 2023
Terminada: 14 de agosto 2023
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Sus feromonas se dispararon por todo el vehículo, estaba más que alegre de volver ahí, de volver al lugar donde está su felicidad.
Se separó del mayor, mirando por la ventana como las personas se le quedaban viendo al carruaje, no era para nada normal que el rey visitase ese pueblo alejado al palacio.
Pararon frente al hogar del más joven, a quien se le cristalizaron los ojos tan pronto volver a ver esa casa.
— Vamos — habló el monarca, bajando del transporte.
Extendió su mano al omega para ayudarle a bajar, había mucha gente aglomerada alrededor, aquellos que se acercaran más de lo debido eran retenidos por los guardias que iban al frente del carruaje.
Yuki tocó la puerta, esperando con todas sus ganas que alguien la abriese, así fue, pero no fue su madre la que lo hizo.
— ¿uhm? ¿Qué se le ofrece? — preguntó una chica al abrir la puerta.
— Oh, lo siento, pero es que aquí vive mi madre, o bueno, no se donde esté — en ese momento el japonés recordó el fuerte golpe que recibió la mujer ese día, ¿y si ella estaba muerta?
— ¿tu madre? Nunca te había visto por aquí.
— Si ella, ella tiene que estar aquí — exclamó entrando en pánico, siendo sostenido por Pierre, quien había notado como su chico comenzaba a estresarse.
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Una voz desde dentro hablo — ¿Yuki?
El mencionado reconoció la voz al instante, mirando dentro de la casa, ahí estaba ella, estaba bien.
— ¡Mamá! — corrió hasta la omega, abrazándola, volviendo a ser ese niño inocente que Gasly se había llevado. Lloro a mares, había necesitado mucho a su madre.
La mujer de inmediato abrazó a su cachorro, cuando se lo quitaron se asustó tanto que incluso cuando despertó después del golpe lo primero que había preguntado era donde estaba su hijo, pero ahora su niño olía diferente, percibía algo más en su fragancia, algo dulce y a la vez fuerte, aún que eran pequeñas cantidades para ella eran perceptibles. Ni siquiera se había dado cuenta del hombre que acompañaba a su cachorro.
