Amor de preparatoria | Genya Shinazugawa

1 - Clases.

Las clases terminaron y _______ estaba a punto de irse, pero alguien la busco antes. El mismo chico de la sala del consejo estaba ahí, apoyado en la puerta de su aula.

- ¡Genya, hola! ¿Ya me conseguiste un tutor? - Hablo tan fuerte que aturdio a su compañero de aula, Murata. Ella tiene algún problema para controlar el timbre de su voz a veces. - Si, ya lo conseguí. - El joven asintió, ambos quedaron en silencio mientras todos salían del aula.

- Bien. ¿Quien es? - Pregunto. Espero a que lo dijera por si mismo, pero al ver que no salía nada de su boca, tomó la palabra. - ¡Ah, si! Seré yo. - Hicieron el contacto visual más profunda que el joven tuvo en su vida, literalmente ella solo se le quedó viendo.

¿Es una espada de doble filo para la adolescente con un reciente flechazo? Ella pensaba hablarle de otra forma, pero parece que ahora pasará mucho más tiempo con el. ¡Va a descubrir su peor lado! Ella intentando estudiar...

- ¿Estas libre ahora? Las tutorias empiezan después de las clases. - El corazón de la joven se aceleró de los nervios.

"Oh no..." pensó ella, no tiene tiempo de siquiera verse al espejo. - Claro, espérame un segundo. - Las amigas de ________ estaban esperándola al final del pasillo para irse juntas como acostumbraban, pero ella les hizo una seña para que se fueran y agitó su teléfono en mano.

- ¡Podemos irnos! - Exclamó y empezó del lado contrario a donde estaban, directo a la sala del consejo.

- ¿Eres delegado o algo así? - Pregunto la más baja. Nunca se intereso en el centro de estudiantes y su sistema, solo sabía que existe y hace cosas como... escribir y leer cosas de delegados.

- No, soy el secretario del consejo. - Explicó brevemente mientras caminaban. El camina muy rápido tal como un oficinista exitoso. - ¿Si? Debes ser muy importante. - Animo mientras le seguía el paso apuradamente.

- No mucho. - Fue lo último que dijo hasta que llegamos al aula del consejo. Habían un par de personas dentro de esta, como el chico que siempre está en la entrada. - ¡Pero los secretarios son muy cool! Sin ellos los jefes no podrían... ¿acomodar agendas? - Pensó un poco, un poco bastante. Realmente no sabían qué hacían los secretarios. Según dramas que ve en la tele se ponen escotes y anteojos, escriben en computadoras y eso.

Genya no contesto lo que dijo porque estaba viendo la situación que manejaba su compañero, Zenitsu. Estaba haciéndole una llamada de atención a los hermanos, Ume y Gyutaro. _______ también se dio cuenta, saludo amablemente a su amiga que no veía hace un rato con la mano. La otra femenina también lo hizo.

- ¡¡Mírame cuando te hablo!! - Le grito el rubio y ella respondió. - ¡CÁLLATE! ¡NO TE HAGAS EL IMPORTANTE AQUÍ! - Mientras escuchaba no se dio cuenta de que su tutor ya se estaba yendo, apenas se dio cuenta cuando el la busco, tocando su hombro.

- ¿Esto pasa todos los días? Ni siquiera sabía que los del centro pueden hacer multas. - La joven se equivoco de palabra, pero Genya no le dio importancia a eso. Solo le respondió. - El puede porque es encargado de revisar los uniformes, pero solo puede hacerlo relacionado con eso.

- ¿Y porque entramos si nos estábamos por ir? - Volvió a hacer otra pregunta y el suspiro por su curiosidad. - Busque tus ejercicios. - Y rápidamente le dio un reojo a la hoja. Parece que empezarán con matemáticas porque todos son números.

Entraron a un salón vacío y él volteo un pupitre para que puedan estar frente a frente. - Bien, empecemos.

Genya se informó de lo último que vieron en clase gracias al delegado de esta, Tanjiro. Rápidamente noto la cara de confusión de su estudiante, en ese momento entendió que no sería fácil ayudarla. Espera que con esta ayuda pueda obtener un 10 en matemáticas este trimestre, como le prometió a su hermano.