Genya veía a _______ tomar el café que pidió, este ya había acabado todo el desayuno que se pidió, pero ella ni siquiera había tomado ni la mitad del café por hablar tanto.
Ambos habían entrado a una pequeña cafetería, bastante hogareña también, la única diferencia que tenía con la que solía estar detrás de su escuela es que esta si tiene buena comida.
- No me veas... - Dice ella de repente haciendo que Genya se sobresalte saliendo del pequeño trance en el que estaba. - ¿Eh, por qué? - Le pregunta sin quitar sus afilados ojos de ella que de repente se puso un poco roja.
- ¡Me da penita que me vean si tomo! Seguro estabas escuchando el ruidito... - Dice con pena, pero a la vez tenia una sonrisa. Deja el café a un lado limpiando su boca con una servilleta.
- ¿Que ruido? - Se pregunta y ella frunce un poco el ceño ante tantas preguntas, entonces suelta un suspiro apenada haciendo que Genya se divierta sabiendo que no debería al verla tan avergonzada. Aun así, ella siempre se divierte cuando él se sonroja y esas cosas, que es casi siempre, por lo que una vez no esta mal.
- El ruido que haces cuando tomas algo, ya sabes... glu, glu, glu. - Dice seriamente tratando de imitar el sonido, aunque parece más como un pez nadando bajo el mar. Genya se ríe ante esa imitación y se tapa la boca con su mano tratando de disimular.
- ¡N-No te rías de mi, idiota! - Se queja ella casi estallando de la pena, aunque debe admitir que también se está divirtiendo con la vergüenza que está pasando.
Ella no suele avergonzarse mucho, más que nada porque no suele darse cuenta del momento vergonzoso hasta después donde es demasiado tarde para arrepentirse.
Entonces, su pena hace que el momento sea aún más divertido.
Algunas personas en el café notan su escena y más de uno nota como son estudiantes de preparatoria que probablemente se fugaron de clase. Aunque a ninguno de los dos le importa demasiado ahora que están distraídos divirtiéndose con el otro.
_______ tratando de no hacer ruido al tomar su café y Genya divirtiéndose con sus intentos.
- Estoy pensando en probar otras cosas, como algún nuevo deporte... -Habla Genya mientras ella lo ve con sus ojos maquillados a la perfección, el masculino nunca aprecio esos detalles muy de cerca hasta ahora.
Cada brillo, cada delineado o rubor en su cara están presentes ahí, cada uno en su lugar. Y el detalle que él no sabe es que ella lo hace porque él estará ahí, porque quiere que la vea en su versión más bella.
Así suelen ser las personas cuando se enamoran.
- ¿Como cual? ¡Yo también debería! - Dice con entusiasmo mientras se acomoda en la silla y Genya la ve con una pequeña sonrisa. - Tal vez algo como... no lo se, atletismo o algo en equipo como fútbol. - Contesta aún bastante indeciso de sus opciones.
- Ya estoy en tiro, pero es algo más... técnico. Quiero moverme más. - Ella asiente ante lo que dice.
En realidad, no puede recomendarle nada porque literalmente nunca hace deporte. El máximo deporte que hace es bailar de vez en cuando y tal vez un poco de Yoga apoyada de las revistas que lee.
- ¡Entra a algún club de la escuela! - Recomienda ella pensando en el club de fútbol, el mismo en el que esta su compañero Murata, aunque escucho que no es muy bueno y suele estar en la banca durante los partidos.
- Podría. ¿Y tu? ¿Que deporte te gustaría hacer? - Pregunta Genya preparándose para escucharla hablar por los próximos 15 minutos hasta que se de cuenta de que esta divagando sobre un tema que no tiene nada que ver con lo que le pregunto inicialmente.
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Amor de preparatoria | Genya Shinazugawa
FanficLa protagonista no es una chica muy inteligente , al contrario de Genya, que es un alumno ejemplar, además de ser parte del consejo escolar. Ambos chocan cuando ella busca ayuda con clases extras para mejorar sus notas y poco a poco descubren que el...