-Ale, despierta, ya están todos despiertos, levantate.-escuché como Adrián me despertaba.
-Ya voy, dame dos minutos.-le dije perezosa.
-No, levántate ya, Glenn ha dicho que como no te despertases en cinco minutos iba a venir él a despertarte, y sabes que no te gusta como te despierta.-dijo sonriendo.
-Nonono, me levanto me levanto.-dije levantándome rápido.- Me cambio y bajo.
-Vale, te voy preparando el desayuno.- me dijo saliendo de la celda y bajando a la parte de abajo del bloque.
Me cambié de ropa, cogí la ballesta y coloque la pistola en el cinturón del pantalón y bajé.
-Buenos días.-les dije a todos mientras cogía el bol con cereales que me extendía Adrián.
-Buenos días.-me respondieron todos al unísono.
-Alexia, cuando termines de desayunar ¿podemos hablar a solas?- me preguntó Carol, me parecía algo extraño, pues estos días apenas hablaba con nadie, ni siquiera con Daryl.
-Emm... Si claro sin problema.-le respondí un poco confundida.
-Vale, te espero fuera.-dijo y salió del bloque.
Todos salieron poco a poco a fuera del pabellón, Glenn y Maggie harían la guardia.
-Carol, ya estoy.-le dije una vez había terminado y había salido fuera.
-Vale, ven siéntate.-dijo señalando una mesa que estaba vacía.-Te quería pedir perdón por como me comporté contigo. No sabía que me pasaba, necesitaba sentir algo, he intenté que Daryl me quisiera como algo más para que yo pudiera sentir algo. Cuando Sophia desapareció quede muy afectada, en ese momento me aferre a Daryl, él se estaba esforzando en encontrarla, y yo intenté algo más con él porque me sentía sola, y luego tú encontraste a mi hija, cosa que de verdad te agradezco. Ahora Daryl y yo somos mejores amigos, ya coloqué todas mis ideas y espero que me puedas perdonar y que empezemos desde cero.-me dijo a punto de llorar.
-Claro, no te preocupes, no hay problema.
-Y lo del reto que le hice a Daryl, de verdad no sé porque lo hice.-dijo con tono arrepentido.
-No pasa nada Carol, todo está bien.-le dije con una sonrisa.-Vamos con los demás.
-Hey Ale, vamos a necesitar tu ayuda. Vamos a quemar los cuerpos de los caminantes.-me dijo Rick señalando un montón de cuerpos de los caminantes que habíamos matado cuando llegamos a la prisión. Yo solo le asentí.
-Glenn y Maggie nos podrían ayudar.
-Si tienes razón, vamos a llamarles están en la torre.-dijo acercándose a Daryl.-¡Glenn!¡Maggie!-gritó Rick para que los dos chicos saliesen. Pero solo salió Glenn colocándose los pantalones y sin camiseta, con esa imagen todos nos reímos. Siguiendo a Glenn salió Maggie terminando de colocarse su blusa y pasándole la camiseta a Glenn mientras que todos nos reíamos.
-Sois muy infantiles.-añadió Carol colocándose a mi lado mientras se reía.
-Venga tortolitos bajar tenéis que ayudar.-les dijo Daryl con una sonrisa.
-Hey, mirad.-dijo Maggie desviando su vista a la salida del pabellón, allí se encontraba Hersel saliendo por su propia cuenta mientras que Beth y Carl le seguían.
-Es un viejo duro.-dijo Daryl sonriendo. Todos nos quedamos mirando como Hersel se iba a acercar a nosotros pero el grito de Carl se lo impidió.
-¡Caminantes!
-Vaya puta mierda.-susurre antes de salir corriendo a proteger a Hersel, Sophia y Beth.-Meteros allí, no salgáis hasta que vuelva. Coged esto, yo tengo otra.-les dije dándoles una pistola a cada uno y encerrandolos entre unas vayas para que los caminantes no los alcanzasen.
-Lori, Carl, venir aquí.-les dijo Maggie.
-¡La puerta del patio interior está abierta!- gritó T-Dog mientras corría con Carol para cerrar la puerta, pero antes de cerrarla un caminante le mordió. Aún así entraron a la prisión los dos.
Rick, Daryl y Glenn salieron corriendo donde estaban Óscar y Axel.
-Chicos venir, tenemos que luchar.-les dije a Ayax, Adrián, Álex, Guille y Miguel.-Vamos a matar a todos los que podamos.-dije empezando a matar a todos los caminantes que había en el patio de fuera para luego entrar dentro de la prisión.-Nos os separeis así somos más fuer...-no pude terminar ya que una alarma empezó a sonar por toda la prisión haciendo que un grupo de caminantes viniera hacía nosotros, entre los seis matamos a ese grupo.
-Hay que encontrar la sala de los generadores, allí lo podemos parar.-dijo Ayax.
-Pues vamos, correr.-dije rápidamente.
Estuvimos un rato buscando y matando caminantes, hasta que encontramos la puerta indicada.
-Vamos hay que entrar.-dije abriendo la puerta y viendo como Daryl y Glenn me apuntaban con sus armas. Dentro estaban ellos junto con Rick, Glenn, Axel, Óscar y uno de los presos que habían dado por muerto, este se estaba peleando con Rick. En cuanto vi que el preso había conseguido coger a Rick me abalancé sobre él.-Vamos hijo de perra, pégame a mi.-le dije sin dudarlo, aunque no me esperaba el fuerte y ágil golpe que me dio en el labio, aún así le pegue y Óscar le pegó un tiro matando así al preso. Yo solo le asentí en agradecimiento, mientras que sentía el sabor de la sangre, ese hijo de puta me había partido el labio.
-Hay que apagar la alarma.-apunto Rick y rápidamente Axel se dirigió a una máquina y apagó la alarma.
-Hay que salir de aquí y rápido.-dijo Ayax. Todos salimos de la sala y empezamos a matar a caminantes. Salimos al patio donde todos nos habíamos separado y esperamos a que llegasen los demás. Beth,Sophia y Hersel salieron de donde yo los había dejado y me devolvieron las pistolas.
-Faltan Lori, Carl,Maggie,Carol y T-Dog.-dije mirando a todos. El ruido de una puerta sonó y empezamos a escuchar el llanto de un bebé. Rápidamente me levanté del suelo viendo a Maggie llorando con un bebé entre brazos y a Carl con una mirada fría que nunca había visto en él.
-¿Dónde está Lori?-preguntó Rick y Maggie empezó a llorar más fuerte.
-Rick, yo lo intenté, pero ella dijo que salvase al bebé.-dijo Maggie entre sollozos. Glenn se acercó a abrazarla, mientras que Rick miraba a Carl.
-Yo le tuve que disparar.-dijo Carl fríamente. Rick estaba en shock y yo todavía no reaccionaba.
-La bebé está bien.-dijo Hersel.
-¿Hay algo que ella pueda comer?-preguntó Daryl.
-Aquí no, necesita leche materna o la fórmula que viene en botes.-dijo Hersel.
-Iré a mirar en las tiendas. -dijo Daryl.
-Voy contigo.-dijeron Glenn y Maggie a la vez.
-Maggie, tú quédate.-le dijo Glenn.
-Quedaros los dos, Maggie estás muy afectada, y tú Glenn cuida de ella. Yo iré con Daryl.-dije fría mientras cogía una mochila y mi ballesta.
-Vamos.-dijo Daryl subiéndose en su moto. Yo subí detrás y nos fuimos.
-¿Viste a Carol?-me preguntó Daryl alzando la voz, con el ruido de la moto no le podía escuchar bien.
-Se fue con T-Dog, a él le mordieron al cerrar la puerta del patio interior. Pero no la vi mas.-le respondí alzando también la voz para que me escuchará, el asintió y seguimos todo el camino en silencio.
-Es aquí.-dijo bajando de la moto.
-Pues vamos a mirar.-dije y baje de la moto también. Caminamos hacia lo que había sido una guardería, me quedé parada fuera mirando unos columpios, a mi hermana le encantaban. Negué con la cabeza quitando todos los pensamientos y rompí la ventana para entrar dentro. No había caminantes, si hubiera alguno ya habría salido por el ruido de la ventana. Cuando ya había entrado inspeccione la habitación. Era pequeña, había dos cunas, algunos juguetes y había manos dibujadas en la pared, cada mano tenía el nombre de un niño.
Seguí caminando hasta otra habitación, allí encontré fórmula para bebés, biberones y más cosas útiles.
-Alexia, he encontrado ropa de bebé. Pero comida no.
-Yo tengo comida. Ya podemos irnos.-le dije saliendo de la habitación.
Cuando volvimos a la habitación por donde habíamos entrado me quedé mirando tres manos que estaban vacías, ninguna de esas tres tenía nombre, y justo en el mueble de la lado había un rotulador. Lo cogí y pinte una cosa en dos de ellas.
"La pequeña Grimes"
"Estés viva o muerta. Te amo Kayra.
Alexia."
-¿Y en la tercera no vas a poner nada?-me preguntó Daryl.
-Pondría a mi hermano, pero si llega a estar aquí me mataría, diría que no lo pusiera que ya era mayor para que hiciese eso.
-Dame el rotulador, yo pondré algo.-dijo y le dí el rotulador para que escribiese algo.-Si tuvieses un hijo ¿Cómo lo llamarías?
-Daniel.¿Por qué?
-Me gusta el nombre.-dijo y escribió en la última mano.
"Daniel Dixon Martín"
-Luego me dirás qué no te gusto eh.-le dije sonriendo y subiendo a la ventana para salir, pero él me agarró fuerte del brazo y me echo para atrás, sin darme tiempo a responder me besó, era un beso cálido y lleno de amor.
-Ahora dime que yo no te gusto.-me dijo mirándome a los ojos.
-Da... Daryl-intente hablar pero estaba muy nerviosa, no me salía decirle eso.
-Alexia, te amo.-dijo y me volvió a besar, pero esta vez era un beso más tranquilo.
-Yo también te amo Daryl.- le dije mirándole a los ojos.
-Te pediría que me dijeses eso mil veces seguidas, pero como no nos vayamos ya, esa pequeña puede morir de hambre.-me dijo susurrando. Yo le asentí nerviosa y salí por la ventana, detrás salió él y pasó su brazo por mi cintura para ir caminando juntos hasta la moto.
...
El viaje de vuelta había sido silencioso , ninguno hablaba, solo disfrutábamos ese pequeño momento, en el que nadie nos molestaba.
Cuando llegamos a la prisión, Carl abrió las puertas y entramos rápido con la moto.
-¿Cómo está la bebé?-le pregunté a Carl mientras que los tres corríamos hacía el pabellón.
-Esta bien, pero no deja de llorar, tiene hambre. Me alegro de que no hayáis tardado.-dijo Carl mientras entraba al pabellón, justo al entrar ya se oían los llantos de la pequeña.
-Menos mal que habéis llegado ya.-dijo Hersel. Beth le pasó la bebé a Daryl mientras que yo me sentaba en una mesa un poco apartada del resto.
-¿Ya tiene nombre?-le preguntó Daryl a Carl, este negó con la cabeza, Beth terminó de preparar el biberón y se lo pasó a Daryl.-¿Te gusta eh? Si claro que te gusta. Serás la pequeña patea traseros.-dijo y yo solté una carcajada haciendo que él me mirase con una gran sonrisa.-Parece que a tu tía le hace gracia tu nombre, vas a tener que pegarle por reírse de tu precioso nombre.-le dijo Daryl a la bebé y volvió a mirarme mientras que yo me reía.
-Se te da bien ser niñera. Creo que Rick te contratará como su nanny.- le dije a Daryl en broma y todos se rieron. Todos menos Rick, que no estaba allí.
-Pequeña patea traseros, creo que no vas a ser la única que le pegue, yo te ayudaré.-le dijo Daryl a la bebé y todos nos reímos.- Joder, si que tenía hambre.-añadió enseñándonos el biberón vacío y dándole la bebé a Carl.
-¿Estáis todos bien?- preguntó Rick entrando al pabellón con la mirada perdida.
-Si estamos todos bien.-respondió Hersel-¿Tú cómo estás?
-Bien, no os preocupéis. He limpiado el cuarto de las calderas.
