Capítulo 30

0 0 0
                                    

¿Quién soy yo realmente?

Eduardo

Si me pongo a analizar todo desde una perspectiva diferente podría decir que no he sido una persona tan limpia que se diga ya que he cometido errores y creo que uno más grande a sido liarme con la chica con la que juré no volver hacer negocios; ¡pero aquí me tienen!, haciendo el trabajo sucio de una chica que no supera que su ex amor es feliz al lado de otra persona.

Ilógico cuándo eras tú el que hizo todo lo posible por vengarte de la chica que un día te rechazó.

Tal vez todo hubiera sido perfecto sin que la avaricia de mi padre le comiera el cerebro y me metiera en la cabeza que un matrimonio arreglado con una chica más millonaria que nosotros nos arreglaría la vida de una forma espectacular.

Accediendo al capricho de mi padre intenté enamorar a Dalena McCartney, la chica aristócrata más terca y rebelde de toda Inglaterra pero para sorpresa mía era inmune a mis encantos haciendo que fuera un dolor de cabeza hablar con ella.

La frase dice "el que persevera alcanza" pero lo que alcance en ese momento fue el odió que tome hacia ella y el rencor ya que siendo mejor que el imbécil que la mando a la correccional decidió elegirlo a él por encima de mi haciendo que mi padre se jalara los cabellos y por mi parte también hice lo mismo ya que de tanto insistir bien dicen que al final uno se enamora.

Convencer a Peyton fue algo fácil ya que ella la odiaba al igual que yo, quería vengarme por lo que ella me hizo pasar y por eso hice lo que hice haciéndome pasar por el ascesor legal de Peyton para pagar un buen abogado y darle dinero extra al juez y al fiscal del caso.

Aun recuerdo cuando entre a ese lugar, chicas y chicos vistiendo trajes anaranjados algunos hablando, otros haciendo el aseo y otros solo controlando para poner su orden.

Hablar con el director de ese recinto fue algo tedioso pero dejó que hablara con ella fue cuándo solicité la ayuda de Fiorella para que fingiera ser mi secretaria.

//Flasback//

Tomé asiento en una de las mesas que estaban en la sala de espera, el guardia de seguridad estaba parado a fuera para vigilar cada movimiento que hiciéramos ahí adentro, el director fue claro al decirme que la visita seria grabada pero solamente la imagen ya que la cuestión del audio estaba mal.

La ví llegar con esposas en sus manos como si fuera una criminal, sus ojos se cruzaron con los míos y con una agradable sonrisa me puse de pie y mencione su nombre -¿Peyton?- le pregunté para estar seguro y ella asintió viéndome seria -Soy Jordan Schwarst- dije diciendo mi segundo nombre y apellido mientras extendía mi mano.

Ella estrechó su mano y sin soltarla me preguntó -¿Mi padre te envía?- al escuchar su pregunta lo negué con mi cabeza tomando asiento y haciendole un ademán para que me acompañará.

-Vengo por mis propios medios linda- dije entrelazando mis manos para tomar una pose más seria -Se qué odias a una chica que afortunadamente está acá y creo que por eso estas tú aquí ya que le quisiste hacer daño, ¿me equivoco?- separe mis mano para tomar mi portafolios, al abrirlo saco una foto de la chica de la cual estuve enamorado -Ella es Dalena McCartney...,- dije mostrandosela viendo como hacía mala cara a la fotografía -es mi prometida- dije y ella automaticamente abrió sus ojos cómo los de un búho.

Mi Vida A Través De Ella © (Libro #2) [EN PROCESO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora