MY LOVE [Michael Afton y Tú].

.12.

                  El amanecer se hizo notar por la llegada del sol por tu ventana, tu y Michael estaban profundamente dormidos, luego de la cena de anoche y esa pequeña plática, quedaron exhaustos por lo que no iban a despertar en un buen rato.

                       Pero sin esperar una inesperada visita llegó, que solo se digno en tocar una vez la puerta para entrar con la llave de repuesto. La mujer entro llamándote en lo bajó, sus pasos se oían pero tú estabas inerte, de que tu mejor amiga entró.

                       Sarah llegó a tu recámara donde empujó suavemente la puerta y lo que vio, la hizo llevarse ma mano a la boca de sorpresa, retrocedió unos pasos para soltar una bocanada de la impresión.

                       Tu siendo abrazada por Michael Afton, durmiendo en tu cama, lo cual la hizo sentir extrañamente molesta, no sabía que estabas quedando con el. Cuando realmente Sarah también empezó a verle su lado amable y lindo al sujeto que estaba abrazándote.

                       Sin mas Sarah salió furiosa para dejar la llave en su lugar, echando humo por las orejas.

                       Y tu sin mas no estabas ni consiente de la situación, ya que estabas en tu quito sueño, luego de tanto ajetreo. 

                       El que mas o menos sintió una presencia fue Mike, que aun dudoso y con bastante sueño encima, se puso de pie para ir hacia la sala donde claramente no había ni un alma. Se recargo en el marco de la puerta, mientras vestía con boxers mostrando sus piernas largas y con algo de musculo donde en su torso portaba una playera manga mediana y rematando el look su cabello desordenado peinando este mismo con sus dedos largos de una de su manos, tratando de saber si fue un sueño simplemente o solo paranoia que sea su padre.

                       Era verdad que últimamente su padre a intentado contactar con el, pero no quería ni saber el por que, estaba feliz teniéndote en su vida, esos años lejos le parecían un martirio, que nunca finalizaba, trabajaba hasta horas extras para caer muerto, pero el dolor de estar solo, nunca se fue, mas que tu estabas en sus sueños recalcando el no tenerte.

                       Ciertamente, sentía algo distinto al volver a verlo. William tenia una mirada mas pesada, como si tuviera algo detrás. Eso no le agradaba para nada, ya que sabiendo el historial de el, no es nada bueno. Mas su repentino interés ya que Mike sabe que no fue de su agrado, al nacer en sus veintes, contrario a su madre. Sus pensamientos seguían mientras regresaba a la recamara y te observo, cuestionandose, el bien que hizo para tenerte.

                       No era muy adinerado, no era muy destacable segun el, no es fanático a los estudios, pero sabia que por ti seria capaz de hasta darte lo poco que tuviera. Tu caracter que podria ser amable, lindo, rudo, paciente. Le fascinaba a Afton, con una locura, le daba una sensacion en el estomago al verte, al tenerte entre sus brazos, esas famosas mariposas en el estómago, que antes el se burlaba, diciendo que tomaría agua para ahogarlas ya que le parecía absurdas esas cosas.

                       Te dio un beso en la frente y tú medio dormida lo abrazas.

— ¿Dónde estabas? — Preguntaste adormilada.

— Solo fui a ver algo, no para tanto.

— Solo me dio frío, vuelve a dormir... Aún tenemos tiempo para hacerlo.

— Gracias al cielo, aún tengo algo de sueño Chiquita.

                       Tu sonríes para el cobijarse junto a ti para colocar su brazos y su gran mano alrededor de tu cuerpo por encima de la cobija. Pero no fue suficiente y te acercaste como en la noche para acomodarte en su pecho en busca de su calor, sus latidos, y su respiración.

— Oye...

— Dime.

— Crees que mañana podamos usar nuestro día libré, para hacer algo fuera del departamento.

— Que se te ocurre.

                       Michael se encogió de hombros mientras pensaba en ciertos lugares que podrían gustarte ir.

— Al cine, que te parece. A ti te encantan las películas de terror, podemos ver está nueva que salió.

— Buena idea... — Fue lo último que dijiste para quedar de nuevo dormida.

Pero después de dejarte llevar por el sueño de nuevo, unas horas más despertaron y sin perder tiempo desayunaron mientras charlaban respecto a su trabajo y ver qué día podrían ir al cine a gozar, pero en eso también sacaste la pregunta del millón de dólares.

— Y por qué no te vienes por fin a vivir aquí?

— Nena, no se. Sonará tonto pero no quiero incomodarte.

                       Rodaste los ojos — Practicamente desde adolescentes hemos dormido juntos, hasta hemos hecho de todo. Acaso tu crees en el matrimonio.

— Un poco, no soy tradicional ya lo sabes pero, imagínate que dirán tus padres si me llegan a encontrar acá sin estar ni siquiera comprometidos. No saben de mi o si.

— Digamos que saben que tuve un novio. Si, yo pago el alquiler de mi propia casa porque debo pedirles permiso o aprobación, solo quiero que durmamos diario, comamos juntos, no quiero que te vayas muy noche.

— Mmmm. Lo voy a pensar.

— Está bien, eres difícil de conquistar, pero yo sé que lo conseguiré — Le das un beso en la mejilla para levantarte de la mesa— Usaré mis técnicas secretas si ameritan.

                      Dejas a Mike con una media sonrisa, pero infla las mejillas pensativo, quizás es el trabajo el que no lo deja pensar bien, claro que quería vivir contigo pero sentía que aún no podía hacerlo, era una presentimiento según su pecho.

                       No le gustaba la sensación que la sentía algo pesada, que tal si era por la aparición de su padre, que te haya visto no lo dejaba tranquilo, era confuso. Pero solo quería pasarla bien contigo, tal vez esa sensación se pasé, no era para tanto.

                       Mike te ayudo a recoger y pasar su rutina. Que era ir al trabajo los dos lo cual eso se dispusieron a hacer, luego de darse un beso fugaz Mike llegó a su trabajó, donde saludo a Jeremy un compañero.

— Ey, Mike que tal tu noche, dormiste bien.

— Más de lo que debí.

— Bueno, hiciste el trabajo del señor Arnold, recuerda que debemos checar eso antes de que termine la semana.

— Carajo, lo olvidé, si preguntan por mi diles que estoy en eso.

— Seguro.

                       Se fue a la parte de abajo, por así decirlo el sótano, donde debía revisar un animatronico, que se averió por contacto de la lluvia hace años, intentando repararla pero nunca quedó del todo bien.  Al entrar a la fría habitación vio al enorme prototipo, no le gustaba el frío que se sentía a dentro.

                       Lo dejo pasar para iniciar con el trabajó, sin más rodeos.

                       Luego de un par de horas dejo todo pulido y arreglado, pero apesar de todo el ambiente seguía frío. Michael giro a tomar su corbata que se quitó, pero sin mas, escucho algo detrás..

                       Una voz, robotizada...

                       "El tiene planes para ti.." Giro y vio al animatronico, la marioneta. ¿Fue la que habló? Eso se cuestionó Afton, respiro profundo sosteniéndose de la mesa de metal, pero apretó el botón para que la cinta empezará a mover a la marioneta hasta su estante. Aún sostenida de los cables que la hacían verse imponente.

                        Michael salió al dejar en su lugar a la marioneta y salir de ahí pensando que quizás el hambre lo hizo imaginar cosas.