Amor de preparatoria | Genya Shinazugawa

15 - Transmitiendo.

El sol iluminaba la ciudad de Tokio hasta que llegaron un par de nubes, haciendo una notable presencia con un cielo gris. No fue sorpresa que el pronóstico para la tarde fuesen lluvias dispersas.

- Recuerden que para la próxima clase deben traer... - Las clases de lengua son aburridas, más de lo que a _______ le gustarían. Intento prestar atención los primeros 20 minutos, pero luego se rindió y empezó a comer el budín que la madre de Genya le dio ayer. Ni siquiera lo había tocado, por eso se deleitó con el buen sabor y olor que tenía, aunque estuviera frío.

Incluso le dio un poco a sus amigas quienes se sorprendieron de verla con la espalda encorvada, escondiendo el budín debajo del pupitre mientras comía como una ardilla rabiosa.

Hizo mucho para despejar su mente, menos prestar atención en la clase. Realmente quería intentarlo, pero no era lo suficientemente buena como para hacerlo. Solo quería que el día acabe, aunque que Genya la haya invitado a almorzar le hizo ilusión.

Apenas terminó la comida, apoyo su cabeza en la mesa y durmió el resto de clase. Estar en la parte de atrás le dio sus ventajas.

- ________... - Una mano movió su hombro mientras la llamaba, era Kanao. La mencionada abrió los ojos lentamente y levantó la cabeza sin mucha dificultad. - Ya casi es hora del almuerzo. - Dice la pelinegra, palabras las cuales hacen que la otra femenina salte de su silla limpiando la saliva de sus labios en el proceso.

- ¡Ok! - Exclama con emoción, tanto que el resto del salón se da la vuelta para verla. Incluso el profesor la observa. - Disculpen... - Murmura por lo bajo, intentando hacer una reverencia de disculpas al profesor por haber interrumpido los últimos 5 minutos de clase.

Apenas sonó el timbre, sonrió nerviosamente y salió del salón en busca de Genya. Sus amigas se quedaron en el curso junto a Tanjiro listos para almorzar como siempre.

En el camino, sintió la mano de alguien en su espalda. Rápidamente se dio la vuelta y para su sorpresa, era Ume en compañía de su hermano mayor que se encontraba a un lado.

- ¡_______, hola! - Dice ella con emoción de ver a su amiga. - Hola. - Responde la mencionada con una sonrisa dulce pintada en sus labios.

Aunque a muchos les desagrade la hermosa matona de segundo año, es realmente amable con ella. Incluso su hermano mayor es "bueno" con ella. Debe ser la única persona de la escuela a la que nunca ha amenazado de golpearla.

Empezaron a caminar juntas en el pasillo, Ume tomando la palabra mientras que Gyutaro se mantenía en silencio con las manos en los bolsillos caminando detrás de ambas. No es sorpresa que atrape a un par de tontos mirando el trasero de su hermanita, se limita a mirarlos mal, cosa que es comparable con una amenaza de muerte.

- ¡Iré a un casting! - Anuncia Ume. La otra femenina suelta un "ohhh" con la misma sonrisa del inicio, notablemente interesada en lo que dijo. - ¡Es impresionante! -

- ¡Seré la mejor modelo de todas! Seguramente opacare a todas las perdedoras que se me crucen. - Sonrie con malicia. Como siempre, tiene su autoestima por las nubes. No es algo necesariamente molesto para _______ quien la escucha con atención y tomo sus palabras como una broma.

Su conversación no se extendió mucho más debido a la aparición de Genya. Este se quedó quieto cuando vio como Ume lo miró. - ¡Genya, estaba por ir a buscarte! - Pero fue calidamente recibido por ________.

- También te estaba por buscar. - Dijo como si hubiera ido a su salón a preguntar por ella y luego empezar a dar vueltas por los pasillos durante 10 minutos en su búsqueda.

La albina nota la sonrisa tonta de ambos cuando se miran. Como a ________ se le ruborizan las mejillas y el iris de Genya se dilata lentamente, como si fuese amor verdadero. En unos segundos un foco hace "click" en la cabeza de Ume.