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—Ya no se escucharon las ambulancias.
—No, ya tiene rato —replica John.
Mamá todavía no ha llegado de la fiesta del bautizo del hijo de la vecina, ya no debe tardar, por eso me preocupa que Tim aun no haya llegado a la casa porque ya casi es hora del toque de queda en este hogar.
—¿Dónde de está?, ¿por qué tarda tanto?
—Ya no debe tardar, porque no das un baño en lo que yo lo espero.
—¿Esa es tu manera más sutil de decirme que apesto?
—Yo no dije, pero el autobús no estaba de lo mas limpio Jean.
—De acuerdo —acepto —. No me tardo.
Tome mi toalla y las sandalias para meterme a bañar, después de diez minutos bajo el agua fresca que recorría mi espalda ya se me había bajado un poco el estrés de como sería decirle a mi hermano que había comenzado a salir con John.
Cuando volví a la sala John se rio de mí al ver que tenía la toalla enrollada en la cabeza en forma de cono.
—¿Nuevo look?
—Callate.
Levanto las manos en forma de defensa y continuo comiendo Froot Loops mientras me acercaba a la mesa.
—Oye, ¿sabes que podemos hacer mientras llega tu hermano?
—Comer cereal —inquiero —. ¿Jugar Street Fighter?.
—Besarnos —contesta y hace el tazón de cereal a un lado.
—Es... muy buena idea, pero también es muy arriesgado.
John tomó mi mano la levantó hasta la altura de su rostro, mis dedos se abrieron y él los puso sobre sus labios.
—Dime que no.
Continuo tentando moviendo mis dedos alrededor de su rostro. Deslicé mi pulgar desde su oreja hasta su barbilla y el cerró los ojos.
—Vamos Jan.
—No te besaré aquí porque podría llegar Tim o mi mamá —respondí y el hizo un puchero —. Vamos a mi habitación.
Antes de que pudiera arrepentirme, le tome de la mano y subimos corriendo las escaleras.
Tras cerrar la puerta de mi cuarto, John me giró, me tomó el rostro con ambas manos y me besó, tenía la respiración un poco acelerada por el ejercicio que había hecho hace unos segundos y yo por la emoción de saber que volvería a besarlo una vez más este día.
Aunque la mayoría de mis compañeros en la escuela creyese lo contrario, yo no besaba tanto como pensaban y mucho menos a tanto muchacho. No, no. Yo había reservado mis besos para cuando llegara el momento y este parecía serlo.
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NO RULES © NUEVA VERSIÓN
Teen FictionCuando Jan se da cuenta de que nada ni nadie es como ella pensaba comienza a replantearse que fue lo que hizo mal, en que punto su vida se salió de control. ¿Cuál fue el detonador? ©Todos los derechos reservados. No se aceptan copias ni adaptaciones.