Yongsun, conocida como el soldado de la muerte, tras ser atacada por los hechiceros de Songrim, ella y su compañera Naksu se ven obligadas a usar la alquimia de almas para sobrevivir.
Ahora en el cuerpo de Mudeok y Sooa ambas deben adaptarse para so...
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Sooa apagó la última vela en la ofrenda en memoria a su familia, por primera vez un sentimiento de paz la lleno, pero ese sentimiento no dudaría mucho.
Seo Yul aún escondido sostenía con firmeza su espada. Estaba confundido, se sentía traicionado y un dolor profundo lo invadió, si esa mujer era quien creía que es, significaba qué su mejor amiga estaba muerta.
Pero, ¿cómo?, ella tenía todos los recuerdos que compartieron juntos, ¿Cómo logro engañarlo todo este tiempo?, por momentos la notaba distinta, pero lo dejo pasar, pues ambos había crecido, era obvio que Sooa iba a cambiar, él cambió, ninguno de los dos tenía doce años.
El castaño quería entrar y enterrarle su espada en el pecho, pero no iba hacerlo, primero debía tener certeza de que ella era una cambia almas.
Al igual que Naksu, ella podría no portar la marca de un cambia almas.
—¿Yul?. —lo llamó Sooa.
Él levanto la vista para verla directo a los ojos, ¿realmente no era Sooa?. —¿Qué hacías? —cuestionó el castaño.
Sooa inmediatamente lo noto extraño. —La señora Kim me pidió que apagara las velas de la ofrenda, ella lo hizo para una familia que hace tiempo falleció y no tuvo un funeral.
Seo Yul miró de reojo la ofrenda, alcanzo a leer los nombres, "Cho Yeong", así que ese era el nombre de Naksu, junto al de ella decía "La recién nacida Cho", debía ser la hermana de Naksu, por un momento sintió pena por ella.
Miró a Sooa detenidamente, ¿ella era esa bebé sin nombre?.
—Yul, ¿Esta todo bien?. —preguntó Sooa
—Debo decirte algo. —habló él joven. —Me llevaré a Mudeok, al final del mes regresaré a la fortaleza Seoho, y planeó llevarla conmigo.
Sooa lo miró con sorpresa, él tono de Yul era frío, y por como la miraba parecía molestó.
—Mudeok no me lo había dicho.
—Aún no se lo digo, pero estamos juntos, y tú y Jang Uk ya obtuvieron lo que querían de ella. —dijo Yul
—¿A que te refieres?.
—Se que ella es Naksu. —murmuró el castaño. —También se que fue tú maestra y la de Uk, ambos ya han logrado su objetivo con ella, ahora pueden dejarla ir, desde ahora yo la protegeré.
Las palabras de Yul hicieron sentir mal a Sooa, ¿Él creía que solo había usado a Mudeok?.
—Sinceramente no esperaba tener que dejar de verla. —confesó Sooa. —Más que maestra y aprendiz somos amigas.
