Luego de tres días, el celo finalmente llegó para ambos, dieron la orden de que los sirvientes fueran a descansar y ahora que tenían todo el lugar para ellos solos, disfrutaron su compañía en cada rincón del lugar.
Cómo justo ahora, ambos estaban en la cocina y Diluc no dejaba de embestir a Kaeya encima de la mesa, el lugar entero estaba lleno de feromonas y en sus cuerpos estaban visibles la cantidad de marcas de besos, mordidas y arañazos.
- ¡Diluc! ¡Diluc! - Jadeaba Kaeya a punto de correrse - ¡Ah!
Su espalda se arqueó y Diluc dió un mordisco al pezón izquierdo mientras salía de su interior para comenzar a masturbarse, también estaba a punto de llegar.
El omega se inclinó y llevó a sus labios el gran falo hasta su garganta, su cabeza subía y bajaba mientras el alfa sostenía fuerte sus cabellos, cuando finalmente liberó toda su esencia, Kaeya tragó todo lo que pudo y sonrió satisfecho.
- Esto me gusta más que el vino -
Diluc lo levantó y besó mordiendo su labio inferior, llevaban todo el día teniendo sexo y sus cuerpos comenzaban a exigirles descanso.
- Tomemos un descanso - Dijo Diluc besando la cabeza del menor.
- Buena idea, mi agujero no deja de escurrir - Levantó su pierna mostrándole al mayor todo el desastre que había hecho con él, sus muslos tenían mordidas en todos lados y el semen bajaba por sus piernas, de inmediato Diluc se puso duro de nuevo.
- Deja de tentarme - Agarró al menor y aún de pie se introdujo nuevamente, Kaeya enrolló sus piernas y Diluc caminó hasta la habitación aún dentro del omega.
Kaeya sentía cómo cada paso que daba se sentía más profundo y cuando estaban subiendo las escaleras Diluc se impulsaba más a propósito para tener más contacto.
Cuando finalmente llegaron a la cama, el omega se puso en cuatro y levantó la cadera moviendola de un lado a otro.
- Lléname alfa -
Ambos volvieron a unirse y el mayor tenía sus brazos en las caderas del peliazul, impulsandose fuertemente, entre jadeos y gemidos, Diluc observó el cuello indefenso del menor, estaba listo, esperando ser mordido.
Diluc sonrió y se inclinó para encajar sus colmillos en el cuello del menor, Kaeya al sentir la mordida se corrió inmediatamente sobre la cama y el mayor le anudo, se sentía extraño, dolía, pero por alguna razón le gustaba, ahora finalmente eran pareja eternamente.
- Te anude - Dijo Diluc y se inclinó para quedar acostados de cucharita - Tardará un tiempo en bajar.
- Está bien - Respondió Kaeya agotado - Creo que... Finalmente calmé a mi omega.
Ambos cayeron dormidos del cansancio, aún enlazados, pero con la promesa de que se amarían eternamente.
🗝️
Kaeya poco a poco comenzó a abrir los ojos, sentía un cosquilleo en la nuca y unos fuertes brazos rodeándolo.
- Diluc - Llamó cuando supo que el alfa le estaba lamiendo la Marca - Quiero orinar.
- Aún no ha bajado la hinchazón - Susurró en su oído.
Ahí fue cuando se enteró que aún estaban unidos, el menor podía ver su vientre hinchado por el enorme miembro del mayor, eso sumando al nudo y todo el semen que tenía adentro.
Así voy a acabar embarazado. Pensó el menor.
- Intentaré salir, ¿Listo? - Dijo el alfa y Kaeya asintió, sintió algo de presión cuando finalmente fue liberado y podía sentir todo el líquido saliendo - Ven, te voy a bañar.
ESTÁS LEYENDO
Saliendo del abismo (DilucxKaeya)
FanfictionDiluc era un joven alfa que prometía mucho, poder, fuerza y lealtad, eran las características que más le describían, pero un suceso inesperado cambio su vida radicalmente con la llegada de su "Hermano jurado", un pequeño omega que al no tener a dónd...