My way OUT // DazaixocxChuuya

4

—¡Sagisawa-senpai!

Sonreí, el que gritaran mi nombre en los pasillos de la organización no me agradaba.

—Higuchi—dije— no me hagas congelar tu garganta. Te he dicho que solo te acerques a mi sin hacer escándalo.
—Lo sé, lo lamento. Solo... —tomó una gran bocanada de aire— Akutagawa-senpai, hable con él. Quiere ir a-
—El jefe se lo autorizó.
—Pero él solo contra no sabemos cuántos. Chuuya-san y usted apenas-
—¿Apenas?
—Me refiero a-ah q-que sabe que la salud de Akutagawa-senpai no es la mejor y últimamente está peor que antes si va el solo.
—Ve tú con el.

Dije y seguí caminando.
Higuchi había terminado en la Port Mafia, no tenía ninguna habilidad especial pero era la mano derecha de Akutagawa y superior de Gin. Parecía débil pero ella estaría dispuesta a sacrificarse por Akutagawa, de lejos se nota la obsesión por él.

—¡Senpai me ordenó quedarme aquí, sabe que no puedo desobedecer por más que desee!
—Deja de gritar
—Por favor, vaya usted y háblale. Es una de las personas que el respeta.
—Es una orden del jefe, si quieres cambiarla habla con él. —dije y pude ver la decepción en su rostro— Akutagawa solo le haría caso a una persona y esa persona no pertenece a la Port Mafia, así que confía en sus habilidades y deja de gritar.

Higuchi es buena, pero su obsesión es bastante molesta a veces. Me pregunto si Akutagawa si quiera se da cuenta de sus sentimientos o solo no le interesa, es bastante duro con ella a veces así que debe importarle un poco.

—Megumu-san —mi expresión se convirtió en una sonrisa calmada— si Chuuya no me hubiera dicho que sonríes cada vez que ves algo que te desagrada hubiera pensado que me habías perdonado ya.
—Pues no, Verlaine-san y llámeme Sagisawa, no somos tan cercanos.
—Tenemos un pasado juntos... aunque no sea tan Bueno.
—Mataste a gente importante para mi, te mataré cuando llegue el momento y lo sabes.—el sonrió— Adiós.
—Eres muy hipócrita, Sagisawa. Mataste a la familia de tu hermana porque no te convenía y acorralaste a Chuuya junto a Dazai matando a niños en el proceso.

A Chuuya le gusta hablar de más o Verlaine me está investigando, tampoco es un secreto así que realmente ni me perturbó.

—Trabajo es trabajo.
—No me sorprende que Chuuya actúe así contigo.
—No me interesa, si el te perdonó y olvidó todo lo que ellos hicieron por él, yo no te perdonaré jamás maldito enfermo. ¿Crees que me interesa tu triste pasado? Chuuya es muy sentimental si quiera para vengarse de mi.
—Todos tienen un pasado triste, incluso tu.
—Y no ando lloriqueando por los pasillos. Ya perdí mucho tiempo hablando contigo, me retiro.

Caminé por su lado y el tipo seguía con una sonrisa amable que confundía a cualquiera. Salirme de la Port Mafia para matarlo era mi movimiento final, pero no quería dejar esta organización. Además, Verlaine posee una habilidad muy fuerte, inclusive para mi sería un patada en la entrepierna.

Al llegar aquí ya había sido entrenada para hurtar, ser sigilosa, cometer asesinatos, etc. nadie se imaginaría que una niña pudiera hacer cosas tan horribles, pero quería vivir no sé por qué. Tal vez fue el hecho de que tenía hermanas que dependían de mi, ellas no eran fuertes y si una fue capaz de algo lo arruinaba con estúpidos lloriqueos, no habían aprendido a qué después de una paliza simplemente te mordías los labios y aguantabas las lagrimas. Por culpa de sus debilidades tenía que trabajar mucho más pero eso me hizo más fuerte y más valiosa para la mafia que nos tenía en su poder, nuestros padres —ni recuerdo sus rostros— nos dieron como pago a esa gente, a mi y a mis tres hermanas, yo era la menor, estaba asustada como ellas. Cosas asquerosas nos pasaron ahí, especialmente a mi segunda hermana mayor, ella era muy bonita y débil, los hombres dijeron algo como "Después de todo nos harás ganar dinero de otra forma" años después entendí, ella enfermó y falleció.

La segunda menor trataba de hacer lo que mejor podía hacer pero la policía la atrapó y antes de ayudarla decidieron divertirse pateándola hasta dejarla inconsciente, es ahí donde decidí llevarla a ese hospital donde los delincuentes encontraban ayuda. Ahí conocí al jefe, en ese entonces no era el jefe de la Port Mafia pero sus planes ya estaban siendo puestos en práctica. Estaba lloviendo y los policías nos siguieron el paso, ahí es donde descubrí mi poder, ahí hice que estacas de hielo los atravesaran. Mori lo vio y decidió ayudarme sólo si yo me unía a la Port Mafia y traicionaba a nuestros captores, de más está explicar qué pasó después.

Mi segunda hermana menor no resistió a los golpes y falleció en la mesa de metal del hospital de Mori, aún así decidí unirme a él.

—Tengo una hermana mayor, mantenla lejos y a salvo y siempre te serviré. —dije
—Es un trato entonces.

Dijo acariciando mi cabeza