Y aún así te esperé ✨️Draco Malfoy✨️

La verdad

POV AIRAM:
Al terminar de leer la carta mi vista se nubló más de lo que ya estaba, en estos momentos solo podía ver cómo le caían mis lagrimas a aquella carta. Estaba tan sorprendida, confundida y triste, yo creo que la última vez que lloré así fue cuando me enteré que Draco se iba a casar con Astoria, hace mucho no sentía tanta impotencia y dolor al mismo tiempo.
Por supuesto que si esta carta me hubiera llegado hubiera hecho todo lo posible por rescatar a Draco de ese matrimonio arreglado, no solo por estar a su lado, si no también por su felicidad, pero de algo estaba segura, él sufrió igual que yo todos estos años, y de seguro se sintió mas decepcionado de lo que yo me sentí. Había muchas preguntas rondando por mi cabeza, pero las que más me molestaban eran: ¿Por qué esta carta nunca llegó a mis manos? Y ¿Cómo le hizo Draco para recuperarla después de tanto tiempo?
Hay algo muy característico de mi personalidad, y eso es que soy muy impulsiva, revisé la hora, eran las diez de la noche, no era tan tarde, por lo que me dispuse a ir a hablar con Draco, quería respuestas y las quería ahora, tomé un poco de polvos flu, quiero creer que Draco sigue durmiendo en la misma habitación, así que voy a aparecerme en su chimenea, lo gracioso es que yo podía equivocarme en aparecerme en otros lugares, menos en la habitación de él, en esa nunca falle, digamos que tengo mucha práctica, porque el último año de nuestra relación me la pasaba con el ahí.
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Cuándo llegué me la pensé dos veces antes de abrir los ojos, tal vez lo que estoy haciendo es muy incorrecto, pero necesito hablar con él y saber realmente que es lo que siento respecto a esta situación, sé que todavía hay amor para él en mi corazón, pero no sé si realmente después de leer esa carta lo haya perdonado por completo. Cuando abrí los ojos ahí estaba él, sentado en su sillón de cuero con un vaso de wiski en la mano, estaba sonriendo, él sabía que esto iba a pasar, porque después de todo este tiempo el me seguía conociendo. 
-Te estaba esperando, ángel.
-Lo sé, a veces soy predecible, Malfoy. - dije mientras me sacudía los polvos flu.
-No, eso no es, te conozco mas que tu misma, y sabía que ibas a venir en cuanto te enteraras de la verdad, al fin y al cabo, sabes que mi chimenea siempre estará abierta para ti, mi amor.
-Bueno, ya que sabes a que vine, empieza a hablar.
- ¿Qué quieres saber?
-Quiero saber el porque nunca me llegó está carta.
-Bueno, eso es fácil de explicar, lo mereces saber. Astoria se hizo cargo de eso, ella fue la causante de que nunca te llegara, se encapricho en tenerme a su lado y desapareció la carta para que nunca la recibieras.
-Lo sabía!, esa perra nunca me cayó bien, siempre haciéndose la muy mustia, pero en el fondo también estaba echada a perder, y perdón por hablar asi de tu difunta esposa, pero se lo merece, ¿cómo una persona puede llegar a ser tan egoísta y despreciable? - dije mientras las lagrimas de enojo se empezaban a asomar en mis ojos.
-Entiendo el enojo que sientes en estos momentos Airam, pero te pido de favor que bajes la voz, Scorpius te podría escuchar y lo menos que quiero es que te escuche hablar así de su madre. - él tenía razón, podía lastimar a su hijo con las palabras que acababa de decir, y eso me hizo sentir muy apenada.
-Perdón, tienes razón, pero como quieres que reaccione si esa mujer es la culpable de mi desgracia, a ti al menos te dió un hijo, pero a mi me quitó a quién más amaba, hizo que me quedara sola. Todo este tiempo tuve un resentimiento gigante hacía ti, no sabes cómo sufrí porque pensé que no habías regresado por que me dejaste de amar, de golpe y sin avisar, y por eso decidiste casarte con ella, porque pensé que la habías amado más de lo que algún día me llegaste amar a mí. - dije mientras seguía llorando.
- ¿Cómo pudiste pensar eso, ángel?, yo te juré amor eterno, y tal vez soy un cobarde, pero no un mentiroso.
- ¿Por qué no me buscaste después de tú boda?, tal vez así nos hubieras ahorrado más tiempo, y solo tal vez así hubiéramos podido estar juntos.
-Porque pensé que estaba respetando tu decisión, tal como decía en la carta, si no ibas por mi lo entendería, creí que ya no me querías volver a ver, quise ahorrarte una molestia, perdón.
-pues al parecer los dos no equivocamos es asumir cosas, porque así como yo asumí que me habías dejado de amar, tu asumiste que me había rendido por lo nuestro, nuestra relación era lo más preciado que tenía, en qué cabeza cabe que me iba rendir tan fácil, eso era una señal de que algo no andaba bien.
-Pues tienes razón, después de la boda te dejé de esperar, y traté de aceptar mi realidad.
-Que irónico Draco, yo te estuve esperando dos años desde que te fuiste, después de tu boda te seguí esperando, y ni se si algún día deje de hacerlo, pero, todos en mi alrededor me decían que te olvidara porque tú ya habías hecho tu vida lejos de mí, aparte no había señal de tu regreso, pero aun así con todas esas señales yo aun así te esperé. - era la verdad, todo este tiempo seguí teniendo un poco de esperanza de que él regresara, porque aparte de impulsiva soy ilusa. Él no contestaba, solo miraba al suelo. - ¿no piensas decir nada, Draco?
-No sé qué contestar, tienes razón, en esta ocasión la que más sufrió fuiste tú, y en verdad estoy muy apenado por haberte dejado esperar tanto tiempo, tuve que hacer más de lo posible para regresar por ti, pero llegó un punto en dónde se me terminaron las opciones, y creí que lo mejor era que yo estuviera lejos de ti, todos saben que nunca te hice bien.
- ¿Lo dices por lo de Voldemort? Draco, eso nunca me importó y te lo dije un millón de veces. Tu si me hacías bien, porqué me hacías sentir amada, y para mí eso era más que suficiente.
Nos quedamos viendo fijamente a los ojos, en este momento ninguno de los dos sabía que decir y ni que hacer, estábamos tan sorprendidos por las declaraciones que en este momento estábamos en blanco, pero al menos después de tanto tiempo por fin nos dijimos la verdad.
-Yo nunca te eh dejado de amar, Airam. - el terror se presentó en mi mirada, yo sabía que tampoco lo había dejado de amar, pero no estaba dispuesta decírselo en este momento, no puedo. - ¿acaso tú si me dejaste de amar, mi ángel?
-Al igual que tu seguí, no me podía quedar esperándote toda la vida, Draco.
-Ya tienes a alguien, ¿no es asi? - preguntó con la voz temblorosa. No quería contestar esa pregunta, lo iba a lastimar más- pero claro que ya tienes a alguien, ¿Quién es? ¿Lo conozco?
-Ya es tarde, Draco, tengo que volver a mi casa, mañana tengo que trabajar. - estaba por irme, cuando me toma del brazo para ponernos cara a cara.
-Airam, te pido de favor que contestes mis preguntas, la duda me estaba volviendo loco.
-Estoy saliendo con Fred, desde hace unos meses mantengo una relación amorosa con él. - y por fin lo dije, casi nadie sabía de esto, por lo mismo que lo quería mantener en privado, Fred lo entendía y respetaba mi decisión, ni mi hermano sabía de mi romance.
-Airam, ¿Lo amas más de lo que me llegaste a amar a mí? - me negaba a contestar esa pregunta, tal vez muchas cosas no estaban claras, pero de lo que si estaba segura es que nunca eh vuelto amar con tanta intensidad como amé a Draco. - ¿Qué tiene él que hace que no lo dejes para regresar conmigo?
-Con él las cosas son más fáciles, no nos complicamos juntos.
-Nunca fuiste de las que se iban por el camino fácil, ¿por qué no te arriesgas en volverte a quemar conmigo?, déjalo Airam, hay que volver a estar juntos.
-Que fácil es decirlo, pero ya no somos unos adolescentes para dejar todo atrás con tal de estar juntos, tu tienes un hijo y yo tengo novio, tenemos que pensar en cómo repercuten nuestras decisiones, ¿Acaso crees que a tu hijo le agrade que empieces a salir conmigo a un mes de la muerte de su madre?, madura Draco, lo nuestro no se puede repetir.
- ¿Y cómo se supone que siga la vida sin ti?
-Igual como lo has hecho estos últimos once años. Me tengo que ir, tal vez otro día podamos seguir hablando.
Desaparecí de su vista, un minuto más a su lado y me iba a convencer de dejar todo atrás para estar juntos, después de todo Draco siempre me convencía, pero en esta ocasión no puedo darle el lujo de conseguir lo que quería, la situación es más complicada, ser egoístas lastimaría a terceros, y eso es lo menos que quería.
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Cuando llegué creí que por fin podría descansar y despegar mi mente, pero las situaciones incomodas seguían, cuando llegué a mi habitación en ésta se encontraba Fred esperándome, ya se me había echo costumbre que llegara de sorpresa en las noches, pero ahora si estaba nerviosa, ¿cómo se supone que le diga que vengo de ver a mi exnovio?
-Llegas tarde del trabajo, amor. - dijo Fred.
-Si, es que tenía muchos animales que clasificar. No sabía que ibas a venir hoy Fred.
-Me gusta sorprenderte, así es más especial nuestros encuentros.
-Tienes razón, ¿Cómo te fue en tu viaje de negocios?
-Bien, abrimos una tienda en Francia.
-Me alegra mucho, cariño.
-Ven darme un beso, hace mas de un mes que no nos vemos.
Me posicione enfrente de él y pase mis manos atrás de su cuello, puso sus manos en mi cintura acercándome lo más posible a él, nuestras miradas se conectaron mientras nuestros labios se rozaban, por fin él dio el siguiente paso, unió nuestros labios, hundiéndonos en un beso apasionado, mediante que éste se fue intensificando bajo sus besos a mi cuello. Los dos nos necesitábamos, eso era más que evidente, yo necesitaba sacar todo el estrés y Fred era muy bueno para eso, y ahí en mi habitación después de un día lleno de verdades pasé la noche junto a Fred, en dónde nos entregamos el uno al otro.