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Al día siguiente

Llegué nuevamente a la empresa, con unos pantalones vaqueros negros y una camiseta ancha de Prada blanca. Dejé como siempre mis gafas de sol en el casillero que me correspondía.
Caminé por el pasillo con el café que ya me había comprado antes de llegar, y pasé de largo cuando Seungmin trató de entrometerse en mi camino y frenarme. Sentí que me seguía, y al mirar de reojo efectivamente lo comprobé. No le di más vueltas y segui caminando mientras aceleraba mi paso más y más. Por fin llegué al estudio, y entre seguido de él, pero nuestros caminos se separaron cuando él se fue con el gerente y yo con Minho.

- Llegó la estrella de esta empresa - declaró Jeongin al verme llegar, haciendo que le dedicara una de mis mejores sonrisas -.

- ¿Tú sonriendo? Eso no me lo esperaba - añadió Minho mientras me devolvía la sonrisa -.

- Bueno, toma - Jeongin me entregó varias piezas de la marca, todo ropa interior, obviamente - vístete que vas a tener que echar bastante tiempo aquí haciéndote fotos -.

- Más bien tendré que desvestirse, ¿No? - me reí mientras me metía en los camerinos a cambiarme -.

Me puse la primera pieza, la cual me apretaba un poco.
<<Cosa que era normal teniendo en cuenta el gran tamaño de mi polla>> me dije sonriendo. Me gustaba bastante, era de color azul marino y tenía en el borde las letras de Calvin Klein escritas.
Salí y solo me encontré a Felix preparando la cámara.

- ¿Dónde están los demás? - interrogué, y Felix dirigió su vista hacia mí, dándome una mirada rápida de arriba abajo -.

- Han ido a organizar una cosa, dentro de poco tendremos un evento, así que se están encargando de que todo esté perfecto - sonrió -.

Me dirigí a la zona de modelaje y me quedé ahí de pie, esperando que Felix terminara de preparar su cámara y de encender los focos.
Estaba un poco incómodo, estábamos los dos en silencio y solo llevaba ropa interior cubriéndome, ropa que haría notoria mi erección si Felix se acercaba solo un poco.

- Oye - llamó, pero yo ya lo estaba mirando -, he pensado que para esta sesión podemos usar una silla, para que te sientes y poses mejor - no era mala idea -.

- Me parece bien - dije, y cogí una silla cualquiera, la puse y me senté -.

- Vale, cuando quieras puedes posar - dijo feliz -.

Empecé haciendo algunas poses básicas, como abrir un poco las piernas o estirarme para que se notara la elasticidad del producto. Sentí como Felix clavaba la mirada en mi polla, por lo que sonreí egocéntrico.

- ¿Que tanto miras? - se sobresaltó al escucharme -.

- N-Nada - musitó nervioso, y volvió a enfocarse en la cámara -.

- Pensando en como engañar a tu novio conmigo, supongo - eché la cabeza hacia atrás, dándole sensualidad a la siguiente foto -.

- Nunca le pondría los cuernos a Hyunjin - noté la molestia en su voz, provocando que sonriera -.

- Nunca digas nunca, Felix - mi expresion se tornó seria -, no sabes lo que pueda pasar en un futuro -.

Felix se acercó para hacerme más fotos de cerca, con el objetivo de que el producto se viera mejor. Aproveché su cercanía para agarrar el borde de mi ropa interior y estirarla hacia abajo un poco, dejando ver un poco más de la V que desembocaba en mi polla. Vi que se puso un poco rojo y enfocó la cámara en mi polla. Sonreí otra vez con egocentrismo porque sabía que era yo quien provocaba ese rubor en su rostro.
Cuando terminó de hacer la siguiente foto solté el borde de la ropa interior, dejándomela un poco más abajo de lo que había estado cuando me la acababa de poner.

- ¿Puedes ponerte la ropa bien? - escupió Felix, y me reí en su cara -.

- La tengo bien puesta - sonreí con picardía -.

- No, la tienes más abajo, así que póntela bien o no voy a poder seguir haciéndote fotos - dijo molesto -.

- ¿Por qué no vienes y me la pones buen tu? Porque yo no entiendo a lo que te refieres - eché la cabeza hacia atrás y me reí de él -.

Se me pusieron los pelos de punta cuando sentí los dedos de Felix rozar la parte baja de mi abdomen, y justo cuando agarró el borde de mi ropa interior yo lo agarré de la muñeca, y empezamos a forcejear, impidiendo que cada uno hiciera lo que quería hacer.

- ¿No me has dicho que lo haga yo? Pues déjame - me regañó molesto -.

- Te lo he dicho de coña, no me esperaba que lo hicieras - musité -.

- Como no me sueltes voy a acabar tocándote donde no debo - me volvió a regañar -.

- ¿Y por qué no me tocas entonces? - mierda, se me había escapado -.

En ese momento dejamos de forcejear y Felix me miró a los ojos, los cuales le brillaban, supongo que por la vergüenza. Sin pensarlo, bajé su mano lentamente a mi polla, y la dejé ahí descansando. Al principio Felix no hizo nada, pero después me la apretó suavemente, provocando que jadeara bajito. Mierda, se me estaba empezando a formar una erección, una que él obviamente notó.
Iba a quitar su mano de mi polla cuando empezó a acariciarla lentamente, mientras mantenía su mirada en la mía. Aflojé el agarre y eché la cabeza hacia atrás, dejando que me tocara con más libertad. Empezó a masajearla con movimientos suaves, movimientos que se iban intensificando y profundizando conforme pasaba el tiempo. Me mordí el labio cuando sentí que su mano se deslizaba por el largo de mí entrepierna, acariciándolo con sensualidad. Joder, lo peor es que la ropa interior se interponía entre su mano y mi polla. Escuché que se abrió la puerta pero no me importó, tampoco sonó muy fuerte. Dirigí mi vista hacia la puerta, y ahí se encontraba Minho asomado, quién, al darse cuenta de que lo veía, me saludó y sonrió con picardía, para después cerrar la puerta tras él.
Justo en ese momento Felix paró.

- No me puedo creer que haya hecho esto - dijo, arrepintiéndose -.

- ¿Por qué? - lo interrogué -.

- Chan, tengo novio, y lo estoy traicionando, lo acabo de traicionar tocándote -.

- No es tu culpa que esté más bueno y mi polla sea mejor - añadí, tratando de quitarle peso -.

- Tú no lo entiendes -.

- Ey, escúchame - lo agarré por los hombros antes de que se alejara - solo me estabas haciendo un favor, de amigo a amigo, no te preocupes, no le digas nada y yo tampoco le diré nada, pero no pienses que es como si lo hubieras engañado, simplemente me estabas haciendo un favor como amigo - me miró triste y le sonreí - ¿Vale? - asintió en silencio -.

- ¿Seguimos? - sugirió -.

- Vale - le sonreí, y se alejó para seguir haciéndome fotos -.

Nostra fotocamera {ChanLix}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora