Kim Sujin una chica de 25 años con mala suerte en el amor, decide instalar lo que ella cree que es una app de citas llamada Sistema de Seducción.
Un día una falla en el sistema la hace entrar a la aplicación y deberá conquistar el corazón de 7 chic...
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Después de un largo viaje por fin habíamos llegado a la Isla Jeju. Yoongi tuvo que hacer unas cuantas cosas junto al director de la academia y sus compañeros profesores antes de organizarnos.
Los veía desde lejos mientras hablaban con lo que imaginaba serían los planes de las actividades, noté que el director hablaba y hablaba mientras que él solo se mantenía en silencio dando asentimientos de cabeza.
Los minutos pasaron y luego de darle una reverencia a su mayor, volvió con nosotros para indicarnos lo que teníamos que hacer.
—Atención todos, hemos organizado los cuartos del hostel donde nos hospedaremos por las siguientes dos noches, antes que nada debo advertirles que esta estrictamente prohibido que chicos duerman junto a las chicas, tampoco pueden hacer sus típicas "visitas de media noche" para verlas, ¿entendieron?
—Sí, profesor Min —todos respondimos en unísono.
—Muy bien, Lee Hana, Choi Juwon, Ban Eunji y Kim Sujin dormirán en la misma habitación —
Miré a mis compañeras de cuarto, las tres chicas me observaron de pies a cabeza y seguido rodaron los ojos. Se notaba desde lejos que yo no les caía muy bien y a decir verdad, no sabía el porqué; nunca hice nada fuera de lo normal como para que me miraran de esa manera.
Cuando Yoongi terminó de acomodar a todos mis compañeros en sus respectivas habitaciones, nos pidió que dejáramos nuestras cosas y nos encontráramos en un punto de reunión para iniciar las actividades.
El hostel se situaba muy cerca de la playa por lo que la brisa era muy fresca y adecuada para la temporada de calor en la que estábamos.
No quise perder mucho tiempo, ni hacer esperar a mi atractivo profesor así que solo me dispuse a entrar en mi habitación, dejar mis cosas sobre la cama restante y salir sin siquiera dirigirles la palabra a aquellas chicas que parecían querer matarme con la mirada.
Al encontrarme con Yoongi nuevamente, noté que tenía un sujeta documentos en sus manos con una lista de alumnos, me miró por un momento y luego anotó mi nombre. Esperamos cerca de diez minutos, poco a poco todos los demás iban llegando.
—Bien, chicos —llamó la atención. —Para el día de hoy tenemos programadas algunas actividades, voleibol de playa, tiro de cuerda, carreras en pareja, lo típico de los campamentos —explicó brevemente.
Como Yoongi y yo habíamos formado parejas desde el principio del viaje, tuvimos que hacerlo juntos, nos atamos uno de nuestro pies al otro y nos sincronizamos perfectamente para caminar juntos. Era una actividad donde ambos teníamos que estar lo más pegado posible al otro así que con toda confianza sujete su mano, él me miró dudoso un segundo pero al final terminó aceptando nuestro contacto e incluso apretó el agarre.
Al iniciar la carrera avanzamos al mismo ritmo, hacíamos un buen dúo por lo que no se nos dificultó para nada caminar estando atados. No logramos ganar el primer lugar ya que hubo otra pareja que se lo estaba tomando muy enserio pues pasó a toda velocidad por mi lado y sin cuidado me empujó haciendo que perdiera el equilibrio; de no ser por Yoongi quien me sostuvo de la cintura pude haber caído al suelo junto con él por la atadura.
