Soy Ranpo Edogawa, ¡el mejor detective del mundo!
Gracias a mis cualidades, hoy aprenderás conmigo a quitarle esa "timidez" a tu novio.
Spoiler: sale mal.
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☆La historia es de mi total propiedad. N...
Heyheyheyhey. Aquí tendremos a un Ran-pito, haciendo cosillas no aptas para. . . No sé. 🐺
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Poe había partido hace algunas semanas en un viaje de trabajo, dejándome atrás con días monótonos y aburridos. Mis rutinas se limitaban a visitar la agencia, comer, volver a casa, ducharme y dormir, sin casos interesantes que resolver. La vida carecía de emoción sin la presencia de Poe.
A medida que se acercaba el día de su regreso, decidí ocuparme limpiando un poco, aunque la mayor parte del trabajo la hizo Atsushi, a quien cansé con mis instrucciones. Exhausto, me dejé caer en la cama, esperando conciliar el sueño en una posición cómoda.
Sin embargo, mi mente se llenó de imágenes intrusivas que interrumpían mi descanso. Me vi a merced de Poe, disfrutando de su dominio y entregándome a sus deseos sin reservas. Anhelaba sentir sus manos recorrer mi cuerpo, tomarme con firmeza y dirigirme a su antojo.
Deseaba que mis labios exploraran cada parte de su ser, que me agarrara del cabello y me guiara en un baile de pasión. Ansiaba abrirme completamente para recibirlo, que me hiciera gemir de placer toda la noche.
Sentía una urgencia imperiosa de que sus labios y lengua se ocuparan de mis pezones, que los acariciara y succionara con deseo. Inconscientemente, tomé uno de mis pezones entre mis dedos y lo apreté, sintiendo un jadeo escapar por la excitante sensación.
Imaginé cómo Poe introducía sus dedos en mi boca, preparándome para lo que vendría. El pensamiento de que se corriera en mi boca y yo lo recibiera con gusto me hizo estremecer de deseo.
Decidí explorar mi propio cuerpo, lamí uno de mis dedos y lo introduje con cuidado en mi interior. Gemí por la sensación desconocida, pero continué moviéndolo dentro y fuera rápidamente, disfrutando de los sonidos obscenos que producía mi cuerpo.
Añadí un segundo dedo, abrí un poco más mis piernas, imaginando a Poe entre ellas. La necesidad de él me consumía.
Finalmente, introduje un tercer dedo y, al sentirme lo suficientemente dilatado, alcancé un orgasmo intenso y anhelado. Mis piernas temblaron y saqué los dedos de mi interior, sintiendo la satisfacción recorrerme.
Al abrir los ojos, me di cuenta de que las sábanas estaban manchadas. Tenía trabajo que hacer.
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En el siguiente se viene interacción entre dos seres que necesitan tener una vida sexual porque sí. 🤗
Quepenita.
El siguiente es más largo, lo juro. ☝️
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