Gritos. Yo de cinco años. Un niño al que no conozco. Sabor metálico y exquisito en mi boca. Ganas de más de eso. Isteria. Pánico. Algo que no entendía. Olores nuevos. Fuego recorriendo mis venas. La voz de mi madre. Y una luz blanca alcanzarme, para que después todo se volviera negro.
Me despierto con el corazón acelerado, pero no recuerdo lo que estaba soñando.
Abro los ojos con algo de dificultad. El dolor de cabeza me está matando.
Siento que estoy acostada sobre una superficie suave. Pero abro bien los ojos y enfoco el techo que tengo arriba de mi, me doy cuenta de que no es el de mi habitación.
Me siento en la cama precipitadamente, muy rápido. Eso provoca que me dé un mareo y la cabeza me dé un fuerte punzaso.
Llego una mano hacia mi cabeza para frotar mis sienes. La confusión me asecha. El miedo por no saber dónde estoy crece cuando me doy cuenta de que es de noche.
Todos los recuerdos están confusos.
Recuerdo a mi mamá hablando con Rory en la cocina. Salí acelerada y luego lo que decían los chicos del olor a sangre cuajada y dulce.
Recuerdo a Emersson ponerme un collar. Llevo mis manos a mi cuello para asegurame de que sí lo tengo puesto.
Recuerdo el aliento de Emersson en mi cuello, su cercanía y su comportamiento después de eso.
Todo se volvió confuso cuando salí del carro. La luna llena nunca me había afectado tanto.
Emersson y Clarisse se fueron a una parte del bosque y luego comencé a vomitar. Cuando sentí ellos ya estaban de regreso y yo ya estaba perdiendo la conciencia. Pero recuerdo ese olor, de antes de perder la conciencia.
Me siento en la cama tratando de procesar todo. Pero cuando levanto la vista, me encuentro con esos ojos verdes, mirándome fijamente, y junto a su portador, está Clarisse, recostada en su brazo y al parecer, dormida.
—Tenemos que explicarte qué rayos pasó.
Me llega un golpe de confusión.
—¿Qué yo te tengo que qué?— logro decir, con algo de aturdimiento.
Él se pone de pie y camina hacia mí. Yo no me muevo en mi lugar, pero levanto la cabeza cuando lo tengo justo enfrente.
Lo observo mejor, tiene la mandíbula apretada, y la sombra de una barba se acerca. Sus ojos son puro fuego, pero puedo ver pequeñas sombras oscuras debajo de ellos, como si no hubiera dormido nada.
—Tú olor no es algo normal — suelta derrepente, pero aprieta mucho los dientes, como si se estuviera conteniendo—¿Sabes porqué te desmayaste y tuviste esa reacción?
Si algo he hecho todos estos años, es no hablar sobre lo que me pasa con la luna, y más que nada porque nunca ha tenido una explicación.
Simplemente comencé a tener colapsos cuando la luna estaba llena.
No se como, pero mamá averiguó sobre una medicina que me hacía calmarme cuando me ponía así, y comenzó a hacerse una rutina para mi encerrarme en luna llena y tomar medicina, salga o no.
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Luna Llena De Amor
FantasyPrimer libro de la saga: Amor de Fantasía. . . Una profecía. Dos almas gemelas. Una Vampira. Un hombre lobo. Hambre de ambos. ¿Qué pasará cuando Esmeray se dé cuenta de que es la última hembra de su especie? ¿Qué pasará cuando se dé cuenta de la p...