Forever & Always // Taylor Swift

thirty eight - proposal.

LA NAVIDAD HABÍA PASADO, Emma y Taylor se encontraban en Londres en una cafetería cercana a la casa de la modelo.

—¿Lo mismo de siempre? —preguntó Sheila, la camarera.

—Lo mismo de siempre —afirmaron ambas chicas, la camarera sonrió y volvió a la cocina  para preparar el pedido.

Taylor pasó sus manos por su rostro y suspiró.

—¿Estás cansada? —habló Emma, la rubia asintió.

—Un poco...

—Me aseguraré de que puedas dormir hoy —Swift le dió una sonrisa pícara y entrecerró sus ojos —Lo digo en serio.

—Es tu culpa que esté cansada —la modelo elevó sus cejas con sorpresa.

—Mejor aprende a dormir.

—Si tú no me dejas dormir —contraatacó —Ayer no me dejaste dormir.

—Cállate, Taylor —Emma sonrió avergonzada.

—Y no exactamente por tus ronquidos.

—¡Yo no ronco! —se quejó y Swift rió, le encantaba molestarla —Y ya mejor cállate.

—Como digas, mi amor —susurró aún haciendo contacto visual.

Minutos después Sheila volvió con la comida y desayunaron a gusto.

—¿Qué quieres hacer en la tarde? —preguntó Emma antes de comer un pedazo de su tostado.

—Olvidé avisarte —Taylor bebió un sorbo de su café —Hoy tenemos planes.

—¿Ah, sí? —la rubia asintió —¿Qué plan?

—Haremos un tour de Harry Potter.

Ese sería el comienzo de la sorpresa de esta noche.

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—¡Y las bufandas! —Emma dejó las bolsas con todas las compras encima de la cama.

—Pareces una niña pequeña —Taylor rió dejando otro montón de bolsas junto a las otras.

Emma se acercó a ella y la besó.

—Tú... —la modelo se alejó unos centímetros de su rostro —Tú eres Ravenclaw.

Rápidamente se alejó y buscó la bufanda de dicha casa en una de las bolsas. Luego de encontrarla la acomodó al rededor del cuello de la rubia.

—Preciosa —Emma la besó nuevamente —Aunque también podrías ser Hufflepuff, tienes un corazoncito de miel.

—¿Huffel qué?

—Hufflepuff, amor. Pero no, definitivamente eres Ravenclaw.

—Ah... —Taylor asintió fingiendo que entendía sobre el tema —¿Y tú que casa eres?

—Slytherin —Emma sonrió con orgullo —Puro ingenio y ambición, preciosa.

—Claro sí —Taylor asintió y ambas se echaron a reír.

—Te amo —Emma juntó sus labios.

—También te amo —Swift acarició sus mejillas y le sonrió —Ahora ve a aprontarte, tengo algo planeado.

—¿Qué? —D'Angelo frunció el ceño ante la respuesta de su novia.

—Saldremos a cenar.

—¡Pero tengo que bañarme! —su expresión cambió a una asustada —¿¡Cómo se te ocurre avisarme ahora!?