18. DOS SEMANAS

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2 semanas habían pasado, Osorio no dejaba de coquetear conmigo, al igual que robarme besos y tratarme con tanto aprecio. Me agrada, ya lo perdoné por haberme secuestrado.

Hablamos de lo que hace, me explicó sobre la mafia, dijo que era peligroso, pero al fin y al cabo es un trabajo. Me gustaría conocer dónde trabaja, odio decir esto, pero tengo tanta curiosidad por ahora sólo me conformo con entrar a su oficina, la cuál es lujosa, lo sé al tocar el material de calidad en el escritorio y muebles.

Me dijo que puedo hacer lo que quiera, nadie puede decirme nada, que soy el rey de la casa, es un exagerado, sin embargo le tomo la palabra, si hablamos de.... Contacto físico... Pues no pasa de besos, es imposible resistir a esos labios regordetes, chiqui (el apodo que le puse, pero que no sabe que lo hice) dice que le encanta besarme, que le encantó yo, cómo dije no para sus cursilerías, debo admitir que se siente bien las palabras lindas junto a besos, nunca me había sentido cansado por sólo mover mis labios.

Emilio no es tan malo después de todo.

No hasta ahora.

— ¡No quiero ir! —

— Amorcito... Por favor —

— ¡No quiero! —

Gruñi cruzando mis brazos. Emilio quería que lo acompañara a la reunión esa que tendrá con más jefes de mafia, pero yo no quiero ir.

— Bien... Bien... No vayas —

Vale que el minito éste, no sonaba molesto.

— Bien, entonces vete —

Escuché un fuerte suspiro antes de unos fuertes pasos.
Vamos me agrada demasiado ese hombre, pero no quiero que me involucre en su mierda ilegal, yo no quiero.
Entonces escuché los pasos torpes de Nikolás, pero ésta vez muy apresurados.

— ¡¿Qué le hiciste?! —

Fruncí el ceño de inmediato.

— Nada sólo le dije que no quería ir —

Escuché el fuerte suspiro de Nikolás, ¿¿todos aquí suspiran así de fuerte??.

— Joaquín... Lewis salió fulminando a todos con la mirada... Él...—

No lo entiendo, ¿Qué trata de decir?.

— No entiendo —

— Joaquín, Lewis..  cuándo él está molesto, suele meterse en peleas.... Peleas fuertes..—

Wow ¿Qué acaba de decir?

— ¿Porqué? —

— Porque necesita desquitar su ira —

Bufé sin realmente ponerle atención a lo que dice Nikolás, Osorio no se molestaría sólo porque no quise ir con él, él respeta mis decisiones.

— No está molesto, aceptó de buena manera el hecho de que yo no quise ir —

— Joaquín... Joaco... Tienes tanto que aprender de Lewis —

El resto de la noche sólo leí un poco más, estoy realmente agradecido con chiqui por comprar todos éstos libros para mí, hay una sección de dibujos, son pequeños puntos formando figuras, ¡Son geniales!.

Tomé un poco de té con una Magdalena, nunca me había sentido así de tranquilo y relajado, sin nada que me preocupe, es extraño, cómo antes me preocupaba de todo.

A punto de caer dormido... Escuché la puerta de abajo abrirse de golpe, al igual que un par de murmullos fuertes. Mi cabeza dió mil vueltas sólo para decir....

Ojos De Placer // Adaptación EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora