Finalmente el cumpleaños de Kaeya llegó, el omega se había levantado temprano y fue a la sede para recoger sus misiones, afortunadamente solo tenía que recoger unos pollos para Sara y terminaba su día.
Apenas eran las 10 AM cuando ya estaba todo listo, pensó en volver al Viñedo pero sabía que Diluc estaba trabajando y la taberna estaba cerrada, así que solamente se dispuso a dar una vuelta por las calles a ver si encontraba algo por hacer.
Recibió algunas felicitaciones de cumpleaños mientras caminaba y Klee llegó hasta él con una pequeña caja, la tomó dudoso de qué pudiera ser alguna bomba pero afortunadamente era una pequeña tarta, junto con un ramo de lirios cala, adentro había una dirección anotada en un papel y él sabía de quién era esa letra, era de su alfa.
Decía que se dirigiera al Levantamiento y que no tardara, así que el omega fue de inmediato.
Recordó la conversación que había tenido con Diluc la otra noche, pese a estar borracho recordaba que se le había insinuado al alfa y él con paciencia le explicó porque no lo hacía en ese momento.
Kaeya agradecía que lo había tomado bien, pues aunque ese horrible suceso seguiría con él un tiempo más, sintió que ya era momento de cerrar un capítulo y seguir.
Para ser honestos, él anhelaba el toque del alfa, no habían tenido intimidad desde hace más de un año y sabía que Diluc estaba haciendo un gran esfuerzo, por eso, de alguna forma quería recompensarlo.
- Kaeya - Escuchó la voz de Diluc a la distancia sacándolo de sus pensamientos, el alfa se encontraba sentado a la orilla del lago con una manta en suelo.
- Linda decoración - Dijo llegando a su lado, había toda clase de comida, panqueques con miel, tostadas, frutos secos y salchichas, ahora que recordaba no había desayunado esa mañana y ver todos esos platos le abrió el apetito.
- Come bastante - Dijo sonriendo entregándole los panqueques.
Ambos comenzaron a comer en silencio, Diluc observaba con felicidad cómo el apetito de Kaeya había regresado, durante los últimos meses se había encargado de su alimentación y trataba en lo posible que el menor comiera bien, había logrado recuperar su peso pero aún así quería que subiera unos pocos kilos de más.
Luego de un rato en el lugar, Diluc guardó todo en un pequeño rincón del gran árbol que había en el lugar, ambos se quedaron comiendo la tarta que Klee le había regalado al menor y siguieron hablando por un rato más. Al cabo de unas horas Diluc se levantó y quitó su chaqueta, le dijo a Kaeya que hiciera lo mismo y finalmente tomó la muñeca de su pareja para dirigirlo al agua.
- ¿A dónde vamos? -
- Hay un lugar que quiero que veas, aguanta la respiración y sígueme -
Se sumergió en el agua y el menor le siguió de cerca, avanzaron por una pequeña corriente de agua y cuando el mayor salió a la superficie Kaeya pudo ver porqué quería venir ahí.
Se trataba de una cueva subterránea que nunca había visto, había cristales en el techo haciendo que el agua donde estaban reflejara todos los colores, vió a algunos cristalopteros volar alrededor y un pequeño claro a lo lejos.
- Es increíble - Dijo viendo todo - ¿Cómo encontraste este lugar?
- Mientras hacía una expedición accidentalmente se me cayó al agua un barril con mercancía, la pequeña corriente lo trajo hasta acá y ahí fue cuando ví este lugar, supe que tenía que traerte -
- Gracias -
- Ven, aún hay algo más -
Nadaron hasta la orilla y cuando se adentraron un poco más, vieron otro pequeño estanque, solo que el agua era más cristalina y había unas rocas oscuras debajo.
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Saliendo del abismo (DilucxKaeya)
FanfictionDiluc era un joven alfa que prometía mucho, poder, fuerza y lealtad, eran las características que más le describían, pero un suceso inesperado cambio su vida radicalmente con la llegada de su "Hermano jurado", un pequeño omega que al no tener a dónd...