A alguien allá arriba le gusto

Capítulo 2: Hacia el caos

Resumen:

Esta es la historia de un aventurero llamado Bell Cranel. Bell tampoco es tu aventurero normal de todos los días, no, de hecho, es uno sin bendiciones. Nadie lo aceptaría en su Familia, debido a su aspecto débil. Dejando a Bell con una última opción para asegurar sus sueños. Mira cómo Bell se convierte en el primer aventurero no bendecido en ingresar a la mazmorra. Anda con cuidado, joven héroe... Los dioses no están contigo aquí... ¡Aún!

Descargo de responsabilidad: no soy dueño de DanMachi ni de ningún personaje de la novela ligera. Apoye el lanzamiento original comprando el manga, la novela ligera y el anime cuando esté disponible. Busque en Google Play si desea comprar la novela ligera como lo hice yo. Sin embargo, soy dueño de esta idea de la historia y de cualquier nuevo personaje original o monstruo que use.

Notas del autor: Bueno, bienvenidos al capítulo dos. No tengo mucho que decir aquí, así que no olvides revisar. Cuanto más revisas, más siento que la gente quiere otro capítulo lo más rápido posible. Además, la canción que escuché mientras escribía la batalla del jefe fue Dark Master of Shadows. Te recomiendo escucharlo mientras lees la batalla. Lo hace más épico, créanme en eso. Con todo lo dicho, saltemos directamente al tema.

Cita del personaje del día: " Sigue huyendo de mí... Mientras me pregunto por qué. ¿Alguna vez aprenderé qué lo hace tan fuerte, tan rápido? Necesito saber, para que yo mismo pueda ser más fuerte. Él me recuerda de un conejo que se sobresalta rápidamente, tan temeroso, nervioso, tranquilo, suave y lindo- ¡O-olvida que dije algo!" ~Aiz Wallenstein

Historia: Le gusto a alguien allá arriba

Capítulo 2: Hacia el caos

Estaba en mis últimas piernas, eso lo sé. Mis opciones se estaban reduciendo a nada. No iba a lograrlo si seguía así. No, sabía que no iba a lograrlo en este punto. Toda esta semana de buscar una Familia a la que unirse fue un esfuerzo infructuoso. Debería haberme dado cuenta de esto mucho antes. ¡Yo tampoco podía esperar más a que me respondieran! No, tenía que tomar una decisión ahora mismo. Encuentre un trabajo y espere a que alguien me lleve a su Familia, o... entre al Calabozo solo.

No tenía dinero para gastar en comida y equipo. Había estado durmiendo en un callejón al lado de una panadería y una tienda de ropa desde que llegué a la ciudad de Orario. Me había asegurado de no desperdiciar mi dinero pasando mis noches en un hotel que me desangraría en un solo día. Si encontrara un trabajo, estaría durmiendo en las calles por un tiempo mientras esperaba ahorrar suficiente dinero y conseguir un lugar donde quedarme. Un buen lugar para quedarse costaba alrededor de ochocientos mil vails. Fue la elección inteligente que era seguro. Tomaría algo de tiempo lograrlo con los salarios terribles, pero al menos no estaría luchando contra monstruos abrumadores y tendría muchas posibilidades de patear la lata demasiado pronto.

Luego, existía la posibilidad de que me encontrara con la Diosa al azar que estaba buscando personas para unirse a su Familia de la que escuché. Había estado tratando de encontrarla durante los últimos días cuando escuché por primera vez sobre ella. Obviamente no la había encontrado o no estaría en esta situación. Era una posibilidad improbable que me encontrara con ella. Es posible que alguien más ya se haya unido a su Familia ya que no había oído nada más sobre ella en el último día más o menos. Eso y si la busco en este momento, tendría hambre al día siguiente si no la encontrara. No tengo dinero, lo que significaba que tendría que luchar hasta el Calabozo con hambre. Lo cual sabía que era una locura.