❝ Y todos los caminos que tenemos que recorrer son tortuosos, y todas las luces que nos conducen allí nos están cegando.
Hay muchas cosas que me gustaría decirte,
pero no sé cómo❞
-𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐞𝐜𝐞𝐫𝐭𝐞, 𝐆𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞𝐫. 𝐄𝐧 𝐜𝐮𝐞...
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Amelie camino junto a Hermione en un silencio tranquilo, el aire otoñal la golpeaba suavemente en el rostro. Ambas habían pasado la tarde junto a Theo tratando de buscar a sus mascotas por cualquier rincón de Hogwarts. Sin embargo, no hubo rastro alguno de Augusta, es como si la tierra se la hubiera tragado y o tal vez algo más. Amelie había estado nerviosa desde entonces, estimaba mucho a su querida Gus como para simplemente darla por perdida.
Además su madre estaría enojada por su irresponsabilidad.
"Gus estará bien, ya lo verás" Hermione le sonrío para tranquilizar, se acercó para darle un pequeño empujón con su hombro de manera suave.
"Eso espero. No puedo imaginar una vida sin ella" murmuro un poco avergonzada de exponerse así, para algunos (Draco) era un simple gato que podía remplazar con facilidad, pero para ella no. Nunca.
Hermione se rió ligeramente, si había algo que le gustaba mucho de Amelie era su forma de tratar a cualquier ser vivo como una parte fundamental de ella.
A menos que se tratara de la rata muerta de Ron.
"¿Quieres acompañarme con Hagrid?" Movió la cabeza señalando la cabaña, donde se podía ver claramente el humo salir de la pequeña chimenea. "Necesito hablar con él de algunas cosas..." Termino por decir.
Amelie llevó sus ojos grises hasta ella, Hermione se veía algo estresada si se lo preguntaban, sus ojeras no habían mejorado en absoluto, su cabello esponjoso se movía con el viento provocando que estuviera más revoltoso de lo normal, aún así lucia bonita para la chica a su lado, podía robarle un suspiro con facilidad.
"¿Has estado durmiendo bien?" Su voz más suave, como si pensara que su falta de sueño se debía a algo grave, problemas familiares quizás.
O tal vez solo ella estaba traumada con eso. Quién sabe.
"¿Por qué lo preguntas?" Respondió frunciendo las cejas levemente con curiosidad.
"Primero voy aclarar que te ves bonita..." murmuro alejando sus ojos cuando Hermione la miró atentamente. "Pero también te noto cansada, como si en cualquier momento te fueras arrojar de la Torre de astronomía" Se encogió de hombros.
Ambas bajaron la pendiente con calma, sus pies tocaban el pasto verde recién cortado, algunas hojas estaban esparcidas por el lugar y crujirán con cada paso que daban. El otoño había llegado y la frescura se respiraba en el aire.
"Oh, es que las clases son algo pesadas, solo es eso..." Su voz ligeramente nerviosa, como si ocultara algo.
"Entiendo, yo podría ayudarte con tus tareas si gustas" Se ofreció tendiéndole la mano para que pudiera bajar con cuidado ya que el pasto estaba resbaladizo por alguna razón desconocida.
