❝ Y todos los caminos que tenemos que recorrer son tortuosos, y todas las luces que nos conducen allí nos están cegando.
Hay muchas cosas que me gustaría decirte,
pero no sé cómo❞
-𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐞𝐜𝐞𝐫𝐭𝐞, 𝐆𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞𝐫. 𝐄𝐧 𝐜𝐮𝐞...
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Amelie caminaba con tranquilidad por el túnel, después de encadenar a Pettigrew con unas esposas a la mano de Ron y Lupin, todos decidieron regresar lo más rápido posible al castillo.
Regresaron con dificultad a través del extenso túnel oscuro. Al frente de Amelie iban Sirius y Harry, quienes tenían una agradable conversación, detrás de ellos estaba Orion, el cual solo escuchaba atentamente cada palabra.
Amelie y Hermione cerraban la marcha, junto con el profesor Snape, quien flotaba en el aire de manera fantasmal y aveces se golpeaba la cabeza contra el techo, pero Amelie decidió ignorar eso. En cambio su atención estaba en la mano de Hermione que se aferraba a la suya con fuerza, como si no quisiera soltarla.
No le pareció ningún problema, porque ella tampoco quería alejarse.
"¿Estás bien?" susurró Hermione después de unos segundos de silencio entre ellas.
De fondo se podía escuchar la platica animada de Sirius.
"¿Eh?..." murmuro parpadeando un par de veces para alejar su vista del sucio túnel, había estado perdida en sus pensamientos. "¿Por qué lo preguntas?"
"Bueno...nos hemos enterado de cosas muy profundas y, solo quiero saber que estes bien" dijo dándole un pequeño apretón a sus manos unidas.
"¿Se me permite mentir?" murmuro tratando de sonar alegre pero, no lo estaba.
"Amelie...entiendo si no te sientes bien, no tienes que explicarme nada pero, quiero que sepas que estoy aquí. ¿Ok?" le dio una ligera sonrisa cálida, tratando de demostrar su punto.
Y para Amelie, cualquier cosa que Hermione hiciera le parecía fascinante.
"Gracias, Hermione" susurró por lo bajo, con las mejillas ligeramente rojas.
Era la primera vez que pronunciaba su nombre consciente de ello.
Hermione en lugar de responder, sólo acercó más su cuerpo a ella, rozando ligeramente su hombro con el suyo.
"¿Y tú qué me dices, Amelie?" habló de repente Sirius a su frente.
"¿Qué...?" cuestionó completamente perdida en su conversación.
"¿Quisieras venir a visitarme? Ahora que seré libre pensé que podíamos llevarnos bien, ya sabes, como antes". Habló con una gran sonrisa auténtica.
