≻───── ⋆✩⋆ ─────≺Amelie estaba tranquilamente babeando en su manta, pasó la mayoría del tiempo antes de que llegaran sus compañeras de cuarto, intentando arreglar la mochila rota de Hermione, esperando que su buena acción fuera suficiente para que ella la perdonara, aunque no sabía si estaba realmente enojada.
Pero si Amelie hubiera estado en su lugar se sentirá decepcionada más que nada, inclusive le daría la ley del hielo por un par de semanas, por supuesto que se trata de su criterio, no el de Hermione, a quien veía más como una persona que no guarda rencor, una persona tranquila y ejemplar.
Claro que no la conocía mucho, solía solo verla cada vez que entraba en el comedor, o cada vez que iba a la biblioteca y ella estaba ahí por casualidad, o incluso en clases donde ocasionalmente la observaba de reojo sintiendo curiosidad por alguien como ella; fue por eso que se cuestionó todo lo que alguna vez su "maravilloso abuelo" le enseñó; siempre confió en sus palabras, no tendría ninguna razón para mentirle ¿verdad?.
Amelie estaba en un abismo donde obedecía más a su mente que a su corazón.
Por ello sus emociones fueron confusas en los dos primeros años, aún más cuando se dio cuenta que la hija de muggles era mucho más inteligente que ella, se sabía los libros de memoria y sus calificaciones eran impecables.
Al principio un gran sentimiento de angustia la invadió, sobretodo cuando recibía cartas de Alphonse con miles de regaños, ¿y es qué cómo era posible que una "sangre sucia" fueran mucho mejor que su nieta?. Estaba mal, era algo de vergüenza, la deshonra total hacia su apellido.
Y lo creyó, pasaba horas en la biblioteca exigiéndose demasiado solo para que él estuviera feliz, pero por más que hacía de todo, nunca podía satisfacer los estándares tan altos que su familia le puso.
Precisamente por eso recurrió por primera vez a su padre, quien siempre se mantenía al margen porque su abuelo no lo dejaba acercarse a ella, a pesar de que era su propia hija. Era como si su abuelo la tomara como un objeto que puede simplemente arrebatar a su primogénito.
Que sensación más horrible sentirse de esa manera.
Amelie cedió ante las palabras amables de Laurent, quien con un poco de inseguridad le habló acerca de una amistad pasada quien cambió todo dentro de él, porque claro que también fue un sangre pura arrogante y malcriado. Sin embargo, por cosas del destino al final tuvieron que separarse por siempre, Amelie lo había escuchado atentamente no perdiendo el hilo de la historia ni por un segundo, y se preguntó ¿cómo era posible qué su padre cambiara de opinión tan rápido?, entonces ella se dio a la tarea de descubrirlo.
Observó a Hermione cada vez que ella lo hacía, e incluso en ocasiones cuando no la miraba, siempre con el pensamiento de que solo lo era para tener un punto de vista diferente, uno que le permitiera cambiar su integridad moral que había sido modificada con el tiempo.
Ella siempre había sido alguien amable y trabajador, ayudaba a su elfo cuando lo necesitaba, e incluso prefería no meterse en problemas con nadie, pero si era necesario defendería a cualquiera de una injusticia, si vieran esa facetas suyas probablemente dirían que era una perfecta Hufflepuff.
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"WONDERWALL; Hermione Granger"
Fantascienza❝ Y todos los caminos que tenemos que recorrer son tortuosos, y todas las luces que nos conducen allí nos están cegando. Hay muchas cosas que me gustaría decirte, pero no sé cómo❞ -𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐞𝐜𝐞𝐫𝐭𝐞, 𝐆𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞𝐫. 𝐄𝐧 𝐜𝐮𝐞...