ADVENTENCIA: CAPITULO ALGO FUERTE. RECOMIENDO QUE SI SOS UNA PERSONA SENSIBLE OMITAS ESTE CAPITULO.
Lev Smirnov
Vladimir pretende que le ceda el poder a él, seremos amigos de siempre, hemos compartido mujeres, drogas, el mejor momento de nuestras vidas, pero jamás le cedería el poder a nadie.
Es mi mandato, mi territorio, todo lo que construí día a día sin obstrucciones.
Además, es claro que Freya está detrás de todo esto, se cree que uno nació ayer, que le dará todo a manos servidas solo porque amenazó al idiota de mi hermano con su incesto asqueroso.
Freya es muy ingenua al creer que las paredes no son de papel, tengo ojos en todas partes, en todos lados, sin importar lo que haga está en mi espacio, lo que la hace mía. Ella es mía, desde el primer momento que la vi, aunque ella no lo acepte.
Me cambio dándole una última mirada a la mujer al lado mío, nuestra boda se acerca y yo solo quiero cortarme las bolas. Pensar en que debemos estar atados de por vida me da náuseas, su padre era un hombre peligroso, político corrupto, las tiene todas, mi padre años atrás firmo un contrato aclarando que debo casarme con ella, aunque ambos nos neguemos.
Dos familias poderosas, un legado por seguir y un poder inimaginable detrás. Todo aquello me parece absurdo al mirarla, por ella se me tiene que acabar la vida, basta de mujeres, de malas conductas, así lo dicto el contrato que firmaron nuestros padres. Ella tiene la peor parte, satisfacer mis necesidades, darme hijos a montones, eso señores es una tortura, no soy un tipo fácil, mucho menos bueno, el hecho que ella soporte todo aquello por un contrato me causa algo de alegría.
Miro aquella cuna, donde esos cabellos rubios apuntan hacia la pared, alborotados, dorados y llenos de sueños. Mi rostro se llena de alegría por lo que me acerco a darle un pequeño beso en su cabecilla. Los rusos no somos de demostrar cariño, al menos no cuando se trata de otras personas que no sean nuestros hijos, la debilidad, y la fortaleza, ambas cosas reflejadas en una sola persona.
Nuestro hijo, damos la vida, y brindamos la muerte por ellos. Siempre priorizando su bienestar, escuchándolos, aconsejándolos, somos lo que somos y vivimos para ellos, siempre va a ser así. Son una parte de nosotros.
Ajusto mi corbata mientras me retiro de la habitación, son las cuatro de la mañana y debo tomar un vuelo a Dubái. Paso por su habitación primero, la veo durmiendo pacifica, quien diría que esta mas loca que los mil demonios.
Su cabello ahora al natural descansa sobre la almohada. Es tan perfecta, sus facciones definen a una chica débil e ingenua, lastima que es lo contrario. Tiene una belleza única, realmente única. No es como cualquier chica de pelo negro y ojos marrones como se hace ver.
Su cabello blanco como la nieve es largo, tan largo que le llega al trasero, sus ojos son bicolor, uno azul mezclado con lavanda y el otro gris como una tormenta. Es tan perfecta que asusta.
—¿Crees que ella será la destrucción de nuestra hermandad? —carraspeo al escuchar la voz de Nicolay.
—No lo creo, lo sé.
No puedo evitar ser sincero con él, es mi mellizo. Compartimos vientre, niñez, y por mas que seamos el agua y el aceite es mi otra mitad. Me alejo a grandes zancadas de allí y no tardo en saber que Nicolay estaba haciendo lo que de seguro hemos hecho los tres.
[...]
Dubái estuvo fácil. Solo tuve que encargarme de una especie de secta.
Ya estoy en el vuelo nuevamente a casa, hoy en la noche tengo una reunión importante de negocios. Cerrare trato con el presidente de Suecia, algo que me ayudara a mi candidatura como presidente ya que de no ser elegido como tal entraremos en guerra con Suecia.
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Smirnov [+21]
Action" El asesinato no se trata de lujuria y no se trata de violencia. Se trata de posesión. Cuando sientes el último aliento de vida que sale de la persona, te fijas en sus ojos. En algún punto, es ser Dios." -Ted Bundy. ADVERTENCIA: ▪︎Todos los dere...