CAP.39

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Me desperté por los rayos del sol y me levanté con cuidado de no despertar a Daryl. Me vestí y fui a la cocina a desayunar. Mientras desayunaba Daryl se despertó y vino a la cocina.
-Buenos días amor.-me dijo dejando un beso en mi cabeza.
-Buenos días. Te he dejado ahí el desayuno.-le dije con una sonrisa que él me devolvió.
-Luego voy a salir a cazar, ¿vienes conmigo?
-Claro, hace tiempo que no salimos los dos solos.-le dije y él se sentó a mi lado para empezar a desayunar.
-Podríamos estar un par de días fuera y así podemos traer más comida.-me dijo y yo le asentí mirándolo.-Lo único es que tenemos que buscar un sitio para dormir o llevar un coche.
-Podemos dormir en la mansión, dejé unas pocas cosas por si algún día teníamos que quedarnos allí por una emergencia.
-Me encanta que siempre pienses en todo lo que pueda pasar incluso lo que es menos probable, siempre tienes algo preparado.-me dijo con una sonrisa que yo le devolví.
-No hace falta que llevemos nada, hay agua corriente, luz, dejé comida escondida junto con armas y mantas.
-Bien, podemos estar dos días y luego volvemos.
-Me parece bien.-le dije y cogí mi walkie.-Pa, voy a salir con Dixon dos días, quédate con el pistolero.-dije por la radio.
-Vale, ten cuidado hija.-me contestó mi padre.
-Voy a coger algo de ropa.
-No hace falta, hay allí un poco de ropa.-le dije y él me sonrió. Salimos de casa y fuimos al garaje, cogimos mi coche y lo llevamos a la entrada donde estaba Rick.-Rick, nos vamos un par de días a cazar y eso, le he dicho a mi padre que se quede con Daniel, avisa a Sophia porfa, todavía está durmiendo.-le dije y él asintió, nos abrió las puertas y nos fuimos. Conducí durante un rato hasta que llegamos a la casa. Daryl se bajó y abrió el portón con las llaves que yo le di, pasé con el coche y él volvió a cerrar.-Bienvenido a "Villa Hispania".
-¿Por qué lo llamáis así?
-Porque todos los que llegamos aquí somos hispanos, de distintos países pero hispanos, luego llegaron Beth y Sophia pero éramos mayoría y lo llamamos así.-dije y él río.-Ven, te lo enseño.-le dije y le enseñé la casa entera, cosa que nos llevó un buen rato.
-Esto es enorme.-dijo y yo le sonreí.
-Si que es grande. Por aquí cerca hay muchos conejos, ardillas y se de una zona donde hay ciervos.
-Hace mucho que no encuentro un ciervo.
-Eso es porque no buscas bien Daryl.-le dije y él río.
-Asi que este es el sitio que vio crecer a Dani y a Sophia.-dijo abrazándome por la espalda.
-Pues si. Echo de menos vivir aquí. Esta tan apartado de todo, es muy tranquilo, se acercaban pocos caminantes y los que se acercaban los matábamos desde las ventanas. Estando aquí dentro solo tuve miedo por nuestras vidas una o dos veces. Un día que pasaron unos cuantos camiones con gente armada y otro que pasaron miles de caminantes, matamos a algunos con los francotiradores, todos tenían silenciador y no llamaban la atención.
-Da igual todo eso, ya es pasado. Ahora no tenemos nada de que preocuparnos, salvo que los Susurradores quieran guerra.-dijo dejando un beso en mi cabeza.
-¿Quieres ir a cazar o vamos más tarde?-le pregunté mirándolo.
-Podemos ir ahora a cazar algo para comer, volvemos a comer y luego vamos a buscar más para cenar y comer mañana y eso, y si nos sobra algo lo llevamos a Alexandria junto con lo que consigamos cazar mañana.-dijo y yo asentí, los dos cogimos nuestras ballestas y salimos de la casa. Empezamos a caminar por el bosque matando a algún caminante. Después de un rato habíamos cazado dos ardillas y un conejo.
-Con esto tenemos de sobra para nosotros dos.-le dije a Daryl y él asintió.
-Volvamos.-me dijo entrelazando nuestras manos. Volvimos a la casa y entramos, Daryl se puso a despellejar a los animales hasta que se escuchó un ruido que venía de arriba. Los dos agarramos las ballestas y subimos sin hacer ningún ruido, el ruido venía de arriba, era como si alguien hablase.-Viene del desván, ahí solo dejamos los equipos musicales de Ayax Adri y Álex.-le susurré a Daryl.-Ademas no se puede pasar el portón de la entrada sin llave y es demasiado alto y liso como para escalarlo.-le dije mientras seguíamos subiendo.
-No bajes la guardia, no estamos seguros de que sea alguien de ellos.-me dijo y yo asentí y seguí subiendo hasta llegar a la puerta donde se escuchaba mejor. Se oían murmullos de varias personas y se escuchaba como buscaban entre algo.
-"Me siento por tus laureles, navego por tus placeres, me enfado con las paredes, dime qué por mí te mueres, se que te amo porque duele y vamos camino de Ámber. ¿Qué puedo meter ahí?, no saco ninguna frase."
-"Se que te amo porque duele y vamos camino de Ámber. El cuerpo y la psique, la materia y los seres."
-"Si perfecto."
-"La madre que los parió"-me quejé y Daryl me miró sin entender lo que decían dentro ni lo que decía yo. Abrí la puerta de golpe y los tres me miraron.
-"¿Tu sabes el susto que me acabas de dar?"-dijo Ayax y yo negué irónicamente.
-El susto me lo llevé yo hijos de puta. Nos fuimos y estaba la casa sola, volvimos tranquilos y no vimos ningún coche aparcado ahí fuera, entramos en casa y se empiezan a escuchar ruidos.-dije aguantando la risa por la cara de susto que tenian los dos hermanos mientras Álex se reía de ellos.
-Es que dejamos el coche en el garaje.-dijo Álex, Daryl y yo asentimos.
-¿Qué estáis componiendo?-les pregunté y me senté encima de una mesa, Daryl se colocó entre mis dos piernas apoyándose en la mesa y yo pasé los brazos por sus hombros.
-Una canción de Ayax.-contestó Adrián.
-¿Cómo se llama?-preguntó Daryl.
-"La Góndola".-respondió Ayax con una sonrisa.
-En inglés estaría mejor.-dijo Daryl provocando la risa de todos.
-La Góndola.-le dije yo y él asintió.-Dijiste que esa canción quedaría en el olvido, que no la seguirías.
-¿Por qué?-preguntó Daryl.
-Porque la empecé antes del apocalipsis, la canción estaba pensada para grabar el videoclip en Venecia pero eso es imposible ahora.-contestó Ayax.-Aunque ayer encontré el papel con el principio de la canción y ¿por qué no acabarla?, no me gusta dejar las cosas a medias y ya es imposible volver a la vida de antes asique hoy les dije a estos dos de venir para seguir escribiendo y hacer la base de la canción con el equipo que tenemos aquí.
-Siempre llevaba ese papel metido en el bolso de los pantalones. Ya está podrido.-dijo Álex y todos reímos.
-Normal, tiene unos catorce años, me extrañaría que estuviese bien.-dije aún riendo y todos asintieron riendo.
-Oye Ale, ¿te acuerdas donde dejé los papeles con la última canción que estaba escribiendo?-me preguntó Álex.
-¿Eso era lo que buscabas?-pregunté y él asintió.-Estan en el segundo cajón de tu estantería.-le contesté y él buscó allí y saco los papeles sonriente.
-Me acabas de salvar la vida.-me dijo y yo reí.
-Dices eso como si tu vida no estuviese en peligro constantemente.-le contesté.
-Y lleva media hora en peligro de que me dé un infarto por no encontrar estos estúpidos papeles.-dijo y yo reí.
-¿Llevas media hora buscando eso y no se te ocurrió mirar en tu propia estantería?-dije riendo.
-No tenía ningún recuerdo de haberlos dejado allí.-dijo Álex riendo.
-¿Qué hay de comer?-preguntó Adri.
-Eso, tengo hambre.-dijo Ayax.
-Hemos cazado ardilla y conejo.-contestó Daryl.
-¿Quiénes cocinan?-preguntó Adri.
-Nosotros hemos cazado, os toca cocinar a vosotros señores.-dije y Daryl sonrió mirándome.
-Vale.-dijo Ayax resoplando.-Vamos anda.-dijo y todos dejaron los papeles que tenían por las mesas y Daryl se agachó un poco cogiendo mis piernas y pasándolas por sus hombros, cogió mis brazos con cuidado y se levantó cargándome en sus hombros.
-Daryl sujetame bien por tu vida.-le dije y él río.
-Mi vida eres tú así que ten cuidado al salir por la puerta.-dijo empezando a caminar mientras los otros coreaban un 'ooohhh que bonito'. Al llegar a la puerta me agaché y solté un pequeño gritito. Daryl bajó las tres plantas y fue hasta el salón, me dejó en el suelo y luego se sentó en el sillón, tiro de mi brazo y me sentó encima de él mientras los demás iban a cocinar a la cocina.
-'Mi vida eres tú' No me lo esperaba, pero ha sido bonito.-le dije y le di un piquito.
-Tu si que eres bonita.-me dijo y yo sonreí.
-Te despertaste romántico o que.-le dije sentándome mirando para él con una pierna a cada lado de su cuerpo.
-Si me lo pides me levantaré así todos los días.-me dijo sonriendo.
-Prefiero que te salga a ti ser así. Además también me gusta tu lado rudo.
-Cada día que estoy rudo terminamos haciendo cositas de mayores.-me dijo mirándome travieso.
-Me pones demasiado así.-le dije escondiendo mi cara en su cuello un poco sonrojada.
-Grandes declaraciones.-dijo riendo y yo también reí un poco.-A mi me gusta verte dormir.-dijo después de un rato en silencio provocando que yo riera.-Es verdad, me das paz cuando duermes aunque la paz no tiene nada que ver con lo que tú has dicho antes.
-Bueno eehh, a mi me gusta cuando sales de la ducha con la toalla en la cintura y el pelo mojado.
-Venga, para que luego me digan que me tengo que duchar más, si tu y yo terminamos haciéndolo todos los días es por algo.-dijo y yo empecé a reír.-Es verdad, me lo han dicho, pero yo me ducho todos los días, salvo cuando salimos y llego cansado que ahí me da pereza.
-Te da pereza si yo no me ducho, si yo lo hago tu vienes detrás como un perrito reclamando comida.
-Tu yo de esos momentos me indican que te encanta que lo haga.
-¿Por qué hemos terminado hablando de esto? Podríamos hablar del clima o de cualquier otra cosa pero terminamos hablando de que me gusta que me lo hagas en la ducha.-dije riendo.
-Que más da. Seguro que a Merle le encantaría saber nuestras privacidades, es más cotilla que nadie.
-Y por eso no va a saber nada.-dije y los dos. Después de un rato callados él paso sus brazos por mi cintura y me pegó a él con un poco de fuerza.-¿Estás bien?-le pregunté abrazándole.
-Si. Solo con esto de los Susurradores tengo miedo de perderos a ti, a Merle o a Dani. No lo podría soportar, no otra vez.
-Todo va a estar bien, todos vamos a estar bien.
-¿Y Judith, Rick, Carol? Alguien va a morir, eso es seguro, ¿qué pasa si es alguien de los que me importáis?¿Y si eres tú?
-No me va a pasar.
-¿Y si pasa?
-Si pasa te sonreiré desde el cielo. Pero ten por seguro que no he sobrevivido tantos años para que unos idiotas vengan a matarme.
-Te amo.-dijo sin soltarme.
-Yo también te amo.-le dije y dejé un beso en su cuello.
-Prometeme que seguiremos cuidándonos el uno al otro, pase lo que pase en nuestra vida.
-Lo prometo.-le contesté y noté como él sonreía.
-Algun día tendremos un bebé. Podría ser una niña.
-Claro, ¿por qué no? Seríamos nosotros en miniatura, siempre quise un hijo o hija, ya tengo a Dani pero quiero también uno que salga de mi.
-Espero que salga con tus ojos, eres la única persona que he conocido en toda mi vida con ese tono verde.
-A mi me gustan tus ojos.
-Pero Dani ya tiene los ojos azules.
-Esta bien.¿Cuándo se lo diremos?
-¿El que?
-Que no es nuestro hijo biológico.
-Todavia no, espera hasta que tenga 13 años o así.
-Asi está bien.
-La comida está lista.-dijo Ayax llegando con el recipiente de la comida y Álex y Adri detrás con los platos y tenedores. Yo me quité de encima de Daryl y fui hasta la mesa seguida por él, nos sentamos los dos juntos y empezamos a comer. Después entre Daryl y yo lavamos todo lo que habíamos usado y subimos al desván donde estaban los otros tres componiendo.
-¿Siguen escribiendo como si el apocalipsis no existiera?-me preguntó Daryl mientras mirábamos como Ayax Adri y Álex componían.
