26.Humanízate.

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NO SEAS PERFECCIONISTA

Huye del perfeccionismo. Ser perfeccionista... produce ansiedad y estrés. Ni más ni menos.
La tensión que pones en las cosas y en lo que te sucede, siendo perfeccionista, aumenta los niveles de ansiedad.
Además, es completamente ridículo, puesto que tan solo puede ser una pretensión, ya que nunca lo lograrás. Es literalmente imposible ser perfecto.
Así que esto te lleva a reconocer que es imposible una vida sin problemas, y por ende, una vida sin miedo. No es que tengas que sentir miedo todo el rato. Al contrario, reconocer el miedo como una emoción natural te lleva a relajarte y a saber "vivir sin miedo". El miedo es una respuesta humana que nos ayuda a adaptarnos adecuadamente a una situación. En realidad, nos ayuda a actuar.
No tienes porqué ser una persona perfecta y no tienes porqué ser invulnerable.

CONSECUENCIAS DEL AFÁN DE PERFECCIONISMO

En realidad, el afán de perfeccionismo (que aprendiste en un momento de tu vida) es una fatal auto-exigencia.Te lleva directo/a a:
- más sufrimiento: más quieres ser perfecto/a en algo, más te exiges, y no tiene fin. Ya estás en un círculo vicioso que nunca llega a satisfacerse.
- estrés
- ansiedad generalizada: porque ya vives con esta auto-exigencia en tu rutuna diaria.
- posiblemente te lleve a exigir también a los demás... más de lo mismo.

PREGUNTAS QUE PUEDES HACERTE

- ¿Crees que eres perfeccionista?
- ¿En qué grado, de 0 a 10?, siendo 0 = nada y 10 = siempre.
- ¿Cuándo se dispara este afán, más de la cuenta?
- ¿Cómo puedes dejar de serlo?
- ¿Cómo puedes dejar de exigirte tanto concretamente?
- ¿Qué puedes empezar a pensar de ti a partir de ahora para ser imperfecto/a?
- ¿Qué vas a hacer contigo a partir de ahora?
- ¿Y con los demás?

MIS NOTAS

TRUCO PARA SER VULNERABLE... Y PERMITÍRTELO

El tema es que dejes de querer ser perfecto/a, lo cuál te lleva a dejar de exigirte tanto. Lo cual a su vez te lleva a permitirte ser vulnerable. Y lo cual, finalmente, te lleva a contemplar de forma relajada la posibilidad de equivocarte.
- Toma consciencia de la situación crítica: aquella situación en la que reconoces que tu afán de perfeccionismo te supera.
- Reconoce en qué modo concreto te exiges demasiado.
- Reconoce tu mayor temor: ¿qué es lo peor que podría pasar?
- Visualízalo a tu manera.
- Visualíalo ahora reconociendo tu humanidad.
- Reconoce que miles de personas tienen tu mismo temor.
- ¿Cómo tratarías a una persona que tiene ese mismo temor, que además se ha hecho realidad?
- Aplícate los mismos consejos.
Haz lo mismo con todas las situaciones concretas que hayas detectado. Te sorprenderá el nivel de estrés que te quitarás de encima.

Psicología. Tratando la Ansiedad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora