Forever & Always // Taylor Swift

forty - greece.

QUIZÁ UN VIAJE A Grecia era lo que faltaba para poder compensar los malos ratos que Emma le había hecho pasar a Taylor.

D'Angelo había planificado un viaje hacia el país mencionado y en menos de una semana ya se encontraban allí.

—¿Bebida de coco o prefieres limonada normal? —preguntó Emma, Taylor se encogió de hombros mientras aún seguía abrazada a la modelo.

—Limonada —respondió. Emma pidió aquella bebida junto a una de coco.

—A las doce en punto tendríamos que estar en la casa, nos llevarán el almuerzo. También ordené la comida para Dibbles y Mer.

—Está bien —Taylor se aferró al cuerpo de su prometida y escondió su cabeza en su cuello.

—Tay —la llamó.

—¿Si?

—Faltan cinco minutos para las doce.

—Oh —Taylor se aferró con más seguridad —Ya, vamos.

—No podemos avanzar si tú te quedas así.

—Cárgame —pidió —¿Por favor? —Emma rodó los ojos y asintió.

—Apúrate antes de que me arrepienta —Taylor rió y rápidamente envolvió sus piernas al rededor de la cintura de la modelo.

Emma caminó hacia la casa que había rentado con Taylor aferrada a ella como un koala. Ambas almorzaron allí y luego se cambiaron a sus trajes de baño para ir a la playa.

Pues en realidad Emma se había encargado de también rentar una lancha que las llevara a la isla más cercana para tener más privacidad.

Claramente con su seguridad, pero estaban acostumbradas a eso.

—Llegaremos en aproximadamente veinte minutos —avisó Emma recargándose en uno de los cómodos asientos de aquel barco a motor.

—¿Isaac y Fred estarán con nosotras? —la modelo asintió.

—También Raphael. Pero estarán al otro lado de la isla, solo estaremos nosotras.

—Bien... —Taylor recostó su cabeza en el hombro de la chica a su lado.

Sería un día largo.

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—¡Vamos al agua, Taylor! —gritó Emma a lo lejos, la rubia negó.

—¡Está fría! —D'Angelo frunció el ceño y sonrió mientras se acercaba a ella.

—Vamos, no exageres.

—No exagero, en serio.

—No está tan fría, vamos —insistió, pero la expresión de Taylor indicaba una clara disconformidad ante la reciente petición.

—Está fría... —murmuró, Emma rió y en un rápido movimiento logró sostener sus piernas, cargándola como si fuera un bebé —Emma, bájame.

—No —la modelo comenzó a caminar hacia el agua mientras Swift estaba en crisis.

—Emma bájame ahora.

—Pero aún no hemos llegado —D'Angelo se detuvo e hizo contacto visual con Taylor —¿O quieres que me apresure?

—¿Qué? —los ojos de Taylor se abrieron como platos al notar que Emma había comenzado a correr con ella en brazos —¡Espera!

—¡Ya estamos llegando, aguarda! —sus pies tocaron el agua del mar y eso bastó para que disminuyera su velocidad, aprontándose para tirarse.