-Si, es lo que les gusta.
-No, no me refiero a eso, me refiero a si sus canciones hablan de la vida normal o de la vida en el apocalipsis.
-Siguen siendo como si el apocalipsis no existiera, es mejor así.
-¡Acabe!-gritó Ayax con una sonrisa.
-¿Tienes hecha la base?-le pregunté.
-Sabes que siempre la hago antes de terminar la letra.-me dijo y yo sonreí.
-Cantala.-le dijo Daryl y Ayax asintió y preparó la grabación de la base.-Despues me lo traduces.-me susurró Daryl y yo asentí.
-"Que bella es Venecia, que solito estoy en la Góndola. Qué bella es Venecia, que solito estoy en la... Debería estar muerto, pa' mi que estoy ya en la prórroga. Se murió de pena cuando se le fue la tórtola. Le dije al catador: deja que ella me envenene. Me como la manzana sin saber ni lo que tiene. ¿Quién llorará si nos fusilan como a Fede? Los supervillanos nunca salen por la tele. Y es que este e' mi brebaje pa'l malaje, así que bebe. Prepara tu equipaje, este viaje me lo debe'. Pero la mama dijo: Mucho quiere, nada tiene. La cama de esa viuda está llena de claveles.
En el sofá cama solo sexo y cine. Si la consciencia e' limpia nunca duerme, escribe. Necesito esto' remordimiento', me redimen. Ya he pasao' por esta mierda, siempre reincide. Deprime lo que premia a lo que oprime. Ya se que te deprime que ese rimmel se corre y nunca gime. Sueño contigo, despierto pensando en ti. Tu mi petrolero y yo el pirata somalí. Me siento por tú' laureles, navego por tú' placeres, me enfado con las paredes, dime qué por mí te mueres. Se que te amo porque duele y vamos camino de Ámber. El cuerpo y la psique, la materia y los seres. Me acuerdo de ella como ella de esa noche
No era de Granada ni escuchaba "Reproches".Un día la mamá me tiró el sonajero.Me vuelvo solo a casa hablándole al gondolero.Me acuerdo de ella como ella de esa noche.Empapamo' los cristales del coche.El día que te vi me devolvió mi babero.Y vuelvo solo a casa sin saberme el sendero.Yo cuido tu jardín, tú vigila mi' vergeles
La mancha de carmín en la boquilla de mi tele. La mamá dijo:
Bicho malo nunca muere.
No' amamo' cara a cara, discutimo' por la' rede'.Mi cafetería es la que te pilla' de paso.
Recojo apatía y un corazón en pedazo'.Vuelvo cada día por mi dosis de fracaso.Que no la quería, vale, soy un mentiroso.Ese gato viejo ya gastó seis vidas.Corazón de cartón me quiere de boquilla
Voy a hacerte el amor, no te quedes dormida.No mires el reloj que nos vamos enseguida.Me acuerdo de ella como ella de esa noche.No era de Granada ni escuchaba "Reproches".Un día la mamá me tiró el sonajero.Me vuelvo solo a casa hablándole al gondolero.Me acuerdo de ella como ella de esa noche.Empapamo' los cristales del coche.El día que te vi me devolvió mi babero.Y vuelvo solo a casa sin saberme el sendero."-cantó Ayax yo le traducí todo a Daryl y cada uno dimos nuestra opinión.
-Esta muy bien. La base está perfecta y combina con la letra en cada tono.-dijo Adrián.
-Esta perfecta además tiene una letra pegadiza, no creo que haya ningún pero.-dijo Álex.
-¿Tu tienes algo más que añadir?-le pregunté a Daryl y él negó.-Yo tampoco, ya lo han dicho los expertos.-dije con una sonrisa.-¿Nos vamos a cazar?-le pregunté a mi cazador y él asintió con una sonrisa.-Pues quedaros aquí componiendo o lo que queráis.-les dije a los tres chicos, ellos asintieron y Daryl y yo nos marchamos.-Hacemos buen equipo de caza.-le dije cuando ya habíamos cogido un par de ardillas y conejos.
-Si, somos los mejores.-dijo con una sonrisa que yo le devolví pero rápidamente la borré de mi cara.
