Príncipe

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De la noche a la mañana los comentarios maliciosos hacia la bestia del reino desaparecieron para decir que un nuevo príncipe había aparecido, pero era una lástima que no fuera porque las personas aprendieran a respetar y entender que ney nunca fue una mala persona, si no porque tenía dinero, poder y apariencia, como si de repente estuviera bien que sea un noble, eso deja en claro que sí el pensamiento no cambia con buena fé, la basura sigue o se transforma, pero no desaparece.

Dejé de acompañar a Nei todas partes, pero siempre que teníamos un tiempo libre nos juntábamos para conversar o discutir. Pero gracias a Kail obtuve más tiempo para mis estudios y negocios, aún así, aún tenía que evitar los problemas.
No solo debía evitar al baron, el príncipe heredero, la santa, también estaban las señoritas celosas e interesadas que me veían como competencia, al igual que  los hombres desagradables que querían saber que beneficios podía darles una simple plebeya con los Garrens.

Quizas Nei recibe propuestas formales de matrimonio pero yo recibí propuestas indecentes de convertirme en la amante de algún idiota.

A nadie parecía importarle que yo quisiera tener una vida tranquila, hoy me tocó un grupo de tres señoritas molestas que me encontraron oculta no muy lejos entre los jardines traseros del establecimiento.

_ Si va a leer un libro debería estar en la biblioteca de servicio. Tengo entendido que la señora Claris es una exelente maestra de la etiqueta, lastima que gasto su tiempo en alguien que desprecio su buena fé y se arrastra por el piso _

¿Están molestas porque tuvieron que buscarme?.

Estaba apoyada contra el tronco de un árbol y me levanté tomando la pequeña manta que había usado para sentarme, claramente la lectura terminó.
La mayor parte de mi vida escuché este tipo de cosas, quizás diferentes historias pero todas con el mismo fin de querer lastimarme y los soporte durante muchos años esperando y suplicando que terminaran, hechando la culpa a la maldición, a mi falta de fuerza a muchas cosas hasta que entendí que las costumbres y creencias de estás personas son la verdadera raíz del problema, lo entendí de joven, no me llevó mucho realmente, solo que fuí un poco ingenua también.

Me hice un poco de ilusiones esperando un poco más de todo esto como si detrás del "fin, se acabó la maldición" estuviera la paz que anhelaba. Hay paz, pero esperaba más, siempre me defendí y supongo que lo seguiré haciendo, aún así, eso no quiere decir que quiero pasar el resto de mi vida luchando o escondiendome para evitar uno que otro problema.

Pero por ahora me concentraré en este problema, se muy bien que ser un plebeyo en esta época es lo mismo que ser un insecto en esta sociedad de nobles, el respeto está en la sangre de la nobleza y el poder político le corresponde a los nobles, esos ideales son su base para maltratar y denigrar a otros entre los más débiles "supuestamente".

Es común entre las señoritas nobles en mostrar su posición ante los demás apoyándose en sus títulos, porque sinceramente la mayoría más allá de eso no tienen nada, viven bien, estudian para servir a sus pretendientes y hacerse conocer entre los nobles y convertirse en las damas de la sociedad, los bailes simplemente están porque es lo único en lo que destacan creando rumores, o consiguiendo información pero más allá de eso la mayoría no trabaja aunque tengan la posibilidad como nobles y dependen siempre de un hombre o de un título nobiliario, ese hombre s el negoció de la mayoría de las señoritas.

En este caso claramente una sirvienta les está quitando posiblemente una oportunidad de oro para estar con alguien agradable con poder, dinero y una estúpida apariencia que empieza a molestarme un poco al sentir que me está dando demasiados problemas, antes, durante y ahora.

La señorita Rosa Derlen que estaba delante guiando el grupo volvió a hablar.

_ Incluso ahora tienen un sirviente que hace su trabajo y sirve al joven conde en sus deberes como corresponde... ya deberías desaparecer_

Mi dulce maldición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora