[EN PAUSA] además de los licántropos que existían provenientes de la tribu quileute, habían más criaturas de la misma clase con diferente origen, más fuertes, más grandes, más nobles también.
Livian era parte de estos, una chica que además de ser un...
El gozo violento tiene un fin violento, como fuego y la pólvora que al unirse, estallan, justo como mi mente en aquel momento.
Tome un vuelo dejando muchas cosas detrás, incluyendo a Jasper, ir a Volterra resolvería mis dudas y mas si el sueño que había tenido era real, encontraría a mi madre después de años.
Mi tio me recibió en el aeropuerto de Italia, llenándome de preguntas respecto a porque estaba de regreso y el porque había dejado de lado la escuela, aunque a decir verdad, ya había terminado la escuela preparatoria y ahora ya no la necesitaría, podría hacer miles de cosas más o estudiar por mi cuenta, eso no le importaba realmente y a mi muchísimo menos.
Ahora podía leer los pensamientos de las personas a mi alrededor, y si dejaba de pensar por un momento, podía escucharlos como un zumbido en mi cabeza que no se callaba.
Las visiones comenzaron a hacerse más fuertes a medida que fue pasando el tiempo y el intentar dormir se volvió algo necesario cada día, más porque así dejaba de pensar en Jasper y el si estaba bien.
Hasta que esa semana termino y con ella mi sentir, mi cabeza ya no dolía y ahora podía concentrarme en leer los pensamientos de una persona en específico si quería, así que dejo de doler, deje de sentir.
Mi viaje a Volterra resultó alarmante para mi tio, estaba preocupado y era porque temía que algún vampiro me molestara o convirtiera, pero ese temor se desvaneció cuando informe que iría en coche, de la misma manera que habían ido mis padres, ahora se mostraba alegre e incluso decidió costear el viaje.
Una tormenta llego por la noche y fue cuando decidí partir, ante la comunidad del paramo, moriría de la misma manera que mis padres y simplemente tendrían una vida diferente y probablemente mejor.
Yo no había nacido para ser un líder, no de esa manera.
A mitad del camino mi tio me llamo, le conteste y fingí que había perecido en un accidente, y hay en más mi viaje fue a pie, en dos horas estuve pisando Volterra finalmente.
Las calles estaban vacías y ya no llovía, me acerqué a un hotel y pague mi hospedaje durante una noche, me permití darme un baño y recostarme en aquella cama.
De Isabella Swan:
Querida Livian, han pasado unos días desde que te marchaste, todo sigue igual, Jasper parece no recordarte, Alice tiene visiones tuyas según Edward pero tu cara le es borrosa, dice que has tenido un accidente, así que espero que me respondas para saber que estas bien.
De Livian Bianchi:
Bella, Italia se siente diferente y a perdido el significado que tenía para mi antes de irme, mi cuerpo se siente bien y tengo la fuerza para destruir un ejército por mi misma, pero mi corazón no cuenta con las fuerzas para poder seguir, siento que podría morir en cualquier momento, ¿no has notado a Jasper decaído, perdido? Quisiera saberlo porque el lazo entre ambos es muy distinto al tuyo y el de Edward.
No puedo escribir más porque mi mente esta nublada y no puedo pensar sin evitar pensar en Jasper, estoy odiando la distancia así que infórmame cualquier cosa que suceda, necesito saberlo.
Dale a Jasper una carta con las siguientes palabras dentro de dos días cuando sea tu cumpleaños antes de que entren a clases, imprímela si te es posible.
Trate de pensar con claridad y solo pude pensar en cuanto quería regresar a Forks más que nunca.
Al poco tiempo que termine de escribir lo que quería decirle, me acomodé esperando que llegara el sol a su punto más alto dentro de unas horas, ese sería el momento exacto donde ingresaría al templo ubicado cerca de la piazza de Priori.
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En Forks:
—¿Como es posible que Jacob Black te de un regalo y yo siendo tu novio no?
—Por que no tengo nada que darte.
—Bella, tu me das todo con solo respirar.
Aquella chica solo suspiro. —Muchas gracias, es todo lo que quiero.
—¡Bella! —Alice saltó hasta sonde estaban y la recibió con un abrazo. —¡Feliz cumpleaños!
—Shh, cállate. —le dijo en un susurro. —Te dije que no quería regalos.
—Ya te vi abrirlo y adivina que, te encanto, lo usaras esta noche en mi casa. — Alice miro con suplicas a Bella. —¿Si por favor? Nos divertiremos.
—Okay, de acuerdo.
—Genial, okay te veré a las siete. —tomo a la chica de sus manos. —¡Jasper, Bella te dará algo, tiene que ver con tu pareja!
—No es mi cumpleaños.
—Pero te encantara. —Alice le asintió a Bella.
Aquella chica saco de su mochila un sobre con una carta, tal y como lo había pedido Livian y lo entrego, su cuerpo se puso rígido de repente y su mente se nubló, sintiendo escalofríos, si es que era posible.
—Gracias, creo. —se encogió de hombros y se dio media vuelta. —Felicidades.
Se marcho primero y después lo siguieron Massimo y Alice.
—Feliz, lo que sea. —Massimo se encogió de hombros y salieron de aquel panorama.
Jasper miro la carta, no entro a clases, nadie le diría nada y de todos modos se recuperaría en un día, tenía la habilidad de hacerlo por sus amplios conocimientos.
Al llegar a su casa, se sentó en uno de los sofás.
—¿Qué es eso?
—Me lo dio Isabella, Alice dijo que me encantaría así que lo tome.
—Mm, ábrelo.
Y eso hizo, encontrándose con la caligrafía más preciosa que había visto jamás.
Querido Mayor Whitlock:
Probablemente te preguntes quien soy, o quien envía esto, o el porque Bella Swan te lo entrego, advierto que esta no será la única carta que reciba de mi parte, pero, si la primera diciéndole lo mucho que me hace falta y lo mucho que necesito verlo de nuevo, en estos momentos usted ya se olvido de mi.
Según Lewis Carrot en Alicia en el país de las maravillas, a veces para siempre es un segundo y usted fue mi segundo, pues no paso mucho tiempo para que me enamorara de usted y lo amara a tal punto de unir nuestras vidas.
Tal vez no de la mejor manera, tal vez en el momento menos indicado pero debe de saber que alguien lo ama de forma incondicional, sin importar las millas de distancia o cuantos años nos llevemos de vida, su alma y la mía han sido destinadas para sufrir por amor.
"La mente hace su propio lugar, y en sí misma puede hacer un cielo del infierno, y un infierno del cielo"
-Paraíso Perdido de John Milton
Con todo el amor que le tengo, desde el otro lado del mundo ~L.B.W.
—¿Quien lo mando?
—Si supiera no estaría tan frustrado, iré a mi cuarto a tratar de relajarme.