-¿Cuántos caminantes había?-le preguntó Daryl empezando a enfadarse.
-No lo sé, una docena, dos docenas o quizás tres.-respondió Rick quitándole importancia.
-¡Joder Rick!¡No es normal, todos lo estamos pasando mal, pero no puedes ir arriesgando tu vida así! ¡Tienes una hija recién nacida!-le grité enfadada.
-Si estáis bien me voy.-dijo y se dió la vuelta.
-¡Rick, no te creas que no te seguiré!-le volví a gritar para que volviera pero no lo hizo, y tal como le dije salí detrás de él.
Después de un rato siguiendole me perdí, ya no lo tenía en mi campo visual. Hasta que de pronto vi restos de alguien en el suelo, al apuntar con la linterna algo brillante en el suelo llamó mi atención, me agaché y cogí la pulsera que le había regalado a T-Dog, y justo pegado a la pared, estaba el collar que él siempre llevaba.
*FLASHBACK*
-Ale, quiero que cuando yo muera te quedes con este collar.-me dijo T-Dog mostrándome un collar que tenía colgado, era de plata con una cruz.
-T, eso no va a pasar.
-Prometeme que lo guardarás bien, porfavor.-me pidió.
-Vale, te lo prometo, pero jamás tendré que guardar ese collar porque mientras que pueda no dejaré que nada te pase.-le dije y él me abrazó.
-Vale, pero al menos sé que en el caso de que algo me pase tu me guardarás el collar. Me lo regaló mi madre antes de morir, murió antes de que todo empezase.-yo le asentí y volvimos junto con el resto del grupo.
*FIN FLASHBACK*
Cogí el collar y lo limpié con la manga de mi sudadera mientras que algunas lágrimas se me escapaban. Me puse el collar y la pulsera y me levanté del suelo.
-Seré fuerte por ti T.-dije mirando los restos que quedaban de uno de mis mejores amigos.
-Ale... Vuelve con los demás.-sentí que Daryl me hablaba.-Yo daré una vuelta.
-Voy contigo-le dije e íbamos a empezar a caminar pero paré a Daryl.-Daryl, aquí solo está el cuerpo de T, y Carol iba con él.
-Da igual, ya la hubiéramos encontrado si estuviera viva, ella ya hubiera vuelto.
-Tienes razón.
-Entonces vamos a dar una vuelta.Estuvimos un rato caminando, hasta que nos sentamos frente a unas taquillas, había una que no paraba de intentar abrirse.
-¡Joder!¡Para!- le grité al caminante que estaba dentro de la taquilla a la vez que le pegaba una patada a la puerta de esta. Saqué el cuchillo, iba a matar al caminante que estaba dentro pero me paré al abrir la puerta.
-Carol-susurre al verla tirada deshidratada-Daryl, es Carol, vamos tenemos que sacarla.-rápidamente Daryl se levantó del suelo para comprobar que era verdad lo que le decía, entre los dos cogimos a la mujer y la llevamos corriendo al pabellón. Allí Hersel comprobó que estuviese bien y le dimos comida y agua, después le dejamos descansar. Sophia se había alegrado muchísimo al verla, pues ella pensaba que su madre había muerto.
Ya era de noche, Rick no había vuelto todavía.
-Hey, yo ya me voy a dormir.-dije empezando a subir las escaleras.
-Yo también.-dijo Daryl subiendo detrás de mí.-¿Duermes conmigo?-me preguntó mientras subía a mi lado, yo solo le asentí y fuimos juntos a su celda.
Me eche del lado que daba a la pared y Daryl se acostó a mi lado.
-¿Sabes que tenemos algo pendiente?-me preguntó sonriendo- Aunque por hoy lo dejaré, estoy demasiado cansado.
-Yo también.
-Buenas noches. Te amo.
-Buenas noches. Igual te amo.-le dije él me abrazó y nos dormimos...
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Un Ángel Con Ballesta
ActionAlexia es una chica joven que ha pasado por muchas cosas, cree que lo que vive es una pesadilla, hasta que de verdad empieza la pesadilla mundial. Piensa que morirá sin que nadie la quiera en el mundo nuevo, pero nunca se imaginaría que un ballester...