Todos pensaban que Sunoo tenía suerte por estar comprometido con el heredero de un trono. Sunoo no cree tener suerte.
Sunghoon es un bastardo frío,
despreocupado y dominante, que utiliza tácticas clandestinas para lograr sus objetivos y que, o bie...
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Jake estaba nervioso.
No había visto a su familia en más de un mes. Bueno, había visto a Sunghoon una vez unas pocas semanas en la Tierra cuando su hermano había venido a ver cómo estaba, pero la visita había sido breve y Sunghoon había parecido distante y distraído, su comportamiento aún más frío de lo habitual.
No es que Sunghoon pareciera más accesible ahora. Jake miró a su hermano con preocupación, observando su postura recta, la tensión de su mandíbula y la vibra de alejamiento que irradiaba.
—Heeseung viene conmigo, Sunghoon —dijo Jake, tan firmemente como pudo. No tenía la naturaleza combativa y obstinada que tenían sus hermanos mayores, pero esto no era algo de lo que se estaba moviendo.
—Sí, lo hago —dijo Heeseung con voz dura, poniendo su brazo alrededor de Jake y acercándolo.
Jake se inclinó hacia él, tratando de ocultar el estallido de felicidad dentro de él. No era el momento ni el lugar ponerse "azucarados" como Sunghoon los había llamado hace unas semanas durante su visita. Jake no creía que estuvo todo "azucarado", simplemente estaba feliz con Heeseung, pero
Sunghoon había estado extrañamente irritado por la simple vista de él y Heeseung abrazados en el sofá mientras miraban la televisión, como si fuera una ofensa personal a él. Había sido extraño. A pesar de todo lo distendido de Sunghoon, normalmente no era alérgico a la felicidad de las personas.
Jake esperaba que el malhumor de Sunghoon no tuviera nada que ver con él, pero probablemente sí. Solo podía imaginar cómo la sociedad había tomado la noticia de que Jake iba a la Tierra y Sunghoon se casaría con Yuna.
Esto último era algo de lo que Jake todavía no estaba seguro qué pensar. Sabía que Sunghoon y Sunoo nunca habían estado en el mejor de los términos y que Sunoo había querido romper su vínculo durante años, pero Jake todavía se sentía raro por eso, y culpable por cargar con Sunghoon con esa carga.
Sunghoon nunca admitiría que fue un sacrificio de su parte, pero eso no significaba que no lo fuera. Yuna nunca sería la elección de Sunghoon si le dieran una opción. Jake se preguntó si esa era la razón del mal humor de Sunghoon. Si lo fuera, Jake difícilmente podría culparlo.
—No —dijo Sunghoon secamente, alejando a Jake de sus reflexiones—. Lo último que necesitamos es que participes en mi boda con un miembro de una civilización pre-TTCI.
Antes de que Jake pudiera estar en desacuerdo, Heeseung le espetó.
—No me importa —dijo, tirando de Jake más fuerte hacia él—. No voy a dejar que Jake regrese sin mí.
Por dentro, Jake hizo una mueca. Heeseung era... un poco paranoico de que alguien lo obligaría a quedarse en Calluvia y nunca volvería con él. Jake podía entender: si no regresaba a la Tierra, Heeseung no tenía medios para contactarlo o ir tras él. Si algo le sucediera mientras estaba en Calluvia, Heeseung nunca lo sabría. Debe ser increíblemente frustrante que Heeseung se sienta tan indefenso, y Jake pudo entender totalmente por qué Heeseung no quería dejarlo ir sin él.
