Después de cambiarme rápidamente el vestido; por uno estilo boho, corto con escote en pico y de color blanco, volvimos a bajar y la música se escuchaba por toda la planta baja del resort. En la zona exterior, junto a la playa, había luces y una fiesta bastante abarrotada por los clientes. Cuando llegamos al lugar, vimos que nuestros acompañantes aún no estaban listos, así que nos adelantamos y nos colocamos en una mesa de pie mientras pedíamos algo en la barra.
- Dile que ya estamos aquí. - Pidió Lena con normalidad
- ¿Yo? - Pregunté un poco agobiada. Nunca había intercambiado ningún mensaje con Sean y no se porque iniciar el chat me ponía nerviosa.
Lena enarcó una ceja.
- ¿Quién sino?
Mi amiga resopló y agarró mi teléfono, comenzó a teclear sobre la pantalla.
- Por favor, sé sutil. - Pedí suplicante.
Casi al instante Lena me devolvió el dispositivo y revisé el chat con urgencia. "Ya estamos aquí, os esperamos en las mesas de fuera"
- Has visto como no es para tanto. - Sonrió la rubia llevando la copa a sus labios.
Fruncí el ceño y me fijé en el nombre.
- ¿Le has añadido como "Sr. Sexy"?
Lena luchó mucho con ella misma para no reírse y se encogió de hombros.
A los pocos minutos recibí la respuesta. "Estamos en menos de dos minutos"
- Oye. - Llame la atención de mi amiga. - ¿Qué le dijiste a Sean después del discurso?
- Yo no dije nada. - Se hizo la tonta. - No sé de que me estás hablando.
Cuando quise recriminarla, las dos llamativas e imponentes figuras de Sean y Caleb entraron en escena.
- Voy a pedir. - Inició diciendo el moreno yendo hacia la barra.
Caleb se colocó junto a nosotras.
- Buenas noches. - Saludo Caleb.
- Es increíble que sea noviembre y haga esta temperatura. - Añadí yo.
- Esto es el paraíso. - Agregó mi amiga con un tono soñador.
- Me sorprende que aún no estéis por vuestra... ¿tercera copa? - Vaciló el rubio mirándose el reloj.
- ¿Qué problema tenéis todos con nosotras? - Se quejó mi amiga.
- ¿Y qué problema tenéis vosotras con el alcohol? - La voz de Sean pasó a nuestro lado y depositó dos copas sobre la mesa.
- No es para tanto. Nos gusta divertirnos. - Se exculpó Lena.
Yo lleve la copa triangular hacia mi boca, y no pude evitar ir rozando con mis labios todo el azúcar que había a modo de decoración en el borde de cristal.
Tener a Sean tan cerca después de lo que había pasado me hacía sentir algo incómoda, pero a la vez me daba esa sensación de hormigueo por el cuerpo.- Disculpa. - Hablo Lena a una chica de la mesa contigua. - ¿Nos podrías hacer una foto?
La chica, con un pelo afro espectacular, asintió sonriente y agarró el teléfono de Lena. Sean y Caleb pasaron rápido la mano por su cabello, para asegurarse de que estaba perfecto, Lena se ajustó el escote, y yo pase mi pelo hacia la espalda.
Mi amiga y yo nos colocamos entre ambos chicos. Sean colocó su mano en mi cintura, y yo puse una sonrisa inconsciente. Incline un poco la cabeza para apoyarla contra su cuerpo y quedar más cerca de él. Los cuatro sonreímos y el flash salió del dispositivo.
ESTÁS LEYENDO
Entrelazados.
Teen FictionMaya Miller no sabía que la repentina fortuna de su padre conllevaría vestirse de blanco en un altar. Tras un pacto con un cliente, Maya no tendrá más remedio que casarse con el hijo mayor del socio de su padre para que los negocios familiares prosp...