-Ven aquí, vamos corre.-le dije cogiendo su mano y empecé a correr con él hasta un árbol que yo misma tenía preparado en el bosque por si me encontraba en apuros, justo como en ese momento.-Dispara a esa cuerda.-le dije señalándole una cuerda mientras yo disparaba a la otra para que la escalera cayese, los dos subimos los más rápido que pudimos y al llegar arriba yo recogí la escalera y cogí las flechas, los dos nos metimos en la pequeña casita de árbol que mi grupo y yo habíamos hecho. Cogí mi ballesta y desarmé la mira, la coloqué en un hueco que había entre los tablones de las paredes y miré como pasaban por debajo de nosotros unos cien caminantes, me fijé en sus manos y en la manera de comportarse, había algunos Susurradores. Dejé de mirar y me abracé fuerte a Daryl.-No podremos movernos de aquí, hay Susurradores entre los caminantes.-le susurré.
-¿Y si ven esta casita desde ahí abajo?
-No la podrán ver, ni siquiera tu la viste, está bien tapada. Pero voy a avisar a los chicos de que no salgan de la mansión.-le dije y cogí el walkie talkie.-Ayax, Adrián, Álex, ¿alguno me escucha?-pregunté muy bajito.
-Te escuchamos los tres.-dijo Ayax.
-No salgáis de la mansión, que ni siquiera sé os pase por la cabeza. Estoy con Daryl en la casa del árbol, está pasando por debajo de nosotros un centenar de caminantes y entre ellos hay Susurradores. Daryl y yo dormiremos aquí, mañana temprano venid con vuestro coche y el mío hasta aquí, nos recogéis y nos vamos para Alexandria.-dije.
-Entendido, tened cuidado.-dijo Ayax y los dos apagamos las radios.
-Hay dos mantas, agua y dos latas de comida.-dije mirándole a los ojos con miedo.
-Todo saldrá bien mi amor.-me dijo y yo me abracé a él mientras se me escapaba alguna lágrima.-Te lo prometo Ale, todo va a salir bien. Tu misma has dicho que no nos pueden ver aquí, además les hemos despistado, ellos nos han visto pero los caminantes no y ellos no podían ir más rápido que los caminantes porque terminarían devorados, nos perdieron de vista. Ni siquiera se les escucha ya.-me dijo cogiendo mi cara con sus manos y pegando su frente con la mía.-Saldremos de esta igual que salimos de todas. No permitiré que Dani crezca sin nosotros, no pienso dejar que tu padre y tus hermanos te pierdan, daré mi vida por ellos si hace falta.
-No, no podría vivir sin ti.
-Vamos amor, si mañana siguen por aquí no dejaré que te hagan nada prefiero que me lo hagan a mi, y puedes vivir sin mi perfectamente, ya lo hiciste durante años.
-No nos pasará nada, tu cuidas mis espaldas y yo cuido las tuyas ¿recuerdas?-le dije llorando.
-Claro que lo recuerdo, lo dijimos la noche del día en el que nos conocimos.
-Estas más viejo que en esa noche.-le dije en broma y él se hizo el ofendido.
-¿Ya no te parezco guapo?¿Crees que soy muy viejo para ti verdad?-dijo siguiendo la broma mientras yo reía y secaba las lágrimas que había derramado un par de minutos atrás.-Tu a mi me sigues pareciendo hermosa pero si yo a ti no, pues no puedo hacer nada.-dijo haciendo que estaba triste y yo reí un poco.
-Eres muy feo Daryl Dixon.-le dije en broma y él me miró aguantando la risa.
-Y tu muy guapa Alexia Martín.
-No me harás cambiar de opinión con piropos.-le dije siguiendo la broma.
-¿Y con qué te puedo hacer cambiar de opinión?
-Con un beso me conformo.-le dije y él río bajito.
-Ven aquí anda.-me dijo pegándome a él y uniendo nuestros labios en un dulce beso.
-Me da tanta tranquilidad que me beses así.-le dije con los ojos cerrados y con una sonrisa.
-Y a mi me da paz verte así cuando te beso de esa forma, estás tan relajada, aunque te estén bombardeando.-dijo y yo sonreí.-Tus besos son una droga.-me dijo y yo reí.
-Osea que mis besos son malos.
-Claro que no, ¿por qué dices eso?
-Porque las drogas son malas mi guapo cazador.
-Lo se. Pero tus besos son lo mejor.-me dijo y volvió a besarme. Estuvimos el resto de la tarde hablando y después cenamos y nos tumbamos encima de una manta y nos tapamos con la otra para dormir.
-Te amo Daryl. Buenas noches nene.
-Te amo Ale. Buenas noches amor.
...

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