Capitulo 6

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GAEL

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GAEL


Mientras paseo por la calle con Balto a mi lado, decido soltarle la correa para que pueda disfrutar de un poco de libertad. Balto aprovecha la oportunidad y sale corriendo, lleno de energía y emoción. Sin embargo, su entusiasmo lo lleva a detenerse en medio de la carretera justo cuando un coche se acerca rápidamente.

— ¡Balto, cuidado!

El coche frena bruscamente al ver a Balto en su camino. Mi corazón se acelera por un momento, pero rápidamente me acerco al vehículo para ver a Malia salir asustada. Ella mira a Balto en el suelo y se preocupa.

— ¡Dios mío!, ya lo que me faltaba— dice asustada— Soy una mata perros.

Me agacho junto a Balto, con una sonrisa divertida en mi rostro, cuando le veo que se está haciendo el muerto.

—Venga, arriba, chico.

Balto se levanta rápidamente y empieza a ladrar enérgicamente, como si estuviera mostrando que todo fue parte de su sentido del humor. Malia lo ve y pregunta.

— ¿Se hacía el muerto? — me mira aliviada.

—Sí—me rio— así es Balto el fiambre, tiene un sentido del humor bastante peculiar.

Malia suspira aliviada y divertida, acercándose para acariciar la cabeza de Balto. Luego, ella lo toma en brazos.

—No sé si me hubiera perdonado si te hubiera pasado algo, Balto.

—Vaya, parece que le gustas chaval— mientras sonrió a Malia y acaricio la cabeza a Balto.

—No tanto— me entrega a Balto, para irse a su coche— Nos vemos en la tienda.

Mientras veo cómo se sube a su coche, no puedo evitar reírme de la situación. Balto y yo nos despedimos de Malia, sabiendo que pronto nos volveremos a encontrar. Continuamos nuestro paseo, agradecidos por la divertida y tierna interacción que acabamos de presenciar.

Estoy en la tienda, con Malia, mientras trabajamos juntos en el inventario. De repente, ella hace un comentario sobre cómo los perros estarían menos deprimidos si la tienda no fuera tan deprimente. La miro con una ceja levantada, sin entender a qué se refiere.

—Explícate.

— ¿No te has dado cuenta de que esto es un poco... aburrido?

—No tenemos tanto dinero para hacerlo menos... aburrido.

—No hace falta mucho para tener estilo. Después de vivir tantos años con Dava, que es una loca de la moda, te digo que puedo hacer que la tienda luzca increíble. El otro día encontramos juntas unas gafas vintage de Tortoise Shell en un mercadillo por 15 euros, cuando normalmente en una tienda cuestan 200.

SURF FURY. ¡Desafiando las olas!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora