Pídele Que Regrese - Jeonglix/Lixin

18

" Que... ¿ Llorón? - aquella voz rio con gusto por su desgracia - dijiste que lo ibas a cuidar por mí ¿ y que hiciste ? ¿ Que hiciste al no cuidar al rosal más hermoso del mundo? Lo olvidaste , te olvidaste de regarlo y ahora... ¿ Te atreves a llorar como un cobarde ? ¿ Piensas que tus lágrimas lo van a devolver? - esas palabras fueron como una bofetada metal y si que le dolieron muy profundamente - JeongIn era mi todo. Quisiera haber estado en tú lugar, por que el corazón te lo entrego a tí y no a mí. Sabes lo que tuve que aguantar verlos felices por fin a ambos ¿ Mientras yo me rompía por dentro? Y tú... Tu solamente corriste por una ilusión. Mi hermano siempre fue un idiota y siempre lo fué... Por eso nuestro padre no dejo la empresa en sus manos... "

Las palabras se perdieron pues había dejado de recordar lo que hace dos horas le había dicho Inyeop. Al chico lo había encontrado comprando un café , él también había entrado a la misma tienda. En ese momento hubo tensión y a Inyeop no le dió vergüenza decirle su verdad frente a muchas personas que iban al local a estudiar desde muy temprano o solamente a comprar.

"Sufre... Sufre como yo sufrí al no tener el amor de JeongIn. Lo peor de todo es que gracias a tí ni siquiera voy a poder verlo "

Una lágrima corrió por su mejilla, mientras apretaba el café del vaso que había enfriado hace mucho, no se había atrevido a probar ni un sorbo. Limpio las lágrimas que habían empezado a acumularse en sus mejillas y presto atención a su alrededor.

Había muchos niños jugando por los columpios, toboganes y demás juegos que había en el parque. Estaba sentado en una banqueta completamente solo y también observo como algunos padres jugaban como niños pequeños junto a sus hijos. Félix pensó que esos podrían haber sido él, JeongIn y su pequeña. ¿ Dónde estaba ella ?

Cuando fue con toda la rabia del mundo a reclamarle a sus padres lo que pudieron haber echo con ella, tristemente no los encontró. Le informaron que los muy malnacidos se habían ido de Corea, seguramente a Australia.

- te encontraré mi pequeña... Lo haré... - siguió observando el espectáculo de los niños jugando. Cuando de pronto oyó hablar una vocesita a su atrás, volteo por pura curiosidad y vio a una pequeña niña de unos cinco años junto a dos chicos. Uno era más bajo que él otro. El más alto de los chicos lo miro por confusión y le susurro secretamente a su pareja al oído.

- ¿papi ya nos vamos ? Acabamos de llegar... Yo quiero jugar con ustedes ... - se quejo la pequeña, pues ambos chicos le habían cogido de cada manita y se dieron la vuelta dispuestos a regresar por dónde habían entrado.

- después cariño. A papá ning le dió dolor de estómago...

Félix observaba con más atención al más alto. Ese chico... ¿ Dónde lo había visto? No lo recordaba tan bien... Pero estaba seguro que si lo había visto ¿ Pero dónde ? Además que cuando vio a la pequeña sintió una pequeña sensación de felicidad, apenas vio sus ojitos. Eran iguales a los de JeongIn, su JeongIn.

- JeongIn ayúdame a encontrarla por favor... - pronunció , cerrando los ojos en medio de una súplica mental.