―He adelantado un día en venir porque anunciaban lluvias y quería ir a la playa, y no va a poder ser con la que está cayendo. Han informado que seguirá igual un par de días. ¡Que mala suerte tengo! ―comentó Lizzy.«¿Mala suerte?». A punto estuve de reír.
Regresé a casa poco minutos después de que Jones, Tyler o Tyler Jones se fuera. Ya me daba igual cómo se llamara. Diez minutos más tarde llegó Lizzy. Debido al mal tiempo no podría disfrutar de su día de playa, así que decidimos regresar a Sheffield al día siguiente. Recordé la invitación de Raven para almorzar con ella antes de irnos. La llamé y acordamos cambiar el plan para una cena esa misma noche en su casa. En realidad era la casa de su padre. Pero él se pasaba de tarde en tarde ya que residía en Londres. Cenamos en la cocina. Era grande y hacía la función de comedor. Y allí me encontraba, intentando masticar la comida y mis pensamientos.
―¡Tengo ganas de que nazca Brandi !―exclamó Poppy―. Helena, ¿la niña tendrá el color de ojos azul de mi tío Niall o de Brenda?
―No lo sé. En mi familia solo hay ojos marrones, unos mas claros que otros.
―Los tuyos son muy oscuros. Brenda los tiene más claro ―analizó―. Puede que los vaya a tener verdes; como mi abuelo, mi madre y yo.
―Poppy, no puede tener los ojos verdes porque…
―Ya sé que mi abuelo no es el papá de tío Niall, pero mi abuela Adelys es su mamá y quizá… ―la interrumpió mientras Raven le negaba con la cabeza―. Ya… la abuela los tiene azules. Bueno, da igual, tengo ganas de conocer a mi prima.
―Todas tenemos ganas. Pero nos toca esperar a que llegue noviembre. Yo creo que vamos a tener una misteriosa, enigmática y altamente intuitiva mujer como toda Escorpio, claro si nace antes del 22 ―aseguró Lizzy emocionada.
―Yo creo que nacerá después y será Sagitario ―apuntó Raven.
―Entonces será aventurera, entusiasta y optimista, porque les encanta aprender y experimentar cosa nuevas.
A Lizzy le atraía todo lo esotérico. La conversación siguió sobre sus signos de zodiaco. Del mio ya sabía bastante por ella, en el que me describía como una mujer Virgo disciplinada, ordenada y muy observadora, capaz de notar incluso los detalles más pequeños.
Saqué mi lado observador para mirar las fotografías que había colgadas en la pared donde estaba situada la mesa.
―Mira esa ―señaló Poppy a la pared. Tampoco le interesaba la conversación de su madre y Lizzy―. En ella estamos mi abuelo, mi mamá, Brenda y yo. Fue cuando nos conocimos y vino una noche a cenar. Yo era un bebé y no me acuerdo.
―Vino con Grace a pasar unos días. ―Mi hermana llegó para recuperarse en tanto que yo seguía ingresada en el hospital.
Poppy se levantó y me hizo una seña con la mano para que la siguiera. Su madre iba a protestar pero hice un gesto con la cabeza para que no le llamara la atención. Prácticamente habíamos terminado de cenar y no me molestó ir con ella. Fuimos a la pared expuesta de fotografías enmarcadas y comenzó a recitar los lugares y nombres de algunas personas. En gran medida, de los diferentes restaurantes de su abuelo. Imágenes de él con sus empleados. Otras junto a su familia y amigos. En su mayoría se sabía quienes eran según iba señalando. Y sin contar la fotografía en la cual aparecía Brenda, llegó a una que no era necesario mencionar quién aparecía.
―Son tía Jinny y tío Tyler. Él también tiene los ojos verdes.
―¿Tu tío? Creía que solo era Niall. ―Era como el juego de la oca, la expectación de cual sería la próxima casilla en caer.
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Hilo y aguja
Romance[ Libro II serie Lowell ] Ante la insistencia de su socia, Helena, concierta una cita con una tarotista. Lo que comienza emocionante, agradable y con humor; desemboca en incredulidad, misterio y desazón. A raiz de esa cita, decide en unas vacacion...