Nicole se encuentra en un estudio de fotografía, posando para una sesión de fotos
Fotógrafo—(entusiasmado) Muy bien, Nicole, te ves increíble. Mantén esa mirada desafiante, es perfecta.
Nicole— (sarcástica) Oh, gracias. Estoy prácticamente salvando el mundo con mi mirada desafiante, ¿verdad?
Fotógrafo—(riendo) Tranqui Nicole, ya casi acabamos, no te desesperes.
Lucía—(Interrumpiendo, se acerca a mi, y me pone un collar para la siguiente foto). Nik, te recuerdo que mañana hay prensa, para que estés lista temprano.
Nicole—(cruzándose de brazos) ¿Y mis vacaciones? Ya estoy cansada de todo esto.
Fotógrafo—A veces, la fama tiene sus inconvenientes, pero también te brinda muchas oportunidades. Tienes que aprender a disfrutarlo.
(.......)
Salí del estudio y me dirigí al coche, para irme directo a casa. En el camino, pase por el campo, en donde entrenaba Pablo, me quede mirando el lugar para decidido si entraba a o no, pero al final acepte.
No tarde mucho en entrar porque ya uno de los guardias me conocía, así que estacione mi coche y me baje para ir a verlo.
Me diría a las canchas, cuado de lejos miro a conversando con una chica castaña, que está llorando...
Nicole—(confundida) ¿Qué diablos está pasando allí?
La ojiazul observa la escena desde la distancia, intentando escuchar su conversación...
Pablo— (cariñoso) Tranquila, Aitana, todo estará bien. Siempre estaré aquí para ti.
Aitana—(llorando) No sé qué hacer, Pablo. Me siento perdida y sola.
Nicole— (pensando) Aitana... ¿quién es ella? ¿Por qué están siendo tan cercanos?
Nicole decide acercarse, con una expresión no muy amigable, para ver qué reacción tiene Pablo...
Nicole— (sarcástica) ¡Oh, qué escena más conmovedora! ¿Así que ahora eres el consolador oficial de todas las chicas en problemas, Pablo?
Pablo—(sorprendido) Nicole, ¿Qué haces aquí? Mira ella es Aitana, es jugadora también del barca.
Nicole—Pues pasaba por aquí y decidí venir a verte, pero ya vi que tienes cosas más importantes que hacer.
Aitana—A ver chavala, no es lo que parece.
Nicole—Tú no te metas, si buscas a alguien que te consuele, ve con tus papás o algo parecido.
Pablo—Oye ¿qué te pasa? (Molesto)
Aitana sonríe irónicamente por la actitud de Nicole...
Aitana—Yo mejor los dejó, no estoy para escuchar a una rubia encaprichada.
Nicole—Ni yo para ver a una chica que se quiere meter en relaciones ajenas.
Aitana—¡Madre mía!
Aitana se dio la vuelta y se fue...
Pablo—¿Por qué te pones así? Sólo la estaba ayudando.
Nicole— (riendo irónicamente) ¿Ayudarla? Sí, claro. Parece que la ayuda consiste en acariciarle la mejilla y decirle que siempre estarás ahí para ella. ¿Debería estar preocupada? ¿Acaso eres el "consolador oficial" de los demás mientras estamos juntos?
Pablo—(frustrado) ¡No! ¡No deberías estar preocupada! No hay nada más que una amistad entre Aitana y yo. ¿Entiendes eso?
Yo solo me quede seria, porque realmente había hecho enojar a Pablo...
Me giré sin decirle nada más y empecé a caminar molesta, pero Pablo me tomo del brazo y me giro hacia el.
Pablo—Yo no te digo nada cuando Gabriel está cerca tuyo.
Nicole—Gabriel me daba esas muestras de cariño, cuando tú y yo no éramos nada. ¿Ahora lo vez haciendo eso? no verdad, tú tienes novia, respétame.
Pablo—Lo hice sólo para que se animara un poco.
Nicole—¿Y que más sabes hacer, hm?
Pablo—Pues se hacer muchas cosas. (Pícaro).
Nicole—No viene al caso tú comentario.
Pablo—Tú me has preguntado, porque te enojas, anda ven. (Pablo me toma de la cintura y me acerca a él). Aitana sólo necesitaba ayuda, si yo te quisiera cambiar, ya lo hubiera hecho, sólo te quiero a ti ¿entendiste?
Nicole—Mm, bueno, pero si vas a ayudar a otra chica nada de tocarles la mejilla, ni otra cosa, necesitas mantener distancia.
Pablo—Prometido.
Pablo se acerca y me da un beso en los labios...
Pablo—Entonces... ¿donde estabas, que estabas tan cerca de mi?
Nicole—En una sesión de fotos.
Pablo—¿Ahh, si? ¿Y como salió todo?
Nicole—Pues bien, pero no me han dicho cuando tengo vacaciones.
Pablo—Yo me iré a Ibiza con unos amigos ¿quieres venir?
Nicole—Pues... no se si iré a Suiza este año, pero si tengo una fecha disponible te digo.
Pablo—Vale. Oye te parece si vamos a la cafetería de aquí, tengo tiempo libre y pues podemos platicar un rato.Nicole—Vale, pues vamos.
Pablo pasa uno de sus brazos por uno de mis hombros, pero lo quito de inmediato, porque sentí dolor en el.
Nicole—Ahh (quejándose)
Pablo—(Asustado) ¿Qué pasó?
Nicole—Nada, tengo un pequeño golpe y me duele el hombro.
Pablo—Joder, que susto, bueno, no te tocó más por si te duele otra cosa.
(..........)
Pablo—¿Y no vas a ver a tus papás en verano? (Sentándonos en una mesa).
Nicole—Ehh, no sé.
Pablo—¿Por qué te pones incomoda cada vez que te pregunto por ellos?
Nicole—¿Incomoda? Pero si te he respondido con la verdad.
Pablo—Lo sé, pero no reaccionas bien cuando te pregunto por ellos.
Nicole—Siempre sacando teorías, ¿no podemos platicar de otra cosa?
Pablo—¿Cómo de que quieres hablar?
Nicole—Dime con quien te irás a Ibiza.
Pablo—Con los chicos de Sevilla, y unos amigos que juegan en él barca.
Nicole—¿Con Pedri y con los demás?
Pablo—No, son unos chicos que no están en primer equipo.
Nicole—Ya.
Pablo—¿Y si te vas a Suiza, que harás haya?
Nicole—Nada, pasar tiempo con mi hermano, con los caballos, y algunos amigos de Hugo.
Pablo—¿Y te gusta eso? O sea me refiero a que si lo disfrutas.
Nicole—No mucho, pero bueno, es lo qué hay ¿no?
Pablo miro sospechosa a Nicole, ¿por qué no le gustaba nunca nada de lo que hacía?