50 días después...
Ya había pasado más de un mes y medio,todo iba bastante bien. Teníamos una huerta, cerdos, agua corriente, y bastante más gente, lo que hacía que hubiese más caminantes en las vayas. La relación con Daryl seguía igual, nadie había hecho la pregunta, y en ese tiempo no pasaron más allá de besos.
-'Ale, tengo que hablar contigo.'-me dijo Kayra entrando en mi celda, ella se sentó a mi lado y comenzó a hablar-'Creo que estoy enamorada de Ayax, ayer casi nos besamos, es muy bueno conmigo, y estamos muy juntos.'
-'Habla con él, te dirá lo mismo, lo conozco y sé que también siente algo.'
-'Vale, gracias.'-me dijo y me dio un beso en la mejilla.
Me quedé mirando el techo de la celda sin pensar en nada, solamente disfrutando del silencio que había en ese momento. Inconscientemente miré a la entrada de la celda y me encontré con la mirada fija de Daryl, que estaba apoyado en el marco y mirando con una sonrisa, sin darme cuenta le sonreí también y él se acercó y se sentó a mi lado. Nos quedamos un rato mirando el techo hasta que él habló.
-¿Sabías que cada vez que miró tus ojos me gustas más?-me dijo sin esperar respuesta y yo le sonreí- Y también me encanta cuando sonríes y te sonrojas con cualquier pequeño comentario. Siempre me sorprendiste mucho, antes de todo no estaba agusto con una chica si no era en mi cama, en cambio contigo es distinto, solo hemos estado una vez juntos y en cambio tengo mejores recuerdos contigo que aquel día, no digo que no me lo pasase bien contigo, pero mi mejor recuerdo contigo es el de cuando fuimos a por leche para Judith, el mismo día que nació, cuando te pregunté cómo llamarías a tu hijo y tú dijiste que Daniel, y yo puse el nombre con nuestros apellidos juntos. O cuando me confesé contigo, aquel beso que te di lo tengo grabado en la mente. También está el día que invadieron la granja, no fue un día muy bonito pero cuando íbamos los dos con Carol en el coche y tú cada vez que ella coqueteaba conmigo te enfadabas, aunque intentabas esconderlo, sin saber el porqué aquellos enfados tuyos me daban vida, el ver cómo te enfadabas porque otra se acercase.-dijo con una sonrisa melancólica- No se si es el momento, yo siento que si, aunque si tú no lo ves así no pasa nada.-dijo y sacó una caja de su pantalón, recordaba aquella caja, cuando estaba enfada con él me pidió que se la cogiese de mi coche, se le había olvidado allí- Jim me dió esto cuando lo dejamos apoyado en aquel árbol, él me dijo que no te dejase por nada, aunque solo fuésemos amigos, que no te perdiera, y que si algún día te pedía ser algo mas que te diera esto.-me dijo abriendo la pequeña caja y dejando ver una pulsera de oro con un símbolo de infinito-Y por si todavía no lo has pillado,¿quieres ser mi novia?-me preguntó con una sonrisa y mucha felicidad en sus ojos.
-Creo que no hace falta preguntarlo.-le dije con una sonrisa y él me abrazó y me dió un beso con mucho amor.
-Ven, dame la mano, te pondré la pulsera.-me dijo y cogió mi mano como si fuese lo más frágil del mundo, me puso la pulsera y me miró con una sonrisa-¿Vamos a dar un paseo?
-Por supuesto.-le dije con una sonrisa.
Salimos del pabellón y Daryl entrelazó nuestras manos, nunca lo había hecho y me sorprendió. Caminamos por los patios de la prisión por un rato, una hora más o menos, íbamos hablando de tonterías y riendo.
-Ale, he visto una cabaña a unos kilómetros,aquí no hay mucho que hacer,¿vamos a pasar dos días?,Rick está de acuerdo, ya lo he hablado con él.-me propuso Daryl.
-Me parece bien, así podríamos tener un poco más de privacidad, y podemos estar aunque solo sean dos días solos.-le dije con una sonrisa.
-Entonces coge algo de ropa, comida y agua, nos iremos ahora.-dijo y comenzamos a caminar a nuestra celda.
Los dos cogimos la mochila con algo de ropa, comida y agua. Salimos del pabellón y nos fuimos en mi coche.
Un rato más tarde, después de haber estado un rato por el bosque, llegamos a una cabaña. Dejé el coche cerca y los dos nos bajamos con las armas en alto, con cuidado entramos en la cabaña y escuchamos el llanto de un bebé en la planta de arriba. Despacio subimos y entramos en la primera habitación, allí estaba un bebé encima de la cama y una chica tirada al lado de la cama, rápidamente nos acercamos a ver si estaba viva.
-Me...han mordido, por favor...cuidar de él,... aún no...no tiene nombre,...cuidarlo y...decirle que sois sus...sus padres, por favor.-dijo aquella chica de unos 30 años.
-Lo cuidaremos no te preocupes por eso.-le respondió Daryl en un tono suave. Ella asintió y poco a poco cerró sus ojos. Yo me acerqué y le enterré el cuchillo en la cabeza para que no se convirtiera.
-Creo que ya no podremos estar aquí dos días.-le dije a Daryl mientras cogía con cuidado al pequeño bebé.
-O puede que sí.-dijo cogiendo una bolsa que había al lado del bebé, al abrirla vimos ropa de bebé, pañales, biberones y leche en polvo.
-En ese caso si que podremos.-dije mirando al pequeño de pelo negro y los azules.-¿Cómo lo llamaremos?
-Daniel. Aquel día que nació Judith, en la guardería dijiste que te gustaba ese nombre, y yo puse ese nombre con nuestros apellidos.-recordó con una sonrisa.
-Entonces así se llamará. Ahora tenemos que hacerle un biberón, no deja de llorar.-le dije y le pase el bebé a Daryl, cogí las cosas necesarias y bajamos abajo a hacer la comida para el bebé. Calenté el agua y después eche la fórmula, se lo di a Daryl y él empezó a darle el biberón al bebé. Yo me quedé mirando a los dos chicos, Daryl no se daba cuenta de mi mirada fija, me parecía una escena preciosa,a partir de ese momento ellos iban a ser los hombres de mi vida.
-Te comeré a besos como sigas mirandonos con esa sonrisita.-me dijo Daryl con una pequeña sonrisa.
-No puedo evitarlo, me parece bonita la escena.-Daryl me dirigió una sonrisa y volvió a mirar al bebé.
-¿Cuándo crezca le hablaremos de su madre?
-Nose Daryl, en el momento lo diremos o no, aunque supongo que sí le hablaremos sobre ella. Es obvio que no se va a parecer a nosotros porque no es nuestro, así que tendremos que contárselo.-él asintió y siguió dándole el biberón a Daniel.
El resto de la tarde estuvimos cuidando a Daniel y hablando de lo bien que nos iba en la prisión.
-Princesa, vamos a cenar y a dormir. Creo que será mejor que volvamos mañana,estamos demasiado expuestos con el pequeño.-me dijo levantándose a por unas latas de comida.
Comimos los tres y nos fuimos a dormir.
...
Por la mañana recogimos las mochilas y todo lo que nos servía de la casa y lo guardos en mi coche.
-Voy a enterrar a la madre de Dani.-dijo Daryl y yo asentí.
-Coge el cuerpo, yo miraré el garaje de la casa y cavaré.
-¿Cómo piensas cavar con Dani en brazos?-dijo con una sonrisa y yo me golpee suavemente la cabeza.
-Esperare a que traigas el cuerpo y te daré a Dani.
-Está bien, ahora vete a mirar en el garaje.-me dijo y me dio un beso en el pelo.
Caminé hasta el garaje y entre por una puerta que había por fuera. En un brazo llevaba a Dani y en el otro la pistola. Dentro del garaje no había ningún caminante así que baje el arma, camine por allí y encontré un asiento de coche para bebés, con una sonrisa limpie el polvo que tenía y coloque a Daniel allí, con mucho cuidado cogí el asiento con las dos manos y lo llevé hasta el coche,lo coloque en los asientos traseros, coloqué un walkie prendido por si el bebé lloraba y fui de nuevo al garaje.
Encontré una caja llena de comics y otra caja con armas. Lo lleve todo al coche y vi como Daryl salía con el cuerpo envuelto en una sábana blanca. Miré a Daniel a través de la ventana y este estaba durmiendo tranquilamente. Cogí una pala y empecé a cavar el agujero mientras Daryl hacia la cruz.
-Se llamaba Sara Williams.
-¿Cómo?-pregunté sin haberle escuchado muy bien.
-La madre se llamaba Sara Williams.-dijo y yo asentí.
-Ya está, iré a por Daniel y la podremos enterrar.
Corrí hasta el coche y cogí al bebé, el cual se despertó al ser movido. Caminé hasta Daryl y la enterramos.
Después de eso nos subimos al coche y volvimos a la prisión.
Carl y Rick nos abrieron las puertas y nosotros pasamos con el coche.
-Hey chicos, habéis tardado un día menos en volver.-dijo Rick con una sonrisa.
-Y aquí el motivo.-dije sacando al bebé de su asiento.
-¿Y ese bebé?-preguntó Carl.
-Lo encontramos en la cabaña, su madre estaba tirada al lado de la cama en la que él estaba, la habían mordido y nos dijo que lo cuidaramos y le pusiésemos un nombre.-les explicó Daryl.
-¿Y cómo se llama?-preguntaron a la vez.
-Daniel.-les respondí.
-Daniel Blake Williams.-dijo Daryl en un susurro.
-¿Cómo?-preguntamos los otros tres a la vez.
-¿Blake? Pero ese es el apellido del Gobernador.-dije extrañada.
-La madre tenía un papel dirigido a Philip.-explicó Daryl.
-Está bien,¿pero esos van a ser sus apellidos?-preguntó Rick.
-La madre dijo que nosotros fuésemos sus padres, así que se llamará Daniel Dixon Martín.-dijo Daryl con una sonrisa.
-¿Qué tal aquí?,¿no pasó nada ayer verdad?
-Tranquila Ale,lo único que hemos visto es que ha aumentado el número de caminantes y la mayoría tienen sangre en los ojos y en la boca, Hersel dice que puede ser alguna enfermedad, los que limpian las vayas usan un pañuelo en la cara y guantes por si es contagioso.-asentimos y nos fuimos al pabellón.
Dimos a conocer a Daniel y Beth se quedó cuidándolo mientras yo y Charles nos fuimos a hacer guardia.
-"Ale,¿crees que Zack y Beth lo dejarán en algún momento?"
-"Charles Martín Rodríguez,¿me estás diciendo discretamente que te gusta mi rubita?"
-"Yo no he dicho eso, pero si me gusta. No puedo negarlo."
-"Pues no lo sé Char, igual si o igual no, solo puedo decirte que Beth está con Zack por estar con alguien, lo veo en sus ojos, cuando la conocí tenía un novio, Patrick se llamaba o algo así, ella tenía un brillo especial en sus ojos cuando lo veía, y con Zack no lo tiene. Hablaré con ella e intentaré que me diga sus verdaderos sentimientos."-Charles asintió y sentimos como alguien tocaba la puerta, está se abrió y Ayax y Kayra entraron.
-"Hola ata, hola Charles."-dijo Ayax nerviosos.
-"¿Qué coño pasa?,¿por qué cojones estás así de nervioso?"-le pregunté.
-"Estamos saliendo."-dijo Kayra rápido.
-"Lo sabía."-dijimos Charles y yo a la vez y empezamos a reír mientras Ayax y Kayra nos miraban divertidos.
-"Pensé que os lo ibais a tomar peor."-dijo Ayax y los dos negamos con una sonrisa, ellos se despidieron y salieron de la torre de vigilancia.
-"Lo veía venir."-dijo Char.
-"Yo también, y también veo venir otra parejita."-le dije con una sonrisa.
-"Eso espero."-dijo y terminamos la vigilancia en silencio.
Después cenamos todos y fuimos a nuestras celdas a dormir.
Daniel dormiría en una cuna que tenían de repuesto por si la de Judith se rompía.
-Buenas noches preciosa.
-Buenas noches Darylina.-los dos reímos y nos dormimos abrazados.
...
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Un Ángel Con Ballesta
AcciónAlexia es una chica joven que ha pasado por muchas cosas, cree que lo que vive es una pesadilla, hasta que de verdad empieza la pesadilla mundial. Piensa que morirá sin que nadie la quiera en el mundo nuevo, pero nunca se imaginaría que un ballester...