Todos pensaban que Sunoo tenía suerte por estar comprometido con el heredero de un trono. Sunoo no cree tener suerte.
Sunghoon es un bastardo frío,
despreocupado y dominante, que utiliza tácticas clandestinas para lograr sus objetivos y que, o bie...
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Fue bueno decir que él evitaría todas las reuniones sociales, pero había una que Sunoo no podía evitar: la ceremonia de matrimonio de su hermana. Winter lo mataría si lo hiciera, y sus madres nunca lo perdonarían.
Así fue como Sunoo se encontró vestido con los colores azul y blanco de su casa, con el pelo recogido en un intrincado peinado que llamó la atención sobre su mandíbula y sus labios. Se veía bien. Él sabía eso.
Winter se veía totalmente radiante. Sunoo sonrió un poco, observando con nostalgia cómo el séquito de su hermana se preocupaba por el cabello de Winter.
—Señoras, ella se ve perfecta tal como es —dijo él, entrando en la habitación.
Las mujeres se inclinaron graciosamente ante él con un coro de "Su Alteza". Winter le sonrió, sus ojos verdes muy llamativos en contraste con su pelo violeta oscuro.
—Pueden seguir adelante —le dijo a sus damas de honor y caminó hacia Sunoo. Ella le palmeó la mejilla con una sonrisa—. Estos pómulos son injustos para el resto de nosotros simples mortales. Se supone que no debes eclipsar a la novia, ¿sabes?
Sunoo logró no inmutarse ante el toque, su control había mejorado mucho, y sonrió torcidamente a su hermana. —Aduladora. Nadie te está eclipsando hoy. ¿Lista?
Winter hizo una mueca.—Un poco nerviosa, pero sí.
—¿Por qué hay que estar nerviosa? —Dijo Sunoo, colocando su mano en su brazo y llevándola fuera de la habitación, dirigiéndose hacia el High Hall donde se llevaría a cabo la ceremonia—. Pensé que te llevabas bien con tu compañero.
—Sí, pero él es el Rey del Octavo Gran Clan. Tendré responsabilidades mucho más grandes como la reina consorte que las que he tenido como mera princesa.
—Has sido entrenada para el papel desde el nacimiento. Serás una reina consorte maravillosa —Sunoo se echó a reír—. Y tendré que inclinarme ante ti.
Winter arrugó la nariz. —Ugh. No quiero que mi hermanito se incline ante mí —Ella le dio un golpe juguetonamente—. Pero no será tan extraño como cuando tendré que inclinarme ante ti cuando te conviertas en el Rey-Consorte del Segundo Gran Clan.
La sonrisa de Sunoo se tensó. Miró al frente, evitando los ojos de su hermana.
Winter suspiró. —¿Sigues peleando con Sunghoon?
Sunoo pegó en una amplia sonrisa.
—No hablemos de mí hoy. Este es tu día —Independientemente de lo que pensara sobre la vinculación, trató de no forzar su opinión sobre otras personas. Sabía que la mayoría de las demás personas estaban perfectamente felices con sus vínculos y que la ceremonia de unión era uno de los días más importantes de sus vidas.
A su hermana le gustaba su compañero y estaba emocionada de casarse con él. Él podría estar feliz por ella, incluso si su matrimonio significaba que ella dejaría su hogar. Sunoo casi deseaba haberse casado con su estatus social; entonces su esposo o esposa se habrían mudado en lugar de viceversa. Pero ella se estaba casando con un rey, incluso si él era un rey de un clan más pequeño que el de ellos.
