Mi Ordinaria Vida. [💎]2Jin ¡TERMINADA!

Capitulo final.

El gemelo mayor era quien comenzó la relación mas extraña y dulce, que nunca pensó haber vivido.

Es en ese tipo de eventos lo que le recuerda su camino de la juventud, hasta la adultez. Un futuro distorsionado al principio, que con el tiempo se convirtió, en lo ambiguo de una futura vida correcta y brillante.

Seok Jin, se convirtió una promesa en su juventud, apenas teniendo veinte, los mayores lo adoraban por su mentalidad madura y sus decisiones acertadas. ¿Qué lo hizo cambiar de esa vida exigente? En el futuro de lo brillante, y rodeado de diamantes...

−La novia esta por entrar...

Dentro de la iglesia mas conocida por los turistas, fue encontrado un lugar para la pareja del varón Park. Entre todos sus contactos y la modestia con el directo, podía lograr grandes cosas, Seok Jin amaba vivir en el momento, en donde una persona concluye una fase de su vida y se abre otra nueva.

En el vestíbulo, se presenta la mujer de pálida piel, con un vestido de diseñador exquisito, con un velo de franquicia mientras en cortos pasos, va caminando en sobre los pétalos de rosas blancas.

−Que hermosa boda.

−Ambos son uno para el otro...

Seok Jin, se enmarco en un mundo distinto de lo que imaginaria, respondiendo los sueños de los demás en un acto de fiestas. Lo que comenzó con preparar una mesa de dulces y un par de adornos, en la casa de su abuela, eso levanto el animo de su familia y conocidos.

Al fin era bueno en algo, lo mejor de todo es que los demás se lo reconocían sin refutar, como en su candidatura.

Disfrutaba de su trabajo, vivía para ello hasta llegar a crecer en el servicio de fiestas, pero a conde su fantasía de pertenecer en algo, se perdía con los años. Las sonrisas y felicitaciones se volvieron, por mera conveniencia debido a su apellido, se quejaban del servicio a sus espaldas y a la hora de pedir referencias o comentarios, eran bocas calladas.

Pensó que estaba perdiendo la vocación de lo que amaba, llegando incluso dudar, eso hasta que.

−Hubiera odiado la boda si estuviera, aquel sacerdote gruñón o el ruido del órgano. −Susurra la chica sobre el hombro de su primer novio− Míralos Seok Jin, a pesar de los cambios... Lucen felices, si fuera mi boda, me gustaría que fuera así...

Seok Jin amaba la honestidad, pensaba que era mas importante en su vida después de la lealtad.

Aun estando en horas de trabajo, en el umbral de la puerta, tomaba la mano de su novia, besando sus nudillos, mientras ella suspiraba la fantasiosa vista de los novios.

− ¿Quién dice que no hay tiempo para decidir una boda? −Pregunta Hyun Jin quitándole las palabras de su boca a su hermano− Ya nos disté los anillos de promesa. ¿Tenemos que esperar a que nos des lo de matrimonio?

−Tal vez, esta esperando que se lo demos ambos Hyun. −Ríe silencioso Seok Jin, viendo en ambas manos, los anillos de promesa, que le regalaron hace poco− Nosotros también, debemos tomar la iniciativa.

La chica sin separarse del tacto, queda enfrente de sus dos amores, dejando un beso en cada mejilla y sonríe de oreja a oreja.

−Me casaría ahora mismo con ustedes, pero quiero disfrutar un poco mas de tiempo con mis novios, antes de convertirse en prometidos y esposos.

Esposos. Pensaron soñados los gemelos.

Aunque escuchaban las bromas de su familia, quienes preguntan por la posible boda, era un proyecto que deseaban tener paciencia. El mayor de los gemelos quería hacer los preparativos de acuerdo a la celebración tradicional y que cumpla sus expectativas exigentes y Hyun Jin se preparaba para hacer el papeleo de la boda civil y el debate de conservar el apellido Park o Kim.