Differents Souls[Tom Kaulitz]

༄𝗣𝙖𝗿𝙩𝙮 𝙤𝗿 𝙨𝗲𝙭?

Me encontraba sentada en la orilla de la cama mirando a Bill como sacaba las cosas de una bolsa, este saco un vestido rojo largo y muy elegante el cual iba abierto de un lado de la pierna y descubierto de la espalda junto a unos pequeños tirantes que lo sujetaban. Saco unas zapatillas de mismo color de el vestido para luego mirarme.

-Estoy seguro a qué te verás hermosa.- dio una sonrisa y luego tomo la bolsa. -Vamos Megan, tienes que arreglarte.- su voz sonó dulce para luego dejarme sola en la habitación cerrando la puerta tras el.

Ya eran 8:30p.m y según Bill era el momento adecuando para arreglarme ya que quería que todo estuviera perfecto, no tenía ganas de nada y solo pensaba en lo sucedido de esos 3 días pero claro quería salir de ahí así que tuve que levantarme e irme a bañar para ponerme lo que me había dejado aquel chico.

Al terminar de bañarme me enrrede una toalla en mi cuerpo y salí a buscar mi ropa interior la cuál convinaba con el vestido y hacia un buen conjunto, me lo puse y pude notar como mis piernas parecían haber sanado pero no entendia una mierda de como podía haber pasado eso, solo tenían un color rojiso pero no sé encontraba ningún rasguño o algo que las hiciera ver mal.

Me puse las zapatillas para luego acercarme al espejo y arreglar mi pelo dejándolo en suelto, este se veía lindo, convinaba con los mechones rojos de mi pelo, tome mi maquillaje y pase un poco de rubor en mi nariz y mis pómulos/mejillas. No quería verme muy pintada así que al último solo puse un brillo en mis labios rojos y me enchine las pestañas poniendo rimel y haciendo un delineado como siempre lo hacía. Por un momento me sentía tan feliz, amaba esa parte de mi, la cuál se arreglaba sin importar lo que pasaba.

-¿Megan? ¿Ya estás lista?- Tom habló fuera de la habitación.

Caminé hacia la puerta y la abrí dejándome mostrar en toda la vista a el hasta bajar la mirada. -Ya..-

-Megan.. no quiero verte así.- Tomo mi barbilla haciéndome mirar hacia arriba. -Te ves... hermosa.- me dio una sonrisa marcando sus hoyuelos en las mejillas.

Me aleje de su agarre. -Si gracias. ¿Ya es hora de irnos?- lo mire sería mientras tome mi bolso que se encontraba en la mesita de noche a lado de mi.

-Si pero solo hay que esperar a Bill- salimos del cuarto y Tom fue directo a la de Bill tocando como un maldito desesperado. -¡Ya vamos Bill!- Al decir eso, la puerta se abrió dejando ver a Bill con los ojos rojos como si hubiera llorado por un gran rato pero a Tom no le importo y camino para bajar e ir directo al carro.

-Bill..- caminé hacia el mirando su rostro mientras sus ojos estaban cristalinos, pase una mano por su mejilla haciendo que este me viera y me abrazara dando chillidos a lo cual solo lo abrace pasando mis manos por su espalda masajeando en círculos. -Calma... todo estará bien ¿si?- este se despegó de mi para luego mirarme y asentir.

-Gracias Megan..- limpio su rostro y bajo.

Bajaba tras el, con el miedo recorriendo mi cuerpo y la tristeza de ver a Bill en ese estado, pero aún no estaba en confianza para preguntar lo sucedido, solo quería hacerle saber que mientras estuviera ahí.
Siempre contaría conmigo...

Al salir de la casa pude ver a Bill ya en su auto y Tom recargado en el suyo de lado de la puerta del copiloto. Caminé hacia Tom quien me había hecho una seña de ir hacia el.

Pego su cuerpo al mío dándome la vuelta para ahora ser yo la que estuviera pegada en el auto. -¿No te dije que te veias hermosa?- Me dio una sonrisa, agarro en un movimiento brusco mis mejillas con fuerza acercándose para darme un beso. -you are my favorite bitch.- dijo eso en mi oído para luego mirarme y darme otro beso, su voz había sonado ronca y eso me hizo sentir saqueada pero no quería decir nada.